Capitulo 8

1.1K 28 0
                                    

Terminamos de hacer el amor y ahora estábamos tratando de estabilizar nuestra respiración, o "estaba" mejor dicho, porque él se fue a ver televisión al living dejandome sola en su cama. Cande siempre me contaba que cuando terminaba de estar con su ex, se quedaban en la cama haciendose mimos y diciendose cosas cursis, yo nunca hice eso con Gonza, pero debe ser porque cada pareja es diferente a la otra y nosotros simplemente no nos acostumbramos a eso. Busque mi ropa interior y me la puse para después ponerme su remera encima, camine hasta él y me senté a su lado acurrucándome contra él.

- Te amo lindo. -enterré mi cara en su cuello y deje un beso- 

Gonza: Para Lali, estoy mirando el partido. -me alejo de el- 

Lali: Ay si, perdón. -agarre su teléfono- ¿Nos sacamos una fotito? 

Gonza: -Suspiro- Rápido Lali que estoy mirando... -nos enfoque y saque una foto- 

Lali: A ver, ¿Donde se guardan? 

Gonza: En multimedia. 

 Lali: mmm, multimedia multimedia... Acá esta, veamos. -empecé a ver las fotos en busca de la nuestra- ¿Donde esta che? -seguí buscando hasta que empecé a encontrar fotos con una rubia- ¿Que es esto? 

Gonza: ¿Que amor? -dijo sin despegar su vista del tv- 

Lali: Esto Gonzalo, ¡ESTO! -le mostré el teléfono- ¿Quien es esta mina? 

Gonza: Ahh...ehh, mm... Es... ¿Como se llamaba?... Es una compañera de trabajo... Sisi, eso. Compañera de trabajo... 

Lali: ¡Mentira! -le tire el teléfono en la cara- ¿Quien mierda es Gonzalo? ¿Me estas engañando con ella?

Gonza: ¿Que decís estúpida? -me agarro del brazo- ¿Quien te pensás que sos para decirme eso? 

Lali: La cornuda más grande del planeta, ¡ESO SOY! -me levante- Yo me voy. 

Gonza: Si, te vas. -amague para ir hacia el cuarto- ¡No! Te vas ahora, así. -empezó a empujarme hacia la puerta- 

Lali: ¡Para Gonzalo! -trataba de soltarme- ¡Espera que me cambio! 

Gonza: ¡NO! ¡TE VAS AHORA PELOTUDA! -me zamarreó un poco más y me golpeo contra la puerta- 

 Lali: Para Gon, me estás haciendo mal. -me tenía agarrada de los pelos, apoyando mi mejilla derecha sobre la puerta- 

Gonza: Vos me haces mal pensando cualquiera de mí, pendeja. 

Lali: Dejame por favor. -lloraba desconsoladamente- 

Gonza: Si, te voy a dejar. -pego su cara a la mía- Te vas. -me empujó hacia afuera cerrandome la puerta en la cara-

Empecé a golpear con todas mis fuerzas, pidiendo por favor que me abra la puerta. La gente que subía el ascensor y me veía ahí tirada se alejaba rápidamente de mí. Rogaba que me deje entrar, le pedía perdón por desconfiar pero no me daba bola. En un momento la puerta se abrió y me levante rápidamente pensando que me iba a dejar entrar, pero lo único que hizo fue tirarme la ropa y las carpetas en la cara, para volver a dar un portazo. Me puse mi pantalón lo más rápido que pude y agarre el resto de mis cosas que estaban en el piso para meterme en el ascensor y salir de ahí lo más rápido que pudiera. Un taxi me dejo en mi edificio y cuando subí, lo primero que hice fue mirarme al espejo para corroborar si tenía alguna marca, y justamente tenía una gran mancha roja en mi mejilla derecha que se debía a los golpes contra la puerta. Jure y me remil jure que esta iba a ser la última vez. No iba a ser una mujer golpeada, no más. 

Una semana paso desde ese día, una semana sin mi novio, una semana sin mi mejor amiga, una semana sin ir a la facultad por este puto moretón que abarcaba la mitad de mi cara, una semana sin ver a mi mama, una semana encerrada en mi casa sin salir a ningún lado. Pero hoy tenía que salir, sino iba a quedar libre por faltas y no me lo iba a permitir. Agarre mis nuevas carpetas, -las viejas las había roto Gonzalo- y con la frente en alto, salí de mi departamento. 

Camine las once cuadras que me separaban de la facultad y entre al aula sin saludar a nadie, apoye mis brazos en el banco y escondí mi cara entre ellos, a los cinco minutos siento una presencia a mi lado. 

SALVAME (LALITER)Where stories live. Discover now