✖ONE SHOTS. Heath Ledger!!👌✖

🔺¡Estas Fatal!🔻

◾Heath Ledger◾

*Narra Ella*

Toque el timbre de su casa otra vez  con un poco de dificultad ya que traía en una mano mi enerme maleta con todo lo que iba a necesitar y en otra las bolzas del supermarcado con todo lo que había comprado.

Toque otra vez el timbre escuchando los pasos que se aproximaban a la puerta

-Te he escuchado desde el primer toque- hablo con un poco de enojo en su voz (eso es bastante normal para mi, ya que ha sido un gruñón desde que lo conocí).

-¿Que te ha sucedido?-pregunto un poco sorprendida mirando su atuendo de arriba abajo.

Estaba en ropa de dormir y parecía no haberse dado un baño en días ya que llevaba barba de semanas y sus risos estaban enredados y sin brillo

-¡estás fatal!- fue lo único que dije mientras entraba a su casa y colocaba las cosas en la mesa dejando mi maleta en la entrada

-te he dicho que no necesito que me cuides, puedo arreglármelas yo sólo-contesto cerrando la puerta y dirigiendoce a mi -además, puede que Paul te necesite en casa-

Ruedo los ojos antes de contestar- ya te dije que Paul y yo no somos nada más que amigos- camino hacia él -Pero eso no parece entrar en esta cabezota- acarició su cabeza- por cierto, ¿qué les ha pasado a tus lindos risos?-pregunto tocando uno de ellos

-no les ha pasado nada- expresó quitando mi mano de su cabeza -he insistí no necesito a nadie que me cuide. Puedo hacerlo yo solo-gruño

-pues no me ire-mire a otro lado- esta mañana me llamo Mike tu representante y me dijo que te van a operar del estómago...
-¡Que bien!, ya te fue con el chisme

-no es así, él me llamo para que te acompañara y cuidara ya que toda tu familia se encuentra lejos y básicamente seguimos casados- le sonrei -Pero... si te incomodó y no me quieres aquí puedo irme- puse la mejor cara de cachorrito y tome su cara con mis dos manos -¿quieres que me valla?-mire directamente a sus ojos.

Sus ojos no dejaban de mirarme y yo trataba de seguir con mi cara para tratar de convencerlo. Supe que había ganado cuando él suspiró pesadamente colocando sus manos en mis codos y dijo:

-puedes quedarte y acompañarme ...
-y cuidarte-me adelante
-y cuidarme- sonrió -Y no, no me incómodas nunca lo has echo-

-Gracias- le di un suave beso en los labios.