•PURE BLOOD• {Draco Malfoy} TERMINADA

•El duelo•

Narrador omnisciente

La joven de trece años se estuvo preparando con autores autorizados por el Ministerio para enseñarle hechizos que necesitaría en el duelo,todo un mes para practicarlos. Aiday ya de por si sabía la mayoría de hechizos pero nunca quiso probarlos,había un hechizo "experto patronum",desgraciadamente no era capaz de invocarlo pues según su mentora no tenía un recuerdo muy feliz que es lo que se nesecitaba para convocar el encantamiento,eso le ponía muy nerviosa y frustrada,probó con cada momento feliz que pudo haber sentido,pero ninguno era tan poderoso para que pudiera hacer el famoso encantamiento. En el duelo podía destruir a su enemigo pero no usar nada de maldiciones,al fin y al cabo si Aiday "mataba" a su oponente no lo mataría del todo,sólo lo mandaría a otra dimensión o aparecería en un lugar desierto que tarde o temprano podría ser localizado por el ministerio.

La joven chica de ojos verdes esmeraldas se miraba al espejo mientras practicaba los hechizos susurrandolos,sería en una semana el comienzo de los duelos. Su padre le había contado que eran 30 magos,los mejores duelistas de todo Londres,se sentía preparada físicamente para adaptarse rápido a los golpes que recibiría pero no estaba preparada psicológicamente para aceptar que podría ser enviada a otro lugar desconocido,se proponía ganar siendo aún,la más pequeña de todos los duelistas.

-Mi ama,el señor Malfoy esta abajo-interrumpió la elfina de Aiday entrando a su habitación

-En un momento bajo-dicho esto la elfina se retiró para avisarle al joven que estaba ansioso por ver a su amiga

Aiday se miró nuevamente al espejo y corrió algunos mechones rebeldes que caían por su rostro,se sentía bien que su amigo la sacara un poco a tomar aire como hacia siempre,y Draco lo sabía que su amiga se sentía muy encerrada y torturada por su consciencia ,Aiday siempre fue muy ambiciosa y hacia lo imposible para conseguir lo que quería,y ganar el campeonato era una de sus tantas ambiciones.

Bajó corriendo las escaleras para encontrarse con su amigo platinado,que este distraído miraba los cuadros que albergaban la gran sala

-¿Curioso,Draco?-dijo susurrandole a su amigo en la oreja

-¡Por las barbas de Merlín Aiday,me diste un susto terrible-Aiday rompió en carcajadas al ver la cara de impactado que tenia su amigo

-¡Debiste a ver visto tu cara,Drac!-rió más fuerte,pero la mirada fulminante del rubio la hizo parar-Esta bien,esta bien. ¿Qué haremos hoy?-preguntó entusiasmada

-Vamos al laberinto, te tengo que contar algo-dijo Draco tomandola de la mano,Aiday se sonrrojo por el tacto del rubio,sólo esperaba que el no lo haya notado

-Y bien...¿De que querías hablar?-preguntó Aiday mirando entretenida una rosa,mientras le daba la espalda a Draco,este respiraba nerviosismo ante no saber formular palabra para explicarle a su amiga que no podría venir a verla en el duelo. Aiday sintió una mala vibra de parte de Draco por lo que se dio vuelta con el ceño fruncido-Draco,sabes que puedes confiar en mi para contarme todo-dijo esta acariciando la mejilla del rubio,este la miraba embobado y al percartarse de eso se alejó bruscamente

-Aiday...yo...es difícil. Prometeme que no te enojaras conmigo-la chica negó haciendo entender de que no se enojaria con Draco-No estaré para el duelo-A la castaña le cambió la cara bruscamente

-¿No estarás para apoyarme? DRACO TU ME PROMETISTE QUE ESTARÍAS ALLI PARA APOYARME-chillo frustrada

-Aiday,lo siento,quiero estar contigo pero mi padre tiene que hacer un viaje y con mi madre le tenemos que acompañar-la oji-verde lo miaraba decepcionada-Aiday yo...

-No,alejate de mi. Draco no me puedes abandonar,me prometiste que estarías dándome tu motivación,ahora concuerdo con lo que decían todos un Malfoy NUNCA cumple sus promesas-Draco se puso muy mal,al ver como su mejor amiga le refregaba en la cara lo que era tan cierto...veía como ella se alejaba sin despedirse
Aiday no quería soltar las lágrimas allí,Draco era el único que estuvo ahí para ella,y en uno de sus momentos más importantes de su vida no estaría para ella. Admite que estuvo más decirle eso a Draco,pero el la hirió y ella no se quedaría de brazos cruzados,su padre siempre le remarcó la frase de "Si te metes con un Constantine,ten presente que saldrás herido" y era cierto,Aiday era la prueba de esa frase ella nunca cerraría la boca,siempre quedaría con la última palabra y te doleria hasta fondo,sus palabras eran fuego podían ser muy hirientes.