(Sousuke x Rin) Mis sentimientos por Rin

Esta noche

Han pasado cinco años desde el día en que te tuve que decir adiós, aunque parece como si recién ocurriera todo lo de esa horrible noche, de solo recordar la llamada de tu hermano siento helada mi sangre, aun no comprendo cómo es que se te ocurrió hacerlo, habías prometido estar siempre conmigo, me dijiste que sanarías para que volviéramos a nadar juntos, para volver a ser ese equipo de ensueño que habíamos formado.

No te importo ver a tu familia sufrir, tus amigos menos, pero sobre todo no te importo dejarme solo, es decir siempre habías estado para mí, no te perdono, no claro que no, eres un idiota que solo pensó en sí mismo, no sabes cuánto te he odiado desde ese día.

El día de tu funeral estuvimos todos presentes, todo el equipo de Samezuka, tus supuestos amigos, Nitori, Momo estaban en completo shock y como no estarlo si se suponía que tú eras el más fuerte de todos, eras el que siempre estaba en nuestros momentos de debilidad, nuestra roca, y que de un momento a otro ya no estuvieras, que te hubieras ido de esa forma tan cobarde, nadie lo comprendía, queríamos creer que era una broma pues como era posible que tu Sousuke Yamazaki te hubieras suicidado, que hubieras sucumbido ante un momento de debilidad y te pegaras un jodido tiro. Sin que decir de lo que yo sentí ese día, volver a estar en un funeral fue de lo más doloroso para mí, sobre todo porque justamente era de otra persona a la que amaba, el que siempre había sido mi mano derecha, mi mejor amigo, es decir mi hermano, había vuelto a sentir el mismo dolor que cuando mi padre murió, todo por tu culpa Sousuke, acaso tanto resentimiento me tenías como para hacer que volviera a sentir como mi corazón se rompía.

Pasaron los días y si te soy sincero seguía odiándote, seguía pensando que eran todo un idiota, ya no quería estar en Iwami, quería desaparecer, irme y olvidarte, no quería saber nada de la persona que me había abandonado, de ese cobarde, estaba por volver a Australia, para continuar mi vida con mi esposa, ver crecer a mi hijo, mi familia para nunca volver, pero justo tu hermano me dio esa carta, esa maldita carta. Recibirla fue otro golpe para mí, pues supe que era lo que habías dejado escrito en tu habitación el día en que te fuiste, pues la sola idea de que justo pensaras en mi antes de tu muerte me hizo sentir responsable.

Tuve miedo de leer esa carta, pensé en tirarla, pero al final no lo hice, pasaron meses, regresé a mi hogar en Australia, para justo continuar con todo, aunque ahora sin la motivación de algún día volver a nadar contigo.

Fue hasta una tarde que me encontré con esa carta que me arme de valor para por fin leerla y ha sido uno de los peores errores de mi vida, pues desde entonces no he vuelto a sonreír, ya que ahora sé que si fui el culpable, por mi culpa ya no estas con nosotros, conmigo y lo que más me duele es que todo se hubiera solucionado, nada de esto hubiera ocurrido si tan solo hubiera sido honesto con mis sentimientos, si no fuera un gran cobarde que solo pensaba en lo que las demás personas dijeran y no lo que en realidad quería, si tan solo te hubiera dicho —SOUSUKE, TE AMO—

Sabes, al igual que tu desde niños sabía que tú eras especial, claro no lo comprendía entonces, no entendía porque pero lo que sentía por ti era distinto a lo que sentía por mis demás amigos, contigo siempre me sentí como si fueras una parte de mí, como si fueras la única persona que me comprendiera, tú eras consciente de que incluso cuando me fui a Australia de quien más me había dolido alejarme eras tú, aun cuando perdimos el contacto con el pasar de los años nunca olvide este sentimiento, siempre fuiste esa persona especial.

Cuando nos volvimos a encontrar en Samezuka comprobé que realmente lo que sentía por ti era más que amistad, como no si justo en cuanto volvimos a hablar fue como si no hubiera pasado el tiempo, volvíamos a ser tan unidos como siempre, ese año fue maravilloso, si tan solo no hubiera sido un cobarde, pero claro tenía miedo a perder tu amistad, a que si te decía lo que sentía por ti, se acabara todo, me odiaras y te alejaras de mí, por eso nunca te lo dije, ahora sé que fue mi error, otra historia seria y quien sabe, puede que aun estuvieras conmigo.

Aunque ese año termino y de nuevo tuvimos que alejarnos para cada quien cumplir con sus metas, aunque claro nos habíamos prometido volver a nadar juntos, volver a ser un equipo y eso era todo lo que necesitaba, saber que algún día volveríamos a estar juntos, aunque solo fuera en la piscina, durante ese tiempo en el que no estuve contigo sufrí, quería volver a verte, ver tu sonrisa, verte a ti, pero no podía hacerlo, no hasta cumplir mi parte de la promesa, ser un medallista olímpico. Estaba a punto de cumplir con esto, participaría en un torneo internacional y fue cuando escuche a algunas personas hablar sobre mí, escuchar sobre lo raro que era que no conocieran una pareja mía y de nuevo apareció ese Rin temeroso de cuando era más joven, no quería que afectara en mi carrera las habladurías, además de que estaba seguro de que tu sintieras algo por mí, estaba ciego, nunca me di cuenta, como lo lamento, si tan solo no fuera tan idiota...

Por temor fue que me case con ella, claro no la amaba, mi corazón por siempre te pertenecería, más como iba a saber que tu sentías lo mismo, por eso fue que cree esa falsa vida donde estaba con una mujer a la que "amaba", claro ella no tenía la culpa, por eso fue que incluso con ella fingí amor, tuvimos un hijo y con ello los rumores desaparecieron, pero no era amor, todo era una ilusión.

Ya después que te fuiste fue que no lo pude ocultar más, la persona a la que amé se había ido, nunca volvería a verte, escuchar tu voz, nadar contigo, nunca podría decirte cuanto te amaba, cuanto te necesitaba, desde tu partida no pude volver a fingir amor, fue por eso que ella igual se fue, llevándose con ella a mi pequeño, de nuevo estaba solo, aunque ahora era más doloroso, pues ya no estaba esa persona que me motivaba a seguir, ya no estaba mi eterno amor, además de que claro seguía sintiendo que por mi culpa, por mis temores ya no estabas aquí.

Me aleje de las pocas personas que aun continuaban conmigo, primero de Haru y Makoto, su felicidad simplemente me causaba odiarlos, como es que ellos podían estar juntos y yo no podía estar con la persona que amaba, igualmente con todos los del equipo de natación, no quería relacionarme con nadie que me recordara a ti, perdí el interés por mi carrera, que motivo tenía nadar, ser un campeón si ya no tenía con quien celebrarlo, incluso de mi hermana, ella se cansó de verme tan derrotado, pero simplemente perdí mi motivación para vivir desde el día de tu partida

Y ahora aquí estamos cinco años después de tu partida, aquí frente a tu lapida y con tu carta en mis manos, quiero hacerte una última promesa y confesarte por fin mis sentimientos —Sousuke, te amo— sé que debía hacerlo hace mucho pero ya de nada sirve lamentarse. Ahora lo que quiero prometerte es que volveremos a estar juntos, esta noche volveremos a nadar, por fin podré volver a verte

Y qué mejor que hacerlo que con la misma arma que tu usaste, nos volveremos a ver...