OneShots de Cazadores de Sombras.

~Sizzy~ Una cita random.

SIZZY.

Isabelle estaba acostumbrada a que los chicos la miraran y babearan por ella. Isabelle estaba acostumbrada a ser la única chica en el instituto. Isabelle estaba acostumbrada a ser guapa, excelente luchadora, perfecta. Por eso le molestaba la llegada de Clary. Tenía que admitir que la chica era guapa de una forma delicada que ella nunca podría lograr. Y era valiente, inteligente, audaz. Isabelle estaba celosa. Pero lo que más le molestaba era el chico mundano, Simon, y su aparente incapacidad de ver a cualquiera que no sea Clary.

Durante el tiempo que Clary se pasó en el instituto, Isabelle aprendió a conocerla, no como conocía a su familia y en realidad tampoco parecía esforzarse, pero internamente deseaba que pudieran convertirse en amigas.

Durante el tiempo en el que Clary no estuvo en el instituto, no había motivo para que Simon lo estuviera, lo que por alguna extraña razón, fastidiaba a Isabelle. Ella se decía que era por la falta de interés que Simon había mostrado en ella. No es que la primera vez que la vio Simon no haya sido un tonto a su alrededor pero el encanto se le había pasado demasiado rápido cuando miró de nuevo a Clary.

Durante el tiempo que estuvieron en Idris, Isabelle a penas y se había acordado de sus celos, de su deseo de ser notada. Por supuesto, ella pensó que se debía a todo lo que pasaba, y la verdad era esa, Isabelle tenía mucho en la cabeza como para preocuparse en ser superficial. Y luego había pasado lo de Max y Simon había sido amable, tierno y se había preocupado por ella como ningún chico lo había hecho. (A menos que contara a sus hermanos).

Tal vez fue esa la razón por la que Isabelle aceptó tener una cita con Simon. No por los celos, no por demostrar que cualquier chico estaría a sus pies, no porque era un submundo y enfadaría a sus padres. Había aceptado porque Simon era gracioso, inteligente, un poco (bastante) raro. Y valiente. Además, le gustaba. No era un chico común, no era un vampiro común y ella tenía la sensación de que no había sido un mundano común tampoco.

Simon la esperaba en un café de la quinta avenida. Olía delicioso y el lugar estaba ligeramente oscuro. Las paredes pintadas con colores de otoño, el techo tapizado con madera, el piso cubierto con una alfombra atigrada. Había luces navideñas colgando sobre sus cabezas. Los chicos que estaban ahí la miraron con evidente interés, no se había puesto un glamour.

Simon se sentía anonadado. Izzy era hermosa, su largo cabello negro oscilaba alrededor de sus hombros como si fuese un comercial de shampoo y acondicionador. Llevaba pantalones vaqueros de color azul turquesa y una blusa rosa bajo un saco de mangas cortas en color negro. Los tacones de sus botas eran silenciosos. Él estaba aturdido porque no se había imaginado que alguna vez esa chica aceptaría salir con él. Con un vampiro. Con un chico que no parecía ser en nada lo que a ella le gustaba.

Izzy era un sueño, cualquier chico sería afortunado de solo obtener una mirada suya. Simon admiraba a Izzy en todo, su valentía, su fortaleza, su seguridad, su inteligencia, su sensibilidad. Verla llegar era como si el mundo entero se detuviera y toda la luz se concentrara solo en ella.

-Hola-dijo Simon, poniéndose de pie, nervioso mientras Izzy se sentaba frente a él. Ella sonrió y Simon volvió a sentarse.