Quincuagésimo noveno

7.9K 490 176
                                    


Harry

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Harry

Esa misma noche, Stella decidió volver a dormir conmigo. Y como la noche anterior, ambos estábamos platicando en la oscuridad de la habitación antes de dormir.

—¿Y cómo te fue en tu cita con la doctora Elizabeth? —decidí preguntar.

—Bien, con ella estuvo bien. El problema fue Daniel, no podía soportar tenerlo a mi lado —soltó un suspiro—, cuando me llamó para decirme que vendría a la consulta sabía que nada saldría bien. Y así pasó, ahora mostrando más interés ahora que nos separaremos. Pero dejando a un lado aquello, la doctora Elizabeth fue muy amable.

—Sí, ella es una excelente doctora.

—No le di la oportunidad la otra vez. Ya que tú no pudiste atenderme y yo fui demasiado terca para mandarte a buscar para que lo hicieras —comenzó a reír, yo también lo hice al recordarlo.

—Mi primer año trabajando en ese hospital fue haciendo ultrasonidos. Tomando en cuenta que en algunas guardias iba a los quirófanos, pero no fue que hasta el segundo año que ya atendía por completo en la sala quirúrgica. Se supone que ya no atendería en la sala de ecografías, pero las pacientes me lo pedían... y fue así que me turné, no lo he dejado, aunque ya no he tenido tanto tiempo para atender allá —al terminar de hablar, Stella me mostró una sonrisa que pude notar gracias a la iluminación que traspasaban por la ventana.

—¿Tenías mucha demanda doctor? —dijo en un tono celoso.

—No sé cómo responder a aquello —solo sonreí— De todas maneras, a mí me gustaba estar checando los avances mes por mes, me gustaba mantenerme muy bien informado. Y aún es así.

—Debo de admitir que cuando te vi por primera vez, no pensé que alguien tan joven me atendería. Pensé... que quizás sería un doctor más grande, de hecho, te vi más joven —calló—, espera ¿cuántos años tienes? Me habías dicho que tenías 27 años hace meses.

—Efectivamente, pero ya tengo 28 años.

—¡Espera! —se reincorporó sobre la cama— ¿Cumpliste años hace unos meses y yo no me enteré?

—Fue hace unos meses, Stella. Tú y yo no nos habíamos visto, además no fue tan importante. Casi nunca lo celebro, siempre casi estoy trabajando —dije sin interés, pero ella no salía de su confusión.

—Me siento una mala persona —volvió acostarse—, pero podríamos celebrarlo juntos. Algo tarde, pero hagamos algo para no dejar esa fecha vacía.

—¿Realmente importa? —reí levemente, ella asintió de inmediato.

—Sí —acarició mi cabello— ¿Sabes? Solía pensar que la vida se me pasaba muy rápido, pero ahora no. Ahora solo quiero disfrutar cada segundo.

—Pensaba lo mismo —tomé su mano que estaba en mi cabello y la entrelacé con la mía.

Horas después, ya en el hospital, me encontraba conversando en mi hora libre con Camille. Ella se mostraba algo cansada, y me contaba el por qué. Podría decirse que llevábamos rato sin conversar.

Dr. StylesWhere stories live. Discover now