Un Vaquero Enamorado.

[22] Gritar |2|

Hoy si es capítulo, me disculpo por la vez anterior.

Sin editar.

Mis amores el capítulo comienza con Román, si no les aparece esa parte me avisan.

Román Gadiel Koch.

Era de esperar que Jessica este aquí, desde el día de la cita no me he vuelto a acercar a ella. Está tan concentrada cepillando al caballo de su padre, que no repara en mi presencia y estoy bien con eso.

—Eres tú. —Veo que mi presencia no es bien recibida. Pero aún así sonrió.

—¿Como estás?

—Bien. —casi gruñe su respuesta, y sé que llegue en mal momento.

—Creo que es mejor que me vaya. —Digo dando la vuelta, no quiero que pague conmigo su mal humor.

—¿Te atreves a irte? —Pregunta. Doy la vuelta y ahora es ella la que me ve con incredulidad. —¡No puedes! Primero me llevas a una hermosa cita y...y.. me.

—¿Y?

—Me confundes, pensé que te interesaba.

—Y lo haces, siempre lo has sabido. —Respondo sincero.

—Entonces porque no...porque no

—Entonces, ¿por que no, qué? —Soy testigo de como su rostro se vuelve carmesí. Y ahora estoy completamente interesado en su respuesta. Niega repetidas veces. —Dime Jessica.

Suelta el cepillo y camina hasta la salida, la sigo y la tomo de la mano haciendo que ella se estrelle con mi pecho. Veo hacia abajo y su boca está muy cerca de la mía, no puedo evitarlo y no quiero, la beso.

Y es en ese momento que sé que ella está molesta por qué no he vuelto a besarla. No puedo evitarlo y sonrió en medio del beso. Me esmeró en hacerle olvidar todo, amo sus labios. Siento como coloca una mano en mi pecho y la otra en mi cuello. Pero una voz nos interrumpe.

—Espero que solo hasta ahí, hayas llegado con mi hija muchacho. Por que de lo contrario la siguiente boda que se celebrará será la tuya con mi hija.

—¡Papá! —Grita Jessica.

—No se preocupe señor Fran, si un día llego a deshonrar a su hija será porque estoy seguro que me casaré con ella.

—Te creo, pero mi mujer es otro cuento. —Asiento.

—Asi que te espero en la noche, para hablar de su noviazgo.

—Papá no lo hagas, él solo...bueno nos estamos conociendo.

—Y por eso lo hago princesa, por que si tú madre se entera que te encontré besándote con él solo porque se estaban "conociendo" no quiero saber que harán cuando lleguen hacer amigos.

Aprieto mis labios para no soltar una carcajada al ver la cara de horror de Jessica. Su padre es muy relajado tiene el mismo de carácter del señor Herderson.

—Tranquila, iré a cenar con ustedes hoy. —Le susurro a ella. —Nos vemos en la cena. —Me alejo un poco de ella y beso su mejilla.

—Se puntual, mi mujer está feliz que seas el enamorado de su hija, tiene muchas preguntas para ti. La has comprado con un ramo de flores. —Al menos la suegra me quiere, solo espero que la hija vaya por el mismo camino.

Camino hasta la casa principal, donde me encuentro a Guillerme caminando de un lado a otro.

—¿Sucede algo?

—Hermano, claro que sucede algo. Hoy la mujer de nuestro primo andaba buscando sus documentos. —Que raro. —Subió hace cinco minutos y temo que las cosas se salgan de control.