Capitulo 2

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CAPITULO 2

 

Por fin el día había llegado. Hoy Harry saldría a buscar a Louis, ya que sentía que tenía el valor y sobriedad necesaria para pedirle otra oportunidad para empezar todo de nuevo.

Quería verlo, abrazarlo, besarlo, protegerlo de todos los peligros del mundo y entregarle todo el amor que no le había dado durante estos 4 años. Estaba tan nervioso y emocionado por verlo que sentía que su corazón se le saldría por la boca, pero, ¿En dónde lo buscaría?

Estaba tan entusiasmado por volver a ver a su esposo que se le había olvidado completamente ese pequeño detalle. Probablemente ya no estaba en Londres… ¿o sí?

La verdad no tenía ni la menor idea de donde se encontraba el menor, pero estaba seguro que lo encontraría.

Tras pensarlo por unos minutos no se le ocurrió nada más brillante que llamar a su propia madre, Anne. Jay, la madre de Louis, y su madre siempre se habían llevado de maravilla: a veces salían a tomar un café, otras veces se pasaban por la casa de la otra y se mantenían en  un contacto constante.

Estaba seguro de que Jay le habría contado a su madre acerca de Louis y de su actual vida. Además de que no tenía el valor suficiente como para llamar personalmente a la madre de su ex marido después de todo lo que pasó entre ellos.

Busco su móvil en los bolsillos de su pantalón y abrió la carpeta de sus contactos. Fue directo a la letra “A” pero no la encontró por ningún lado, después se le ocurrió buscar en la “M” pero tampoco existía ningún contacto con el nombre de “Mamá”.

Reviso 3 veces la lista de contactos pero no encontró en ninguna parte el número de su madre. Con coraje arrojo su móvil al suelo y se recostó boca arriba sobre la cama. De pronto lo recordó todo.

En su trabajo en la compañía, era necesario cambiar de teléfono celular anualmente, ya que necesitaba estar muy actualizado en ese ámbito. La última vez que lo cambio, olvido totalmente agregar el número de Anne.

Desesperadamente corrió hacia un pequeño cajón en el escritorio de su habitación. Ahí solía guardar tarjetas de presentación de socios o presidentes de otras compañías con las que él trabajaba, pero también papelitos importantes con números telefónicos.

Sacó todas las pequeñas tarjetas y fue tirándolas de una a una al suelo, al ver que no eran lo que buscaba. Al no encontrar el número en el gran bonche de tarjetas, tomó el cajón y tiro todo su contenido sobre su cama.

Solo había papelitos sin importancia con recados para el rizado, plumas y demás cosas de oficina, pero no estaba el número de su madre. Genial.

-Mierda – Enredo sus manos en sus rizos y se maldijo a si mismo por perder aquel valioso papel. ¿Ahora qué haría?

No tenía más remedio que ir a casa de su madre en Cheshire. No era un viaje muy largo, pero no quería perder más tiempo. Necesitaba con urgencia ver a Louis y explicarle todo lo que había pasado.

Cerró sus ojos fuertemente y tomo aire, se quedó en esa posición durante unos segundos más, antes de saltar de la cama, tomar su abrigo y partir hacia la casa de su madre.

Encendió su auto y prendió la radio perdiéndose en la música, mientras se dirigía a toda prisa a casa de Anne.

-Nos veremos muy pronto, bebé Lou – susurro para sí mismo – Te lo prometo.

Don't you remember? (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora