27.

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Capítulo 27.

//Narra Cami//

Adrián: ¡Cami! -corre hacia nosotros-

¿Q-Qué haces aquí?

Mauro se veía un poco disgustado cuando lo vió venir a nosotros pero a la vez estaba calmado.

Cami: ¿Qué hacés aquí? -digo con una sonrisa-

Adrián: Suenas como si no quisieras que esté aquí -dice haciéndose el ofendido-

Cami: No es eso -rio- pero no esperaba encontrarte aquí.

Adrián: Vine a cuidar a mi hermano toda una semana -dice algo desanimado-

Cami: ¡¿Tenés hermanos?! -digo sorprendida-

Adrián: -se agarra el pecho- Me ofendés Camila, ¿Qué clase de amiga sos? -dice dramático-

Éste pibe me cae re bien, ¿Cómo pude dejar de hablar con él?

Cami: -rio- ¡Perdón! De cualquier manera, vamos a verlos.

Después de decir esto nos dirigimos a las gradas para ver a los pibes jugar.
Adrián le estaba sacando conversación a Mauro, los dejé que hablaran para que reduciera la tensión entre ambos, la verdad es que veo que Mauro de alguna manera odia a todos los hombres que me hablan, entiendo que sea celoso, yo lo soy, pero ahora más que nunca entiendo el odio hacia Adrián, si no me hubiera dado el peluche todo estaría más tranquilo...

Todo acabó, Adrián no paraba de hablar con Mauro aunque él era un poco indiferente, aún así no se podía escapar de su carisma y hasta él se reía.
Me alegra que Adri sea tan observador para darse cuenta de las situaciones, gracias a eso hizo que Mauro se tranquilizara y ahora se ve mucho más relajado, solo piensa que es un poco fastidioso.

Nos dirigiamos al hotel, Adri iba con nosotros ya que él también se hospedaba ahí. Seguía pegado a Mauro haciéndole preguntas y molestandolo al propósito, pero a pesar de eso, ambos parecían divertirse.

Llegamos y tuvimos que separarnos, ya era noche y yo estaba muy cansada, fue un día bastante cansado.
Entramos a nuestra habitación y lo primero que hizo Mauro al cerrar la puerta fue atraerme a él por mi cintura y besarme.

Mauro: No me abandones con Adrián -me hace un puchero-

Cami: Pero se estaban divirtiendo -digo feliz-

Mauro: N-no... No me cae -dice nervioso-

De aquí a Narnia se ve que mientes boludo

Cami: Si si, y yo aún creo en Santa Claus -digo burlona-

Mauro: Hey, él existe -dice riendo-

Le sonrió y me tiro en la cama, lo único que quería era dormir.
Mauro se acostó conmigo, me abrazó y me besó la frente.
Mientras estábamos así en silencio pude ver que sonreía, me sonrojé un poco al verlo así.
Pegué más mi cara a su pecho y me quedé pensando muchas cosas...
¿Por qué no recuerdo nada?
Sé que algunos hechos de nuestra vida se van borrando poco a poco mediante vamos creciendo pero esto es raro... Simplemente mis recuerdos... Desaparecieron.

...

Al despertar me dí cuenta que Mauro no estaba, tal vez habrá ido al baño.
Puse mis manos en la cama para poder levantarme y noté algo extraño, solo estaba cálido donde yo estaba acostada. Pensé que me había despertado por el movimiento de Mauro al pararse pero al notar esto me dí cuenta que él ya llevaba tiempo despierto. Ví mi celular y eran las 7:25 AM.

Él no madruga...

Me levanté y ví que no estaba en el baño, miré a todas partes en la habitación y la puerta no tenía el seguro. Por un momento pensé que había salido a comer algo, pero me hubiera dicho...
Volteé a ver una vez más en la habitación y me dí cuenta que no estaba su maleta.

Entré en un poco de pánico, fui rápido a ver mi celular.

¡¿Por qué se fue?!

No tenía ninguna llamada o mensaje de él.

¿Por qué no me dijiste nada? *Se le cristalizan los ojos*

Antes que comenzara a llorar me sequé las lágrimas, me cambié y le escribí un mensaje.

"¿Dónde estás? Desperté y no están tus cosas... ¿Por qué no dijiste nada?"

Al enviarle eso salí de la habitación para ir a despertar a Fer.

Cami: *toca la puerta* Fer... -le hablo en voz baja-

No respondía, no pensaba armar un escándalo, aún era temprano y los demás aún estaban durmiendo. Le hablé por teléfono para despertarlo y dijo que ya iba a abrirme.

Fer: *abre la puerta* ¿Qué pasó? -dice adormilado y tallandose los ojos-

Cami: M-Mauro... ¿Te dijo algo? -digo preocupada-

Fer: No he hablado con él... ¿Qué pasó? -cambia su tono a molesto- ¿Qué te hizo?

Cami: N-no está... *Se le cristalizan los ojos* No está su maleta tampoco... No me avisó... Nisiquiera me dejó un mensaje...

Fer: Ese imbécil... ¿Se pelearon o algo?

Cami: ¡No! Todo estaba perfecto... Dormimos abrazados y... Todo estaba bien, no... No entiendo

Fer me abrazó, estaba a punto de llorar, la verdad no entendía nada, ¿Por qué solo se fue?
Decidimos bajar para buscarlo por los alrededores del hotel por si estaba cerca o algo, mientras bajabamos nos encontramos con Adrián quien me vió con los ojos llorosos y se preocupó rápidamente.

Le expliqué todo lo que había pasado y me veía con la mirada algo... Rota, se veía decepcionado, triste y molesto.
Fue un poco extraña su reacción a decir verdad.
Bajamos para buscarlo y no estaba por ninguna parte, le preguntamos a la recepcionista y dijo que a las 2 AM aproximadamente salió un chico con una maleta bastante grande.

Cami: ¿Sólo uno? -digo preocupada-

(X): Fue el único que salió en la madrugada y nadie más ha salido con sus maletas.

En ese momento me dolía el pecho, no podía aguantar para llorar. Y para variar, nisiquiera me contestaba el mensaje.
Decidí hablarle pero fue inútil, no contestaba.

Adrián me miraba con dolor, mi hermano estaba demasiado molesto y preocupado a la vez. Nadie decía nada, estaba muy centrada en mis pensamientos...

¿Qué hice?

Nada, nisiquiera estábamos molestos...

¿Por qué no me dijo nada?

Habrá sido un problema... Pero hasta se llevó su maleta... ¿Por qué no me dijo nada?

No entendía la situación, todo lo que podía pensar no justificaba el por qué no me dijo nada. Boluda se llevó sus cosas, ¡Pudo haberme despertado y decirme que se iba! Por más apurado que estuviera, pudo despertarme... O mínimo dejar un mensaje...
A menos que... Simplemente no haya querido decirme...

A menos que... Lo haya hecho a propósito...

...

...

¡Chan chan chan! ¡Las extrañé!
¡¿Qué creen que haya pasado?! 😓
¿Mauro habrá abandonado a Cami? 😥

AMOR A PRIMERA VISTA [TERMINADA] // LIT KILLAH // MAURO MONZONOù les histoires vivent. Découvrez maintenant