SlamDunk: Un amor para Sakuragi

Al final

Al final Hanamichi y Midory vivieron en Japón y claro que había temporadas en las que viajaban a ver al suegro porque ¿Qué abuelo no quiere ver a sus nietos? La joven desde el nacimiento de Hana y Ryuji se dedicó al cuidado de su familia, Sakuragi entrenaba en una preparatoria a jóvenes basquetbolistas.

:::::::::::Una noche en su casa:::::::::

-No es que no quiera a mis hijos pero me da gusto que Akane quisiera llevarlos este fin de semana.

-Te imaginas lo agradecida que estoy yo tienen 4 años y tienen una energía.... sacaron ese lado de ti.

-Culpa mía! pero sacaron tus ojos...

-Ya vez, tengo yo hago niños muy hermosos...

- Y yo? también ayude he!

-Sí pero quien los cargo nueve meses y sufrió un parto de 12 horas...

-No me lo recuerdes.... ese día estaba preocupado por ustedes...

Hanamichi se arrodillo y abrió la bata para depositar mucho besos tibios en las marcas del vientre de su amada -Gracias por darme esta familia.- Cariño... tu eres el mejor esposo del mundo ¿Lo sabes? -Crees... que hoy.... bueno estamos solos y ....- Esta bien, pero no quiero más hijos por ahora, cualquier cosa te voy a echar la culpa.- Estas hablando con el rey de rebote si encesto es por soy el mejor jajajajaja.

Cargándola como princesa la llevo a la recamara y el ritual del amor dio comienzo con besos cortos y cálidos para después entregarse por completo a la lujuria y al placer volviéndose uno nuevamente después de un par de horas.

-Cariño... (acostada en su pecho)

-Dime... (abrazándola)

-Te amo.

-Yo te amo más.

  

                                                                       :::::::: PALABRAS FINALES::::::::

   Todos y absolutamente todos merecen un amor, uno donde ambas partes busquen el bienestar del otro, amar tanto como se ama uno así mismo porque solo entonces se buscara siempre lo mejor para el otro. Donde los celos no lleguen y reine la confianza, donde la avaricia no ciegue y la paciencia sea su fuerte. 

Las personas son como los libros, algunos son buenos otros son malos pero siempre habrá uno que complemente tu ser y así mismo tu historia complementara aquel libro, aquella persona, creando la aventura si bien no perfecta pero si la más hermosa que se pudiera contar jamás.

                                                                                ¡Gracias por leer SlamDunk un amor para Sakuragi!