—¡Lo prometo...! —afirmó Vernon con ojos suplicantes, apretando con sus dedos la manga de la camisa a cuadros de Jungkook como última alternativa para no dejarle ir.

El castaño se lo pensó por un segundo hasta que vio como Kim deshacía el agarre de Vernon con su manga y recibió su mirada, incitándolo a darle una oportunidad y hablar con el chico de una vez.

—Bien —aceptó.

Taehyung se cruzó de brazos y al sentir la mirada de Vernon torturándolo arqueó su ceja receloso.

—Esto es algo entre los tres. ¿Podrías...?

—Vernon —el pelinegro apretó el hombro de éste—, no hace falta...

—¿Debo irme? —confrontó Kim.

—Pues, como puedes ver, sí —se cruzó de brazos también, acercándose a la silla y sintiéndose superior al verle desde arriba—. Dije que era cuestión de tres, no de cuatro. Te estás aprovechando de mi paciencia y, lamentablemente, prometí hacer esto rápido y sin mayores rodeos. Al parecer esto demorará más de lo acordado si te sigues quejando.

—Me quejo todo lo que quiero —encaró el de cabellos almendrados—. Tú y Jungkook no se llevan bien. Es obvio —reafirmó mostrando un semblante temible—. No puedo ni imaginar de lo que "hablarán" sin alguien más alrededor. No confío en ti.

Hansol suspiró sonoro y supersticioso, sin creerse lo que escuchaba. Jungkook entraba en pánico.

—Taehyung, ya...

—Jungkook. Si no los enfrentas tú, alguien más tendrá que abrirle los ojos a estos idiotas.

—Mira, tú... Taehyung —continuó el castaño—. Me toca hablar a mi ahora. Jeon —cortó la confrontación de raíz para dirigirse a Jungkook—, quería venir a disculparme.

—Queríamos —corrigió el pelinegro.

Taehyung resopló al oírlos. —Vaya.

—¿Qué? —dudó incrédulo el menor— ¿Se disculpan...?

—A veces no hay que sacar conclusiones anticipadas como algunos —se dirigió Vernon muy poco disimulado a Kim, respondiéndole éste con los ojos en blanco.

—De verdad nos arrepentimos mucho por lo que te hayamos hecho en el pasado —sinceró BamBam.

—Por los malos ratos que te hice pasar, lo siento mucho. No sé si podrás perdonarme, pero quería que supieras que lo lamento demasiado.

—Lo lamentamos —volvió a corregir el pelinegro.

—Oigan, ustedes... De verdad... —murmuró Jungkook.

—Entendemos que no tenemos el mejor roce pero pido, por lo menos, comprensión.

—Nos sentimos muy culpables. Lo sentimos.

El menor perdió su mirar en los ojos del dúo de chicos, aturdido por las palabras que oyó de ellos. No se esperaba aquella confesión, y sintió un revoltijo en su interior nacer. Por otro lado, miró a Taehyung y lo vio con los brazos cruzados aún. Parecía no decaer ni abatirse, con una presencia tan almidonada que parecía agujerear el miedo. Y luego de tanto ensimismamiento, pudo articular unas palabras.

—Yo... Entiendo —afirmó finalmente tragando duro—. Por favor, dejen de hacer estas cosas —el mirar de Jungkook y Taehyung hizo conexión y el último le sonrió saciado y contento por su elección de términos, con su ceño pacífico. Jeon le devolvió la risa mientras el par de chicos frente a ellos les miraban con estupor y turbación—. No me gustaría entrometerme en cosas que no querría ser parte...

camaleón ¹ • taekookWhere stories live. Discover now