Devuélveme mi corazón

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El conocer a alguien es un arte perdido, no solo es hablar, sino aprender de la persona, mirar sus ojos, sus movimientos, sus pensamientos, sus verdades, sus mentiras;para llegar a conocer una mínima parte del gran confuso espíritu y solo el tiempo sera el que lo afirme.    

Flashback 

Marie: Mamá ¿Donde estamos?

Alison: En la casa de tu padre, solo mantén la mente abierta de acuerdo pequeña, solo tu seras la única que podrá juzgarlo.

Marie: ¿Juzgarlo?, porque ¿És malo?

Alison: Solo tu lo decidirás.

Ding Dong (sonido de puerta)

Recuerdo el frió que sentía, mientras esperaba que abriesen la puerta, mi nariz estaba fría , al igual que mis dedos, pero  mis mejillas , mi corazón se encontraban calientes por la emoción de conocer a mi padre, tenia tanto que decirle y sobretodo preguntarle; esos fueron los 5 minutos en los cuales tuve más fe en un ser humano.

De el fue de quien aprendí  y conocí mi primera ruptura de corazón, debido a que él era mi ilusión de un futuro sin dolor, con alguien que apoyara a mi madre de forma incondicinal, de una persona que me guiara, de un padre el cual jamas nos dejaría ir...todo se fue a la basura en el momento en el que se abrieron esas puertas.

 Vi salir a un hombre en estado de ebriedad, de ojos cansados y grandes, encorvado, de gran altura, de manos ásperas, cabellera oscura y un terrible aliento.

Alison: Buenas noches Maurlo.

Maurlo: Alison, ¿Que haces aquí? 

Alison: Vine a presentarte a tu hija...ella quería conocerte, te había dicho ayer si estabas disponible hoy en la noche para conocerla, veo que se te a olvidado.

Maurlo: ¿Qué? yo no me he olvidado, solo quería tomar unos tragos en lo venían, ya sabes para pasar el rato...bueno¿Cómo te llamas pequeña?

Marie: Me llamo Marie, un gusto señor.

Maurlo: ¿Señor?, Alison no le has enseñado modales a la niña, soy tu padre, así que deberías llamarme como tal, vamos niña repite tu presentación pero no olvides llamarme padre. 

Mi primer pensamiento acerca de él fue...quien rayos era ese sujeto, como es que tenia la osadía de recriminar a mi madre sobre mi educación  cuando él llevaba una botella de alcohol en su mano, dios donde rayos estaba mi papá.

Marie: Mami, podemos irnos a casa me da miedo el señor.

Alison: Marie, claro que si pequeña, nos vemos Maurlo.

Maurlo: ¿Eh?, pero que cosas dices, acaban de llegar y la pequeña aun no me a saludado de forma correcta, como piensan despedirse si ni siquiera puede hacer una cosa tan sencilla.

Alison: Maurlo es suficiente la estas incomodando.

Maurlo: Pero si es la verdad, no me imagino como a de ser en la escuela debe ser un dolor de cabeza para ti ¿verdad?

Alison: Pero que dices, no la conoces, ¡no tienes derecho a juzgarla!

Maurlo: ¡Claro que lo tengo!, soy su padre.

Marie: ¡Marie,Marie!, me llamo Marie, buenas noches padre.

Ya no podía mas solo quería que se callara y que nos dejara, no había conocido en mi vida a alguien tan venenoso como él, pero sabia que si me queda un minuto más allí rompería a mi mamá.

Maurlo: Solo tenias que decir eso lo ves no fue tan difícil, pero te advierto en el momento que te portes mal con tu mami seré el primero en darte un golpe, ¿lo has entendido Marie o tengo que repetirtelo?

Marie: No, no tienes que repetírmelo...seré buena niña y nunca le causare problemas eso te lo aseguro

Maurlo: Que bueno, ya puedes llevartela Alison, espero no te cause problemas.

Alison: Adios Maurlo, vamonos de aqui Marie.

Marie: Si mami; adios Maurlo.

Recuerdo ese día me sentí tan aterrada como determinada a que ese señor nunca viniera a mi casa o me alzara su mano a mi o mis seres queridos, y sobre todo a nunca darle problemas a mi familia...seria una buena niña por ellos, así no se arrepentirían de estar junto a mi y sobre todo a que nunca dijeran que era hija de ese sujeto o que me parecía a él.