Capítulo 1: El bohemio del piano.

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Pretty Blue Eyes.

Capítulo 1: El bohemio del piano.

Brian salió rápidamente de la biblioteca, aun guardando sus cosas en su maleta mientras caminaba. Se dirigía a aquel salón repleto de instrumentos musicales, como de costumbre, aún que esta vez iba especialmente tarde.

Abrió la puerta del aula y se sorprendió en cuanto vio que no estaba sola como en otras ocasiones; Un joven que se veía de su misma edad. Delgado, con el cabello color negro en una pequeña melena que le tapaba las orejas. Casi al instante el misterioso sujeto reaccionó volteando a verlo.

-... ¿Hola? -Dijo dudoso el rizado- Disculpa interrumpirte...

-¿Qué haces aquí? -Respondió el contrario de forma extremadamente seca-

"Wow, qué amable", pensó Brian.

-Bueno amigo, a veces vengo aquí a practicar. -Dijo un poco irritado-

-Oh, ya veo. -El misterioso señorito sin tacto se levantó de la silla y se recargó en el piano, su dentadura era rarísima- ¿Qué tocas?

-Toco la guitarra eléctrica... Y puedo ver que tú tocas el piano.

-Así es. -Sonrió- Mil disculpas por el saludo, igual ya me tenía que ir. Sólo, antes de irme, ¿Podría dar una última práctica?

-Adelante. -Respondió con duda-

El chico se sentó de nuevo y comenzó a tocar. Brian quedó atónito al instante, ¡La habilidad que tenía para tocar era magnifica! Y todo mejoró cuando comenzó a cantar. "La vie en rose" de la genia Edith Piaf, interpretada de la forma más hermosa que había visto en su joven vida.

-Estoy listo. -Se levantó de su asiento, recogió un maletín y un portafolio-

-¡Espera! ¡Eso fue genial! Soy Brian May y estudio física. Un placer.

Se detuvo y volteó de nuevo hacia él.

-Soy Freddie Bulsara, estudio diseño.

-Encantado, Freddie. En serio, tienes un don.

-Cuatro incisivos de más en mi boca, más resonancia. -Sonrió- Lo sé y gracias.

-¿Podemos vernos otro día? En serio me encantaría volver a escucharte y verte tocar.

-Hmmm -Freddie hizo un gesto pensativo- ¿Qué dices mañana a la misma hora? -Vio el reloj- Son las 6:10pm.

-Claro, mañana estaré aquí sin falta. -Respondió Brian sonriendo-

-Bien, nos vemos.

Ese día, el joven se fue feliz a su casa y entusiasmado de tener un nuevo conocido aficionado a la música y muy talentoso.

Al día siguiente las clases se pasaron horriblemente lento, Brian estaba muy ansioso de ya salir, darse un paseo por la biblioteca y llegar a las 6:00pm, como habían quedado.

Al terminar clases eran las 4:00, entró a la biblioteca y tomó cualquier libro para leer, simplemente quería matar tiempo. Una tesis sobre el cosmos, como casi siempre, se sumergió en la lectura e intentó no prestarle mucha atención a sus ansias.

Cuando volvió a la realidad se dio cuenta que había avanzado 70 paginas, "Joder, Brian. ¿Cuánto tiempo llevas leyendo esto?", al ver el reloj vio que eran las 5:50, fue al salón de música, aprovecho sus 30 minutos de ventaja para conectar la guitarra y practicar un poco.

A las 6:10 en punto, escucho llegar a alguien.

-¡Freddie! ¿Cómo estás?

-Buenas tardes Brian, estoy bien. -Dejó todas sus cosas sobre una silla y se quitó su chaqueta de mezclilla- ¿Qué tal tú? Escuché como tocabas la guitarra, tú también tienes un don.

-Gracias. Y eso que no me has escuchado tocar mi Red Special.

-¿Red Special?

-Mi guitarra eléctrica propia, la construí junto a mi padre.

-Wow, qué buen padre.

Brian sonrió y asintió.

-Y... ¿Qué quisieras hacer?

-No lo sé, dime tú, tú eras quien quería que nos viéramos. -Rio, Brian en serio pensó que sus dientes eran extraños-

-Hm... Bueno, hace poco recordé una de las primeras canciones que aprendí a tocar en guitarra. Era "tutti-frutti" de Little Richard. Y aún la recuerdo.

-¡Oh, me encantaba Little Richard cuando era más joven! La sé tocar.

-¿En serio? ¡Me encantaría tocarla!

-¿Entonces qué estamos esperando?

Ambos cantaron y tocaron un buen rato, Little Richard, Ritchie Valens, incluso The Beatles. Fue química musical instantánea, ambos lograron agarrar los ritmos rápidamente y se divirtieron tocando toda la tarde. Freddie era un gran pianista y vocalista. Brian también era un buen cantante y un guitarrista impecable. Al final los dos se sentaron en el piso a conversar.

-Tocas muy bien, Brian May. -Dijo el chico pasándole una lata de Coca-cola al otro-

-¿Bromeas? ¡Tu voz fue la protagonista aquí! En serio me divertí mucho, Freddie Bulsara.

-Yo también me divertí, como no lo hacía en mucho tiempo. -Le dio un sorbo a la lata que él tenía- Cuéntame, ¿Tienes algún grupo?

-Pues, tuve un grupo llamado "1984", pero desde que entré a la universidad nos hemos distanciado mucho. Técnicamente estamos separados, ¿Tú?

-Soy un prostituto musical -Rió- voy de grupo en grupo, pero realmente sin mucho éxito.

-Me sorprende que alguien con tu calidad de voz y talento para el piano no tenga éxito.

-Soy un alma libre, May. Nadie me aguanta, este mundo tiene la mente muy cuadrada para mi visión.

-¿Cuál es tu visión?

-... Extravagancia, pasión, poesía, performance... -Freddie suspiró y sacó el pecho, comenzó a hablar con sus manos de manera muy elocuente- Fuerza, pero con elegancia y sutileza. Salvaje, rebelde, revolucionario, pero no molesto. Como el ballet o la opera.

Brian rió al ver a este chico entrando tanto en el personaje de poeta apasionado. Sin embargo, le agradó escuchar todo eso.

-Pues, yo creo que tu visión es bastante buena, y me gustaría seguirla descubriendo.

-¿Te crees lo suficientemente bohemio para aguantar?

-El castaño arqueó la ceja, sonriendo- Por supuesto, soy un artista, Bulsara.

El contrario también sonrió.

-Yo también. -Extendió su mano- Es un trato, entonces.

-Un trato. -Correspondió-


Desde ese momento, Brian y Freddie se reunieron en esa aula todos los días sin falta, el tiempo se encargó de volverlos grandes amigos.

Pretty Blue Eyes [Maylor]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora