«Esto será lo mejor, para los dos» Dio un vistazo por encima de su hombro, (T/n) parecía entretenida mirando a su alrededor «Mereces vivir una vida tranquila sin tener que lidiar con alguien como yo»

―¿Me estas llevando a tu campamento? ―La escucho preguntar―. Ah, sí me decías antes podría haber traído algo para los gatos.

Shinsou ingreso a una parte llena de arbustos, lo hizo de manera rápida, tanto así que pareció que el bosque se lo había tragado. (T/n) se quedó quieta en su sitio, porque la idea de quedar llena de espinas o de ramas que se le claven no le hacía mucha ilusión. Vio las dos orejas puntiagudas del híbrido sobresalir, seguido de su cabeza.

―¿Qué esperas? La entrada es por aquí.

La artista hizo una pequeña sonrisa. Por supuesto que para él no sería ningún problema.

Armándose de valor, imito la acción del híbrido y espero paciente que algo pudiera pincharla, pero para su sorpresa, el césped bajo sus pies estaba aplastado. Las ramas que podrían haberle quitado un ojo –ya que su tamaño es mayor al de un gato- estaban pulcramente cortadas. Cualquiera podría pensar que eso era obra de un jardinero, y al ver a Shinsou agazapándose de manera experta, supo que fue el quien lo hizo.

―Cuando empecé a ganar altura, más de una vez me hice una herida con las ramas ―Dijo con una risa―. Por lo tanto, tuve que cortar varias ramas para evitar salir lastimado ―El túnel era amplio, limpio, y luz ingresaba de manera natural guiando el camino―. Al final fue útil que haya hecho eso, los gatos pueden pasar mejor que antes.

(T/n) se sintió como una niña pequeña de nuevo, en esas épocas donde armaba los fuertes de almohadas y sabanas con su padre, jugando a la princesa y el dragón. Esas fueron buenas épocas.

Llegaron al final y lo primero que percibió fue un aroma fuerte, lo cual no le extrañaba porque allí viven gatos. Shinsou se alzó rápidamente, extendiendo una de sus manos hacia ella. Al momento en que la tomo, varios maullidos la hicieron levantar la cabeza. Hay cachorros y muchos adultos que la observan con desconfianza. No debían estar acostumbrados a ver a otra persona además del ojos violáceos.

―¿Debo hacer algún saludo raro o maullar? ―Musito a la vez que se escondía detrás de Shinsou.

El híbrido soltó un resoplido muy parecido a una risa, para luego acuclillarse y acariciar el lomo de una gata adorable. Hitoshi le indico con la cola que copie la acción, y en el momento, fue rodeada por varios gatos. Maullaban, saltaban y se frotaban contra sus piernas. No imagino que fuera tan cariñosos.

―Ella es Hana, la pareja de Taiga ―Marco con sus ojos a la pequeña gata.

Hana enseguida se escurrió de las caricias que le propinaba el joven, para saltar a las piernas cruzadas de (T/n), que ya estaba más relajada ante el escenario. No supo cuantos minutos estuvieron de esa forma; el presentándole a los demás gatos, ella dándole caricias a los que quisieran y jugando con los cachorros que mordían los cordones de sus zapatillas.

Al dar un recorrido visual por el campamento, lo único que descubrió fue las raíces de un árbol que daban espacio a que varios gatos pudieran dormir tranquilamente allí abajo. Una especie de antecámara para las gatas y sus crías llamo su atención cuando giro la cabeza, así que tuvo que aguantar las ganas de acercarse para echar un vistazo mejor a los pequeños gatos que maullaban allí dentro.

―Ven, te enseñare donde he vivido estos años.

Lo siguió hasta detrás del árbol, viendo el hueco repleto de pertenencias humanas. Era como una sala pequeña, (T/n) tuvo que inclinar un poco la cabeza cuando ingreso. Distinguió artefactos para cocinar, desde ollas hasta cacerolas, junto a varias prendas acumuladas en una esquina arriba de una mesa de luz vieja.

Be My Light [BNHA] [Shinsou Hitoshi x Lectora]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora