Las apariencias engañan

Capítulo 50: "James"

-Me quede congelada, detestaba a Zayn. El siempre me molestaba con el grupo de William. Pero claro no se lo diría a Santana. No quería lastimarla; ella me miro frunciendo el ceño. Claramente no comprendía porque no me había puesto feliz por ella o hecho alguna expresión -

-¿Lo conoces? – Dijo, como un acto fallido mordí la pajita verde de mi capuchino- va a tu colegio; el me dijo que te ha visto alguna que otra vez –si él no se lo iba a decir yo tampoco.-

-Um... no lo sé; puede ser – dije mirando para otro lado. La charla se me torno incomoda, aunque Santana parecía natural. Luego de varios minutos ya estaba en la puerta de mi casa, no podía creer que mi mejor... o mi algo amiga, estaba saliendo con el ****a de Malik. Siempre me molestaba junto a sus amiguitos. Entre a casa, mi padre tipeaba en la computadora concentrado. Él ni se fijo en mi presencia, tire mi mochila intentando hacer el mayor ruido posible, estaba furiosa.

-Estoy trabajando... por favor no hagas ruido– dijo mientras miraba el teclado buscando una tecla- 

-Oh ¿ahora te haces el responsable? – dije levantando mi tono de voz, el me miro con recelo, le clave mi mirada en sus ojos caramelo,.. El había cambiado tanto desde que ella se fue, esta familia había cambiado por completo- Si tú te quieres matar, hacelo. Lo único que te pido es que no lo hagas en casa; porque lo tendré que limpiar yo –dije fría caminando hacia la cocina-

-Eres mi hija no lo olvides, yo soy el que mando – dijo duro, para luego seguir tipeando. Me serví un vaso de agua y camine hacia las escaleras, el no me ganaría esta guerra, estaba demasiado enfurecida para dejarlo pasar- 

-Lastima que solamente te acordás de eso cuando te conviene – dije ya a mitad de la escalera, el no contesto. Cerré la puerta de mi cuarto con un leve impulso y agarre una de mis novelas, para comenzar a leerlas-

[Narra Harry]

Sus labios se movían rápidamente, pase mi mano por el cuello de ella. Estaba caliente y ella lo sabía. 

-No sabes cuánto te espere Harry – dijo Nicole mientras sacaba mi remera del camino- Pensé que Susan nunca se despegaría de ti-. Reí amargamente, Nicole era la prima de Susan; ella era dos años menor, pero había pasado por varios hombres más grandes. Desde que fui a la casa de Susan el año pasado, ella siempre había estado como un perrito faldero atrás mío. No se puede negar su escultural cuerpo y su pelo prácticamente negro que caía por su espalda completamente liso. Estábamos en su casa; para ser más específicos en el sillón de su living, Gracias a dios sus padres no estaban. Varias veces se me había insinuado y como un hombre hambriento y que nunca se sacia, acepté su ofrecimiento de venir a su casa. Vamos… era uno de los mujeriegos más codiciados del instituto... a quien iba a engañar. 

[Narras tú]

Gracias a dios era viernes, quería salir corriendo del colegio. Camine entre la manada de gente que salía. Me aferre a mis libros mirando para el piso, mientras comenzaba la caminata hacia mi casa. Pero una voz me hizo parar mi paso.

-____- dijo una voz masculina de atrás, ese apodo… solo él me decía así, no... No podía ser él. Me di vuelta para encontrarme con un hombre de musculatura formada, alto, de pelo desordenado y corto, castaño tirando a casi rubio. Ojos completamente celestes como el agua y una sonrisa de comercial; mas de cien recuerdos pasaron por mi mente. El estaba igual que la última vez... James estaba parado enfrente mío.-