No Hay Relog

99 9 0
                                    

Atónita, ellos no se habían percatado de mi presencia, y solo escuchaba, miraba y contemplaba como mi mejor amiga gemía gracias a mi prometido. Al parecer, Saúl se percató de mi, ya que me divisó detras de la figura desnuda de Alice...
-Beatriz!
Ambos saltaron y quedaron enterrados bajo las sábanas, solo con sus cabezas de fuera...
-llegaste antes
Dijo cínico él y yo, no le quitaba la mirada de encima a Alice..
-me corrieron
Mi corazón y mente estaban muy confundidos, no sabía que hacer, mi mente por automático pensaba que esto era una broma.
-y..yo..
El rostro de Alice no mostraba tristeza ni arrepentimiento, con sus ojos sentía que me decía "solo déjalo que termine para mi".
El pánico de todo el día se había acumulado, no podía jalar aire, al hacerme hacia atrás y querer evadir la situación o simplemente alejarme y creer que era mentira.
Siento los ojos de Alice en mi mientras los ecos vacíos de Saúl llenan la habitación.
Salí corriendo.
Con ganas de morirme.

No se como avancé, ni como llegué hasta acá, no se cuanto tiempo llevo aquí, llorando, en esta banca cerca del puente por donde solía cruzar un escandaloso río y ahora solo hay rocas...
Como pasó? Es mi culpa? Definitivamente es mi culpa. Esta mañana fijaba fecha para mi boda, iba al trabajo y conversaba con mi mejor amiga...ahora no tengo trabajo, mi prometido enrredado con mi mejor amiga en aquella que es nuestra cama.
Miro el contacto de mis padres en el celular...ni siquiera cuento con ellos pues los hice a un lado por Saúl.
De nuevo a llorar.
No se ni que hora es, a pesar de haber mirado el celular no me interesó la hora pero el sol se pone sobre mi horizone, me levanto de mi asiento, le doy la espalda y camino a la baranda del puente...
"Salta" me dijo mi yo interno...
"SALTA" me gritó desgarradoramente mi inconsciente...
Me pasé con cuidado del otro lado del barandal
-BEA!
Escuché a lo lejos, era Saúl. Lo miré desde aquel punto crítico  donde me encontraba.
-que carajo haces?! Regresa acá! No hagas locuras!
Negaba con la cabeza y cerraba mis ojos, mientras los abría para mirar el fondo de rocas puntiagudas que me esperaban abajo...
-no puedo...
Solté en un suspiro, Saúl se acercó cauteloso y me tomó del brazo.
-no hagas locuras, vamos a hablar
Di unos torpes pasos de lado, para alejarme de él, logré soltarme y aferrarme a un poste del puente, aún con la orilla a centímetrosde mi...
-Bea! Alice y yo...
-no quiero escucharte...me lastima escucharte
Saúl se pasó del otro lado de la  baranda, quedando tan cerca del vacío como yo, en una especie de acto heroico o para tener un contacto mas cercano conmigo.
-no quiero que caigas....nada de lo que pasó es tu culpa...
No? No lo es? Con esas palabras Sauo me hizo darme pena a mi misma, toda la vida la gente que me rodeaba me aclaraba que yo no era la culpable de mis tragedias, sin embargo, cada que decían eso no era mas que una punzada mas cruda en mi culpa...
El aire comenzó a soplar más fuerte y la lluvia comenzaba a hacerse presente.
-vamos Bea, regresemos a casa si? Hablemos y arreglemos esto...
Al momento de ofrecerme su mano, vacilo con su equilibrio.
-Saúl!
Grité cuando una de sus piernas resbaló y quedó colgando en la nada...medio cuerpo de él estaba suspendido.
Comenzó a llover mas fuerte.
-ayuda Bea, ayúdame a regresar a las barras...
Me acerqué cautelosa a él, deslizando mis manos por los barrotes húmedos...
-no te alcanzo
-estira un poco más...tomame por la ropa...solo necesito un pequeño jalón
Le dije preocupada, mientras inútilmente (y en pánico) trataba de alcanzar su camisa blanca.
-SAUL!
Escuché que gritaron a lo lejos...era Alice y al verla...el pánico se duplicó pues la escena de sus cuerpos entrelazados en nuestra cama....ella...se estaba burlando de mi cuando los vi...
-BEA!
-NO!
Escuché en el fondo de mis oídos, regresé la mirada a donde estaba colgante Saúl...pero ya no estaba a mi alcance, ni al alcancé de nadie sobre este puente...el estaba tendido sobre las rocas, con la sangre brotando de su cabeza....difícilmente vivo.
Saúl había caído...
Me pasé del otro lado de los barrotes tratando de no resbalar por la lluvia, azote contra el suelo.
-que...mierda...
Mientras me levantaba, Alice me miraba con la ira de todos los demonios de este mundo y yo seguía atónita...en shock...
-lo dejaste caer Beatriz... LO MATASTE!

LETARGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora