Capítulo 18: Sentir x Transmitir

1.4K 115 13
                                    

Ámbar

Desperté en el sofá de mi apartamento. Ya era el otro día de mañana. Miré a mi alrededor y vi Simón en otro sofá. Él ya estaba despierto.

- Buenos días. – Dije, sonriendo. – No recuerdo de nada. ¿Terminamos el video?

- Sí. – Simón asintió. – No te preocupes, terminamos el video y ya hice un tweet diciendo que tengo una sorpresa. Ahora solo tenemos que esperar que la revista salga a las ventas. – Él se levantó de donde estaba y se tiró a mi lado.

- No hagas eso. – Pedí, empujándolo para otro lado. Simón empezó a reírse y yo terminé haciendo el mismo. – Delfina aun está durmiendo, Simón. Si ella nos escucha, estamos muertos. Ella me da miedo cuando despierta contra su voluntad.

- ¿Cómo consigues? – Él parecía haber ignorado todo lo que yo había dicho. Simón me estaba mirando fijamente sin desviar.

- ¿Qué? – Pregunté, desviando mis ojos de los suyos. El contacto visual me estaba dejando un poco incomoda.

- Ser tan hermosa justo cuando acabas de despertar. – Él me contestó y yo rodeé mis ojos. – Te estoy diciendo la verdad. ¿Nunca te dijeron como eres hermosa incluso cuando estás despeinada?

- No. – Negué y pasé la mano en mi cabello intentando arreglarlo. – Nunca nadie tuvo motivos para decirme eso.

- ¿Qué quieres decir? – Simón me miró como si no entendiera algo.

- No importa. Olvidá de eso. – Respondí y me levanté del sofá. - ¿Querés algo para comer?

- No. – Él rechazó mi propuesta y yo seguí para la cocina. – Pero puedo ayudarte si quieres.

- Wow. – Puse la mano en mi pecho. Él me había sorprendido al llegar sin avisar. – ¿Querés matarme del susto, Simón? – Mi 'novio' solo sonrió sin decirme nada. – Y, no, no quiero tu ayuda, gracias.

- Sigo recibiendo mensajes ofensivos. – Él corrió una silla y se sentó. – Espero que después de lo que hicimos, las cosas vuelvan a calmarse. No me hace bien ver esas ofensas.

- Si quieres mi opinión, tenés que aprender a lidiar con esto. – Fui sincera y él me miró sin entender. – Simón, si vos querés ser famoso, tenés que aprender a escuchar de todo. Yo sé que en al principio es algo asustador y hasta desesperador. Con el tiempo te vas a acostumbrar y esas personas ya no te van a afectar. Tenés que recordarte siempre que existen personas buenas y personas malas en el mundo. Y las personas malas necesitan que los otros estén mal para que ellas se sientan bien.

- Ámbar, tengo una pregunta para hacerte. – Simón suspiró y yo me quedé callada esperando por su pregunta. - ¿Por qué Matteo hace de todo para verte mal?

- Prométeme que, si algún día descubres eso, me vas a contar. – Contesté y abrí la heladera buscando algo para comer. – Esa pregunta me recuerda de otra: ¿Como alcanzar la paz mundial?

- Creo que Matteo no soporta que otras personas estén en los medios. – Simón sugirió y yo encogí mis hombros. – Creo que no es un problema contigo, pero con tu fama.

- Puede ser. – Tomé un yogur en la heladera. - ¿Querés uno?

- No, gracias. – Simón forzó una sonrisa. – No tengo hambre.

- Sé que te parece que las cosas son difíciles, pero, si querés un consuelo, es que las cosas solo van a empeorar. – Sonreí. – Las cosas en ese mundo de fama son muy complejas. Tenés que acostumbrarte a desastres.

- Creo que tienes razón. – Él admitió y yo sonreí mientras tomaba una cuchara.

- Yo siempre tengo razón. – Dije y salí de la cocina, riéndome.

Fake Love | Fanfic Simbar (Completa)Where stories live. Discover now