Copa Amolad

COPA ITIS (3)

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- Los equipos que clasificaran... son Dinamarca, quien el día de ayer tuvo una victoria aplastante, 4-0. Australia se fue a su casa con las manos vacías, pero seguramente esto le dará la motivación suficiente para el próximo mundial.

-así es, Locura. Otro que clasifica es Francia. Esperamos que sigan participando tan bien como antes.

- Esperemos que así sea, nos vemos en la jugada del mundial.

La transmisión termino y ambos Dioses de la locura y de la angustia se retiraron de manera urgente al salón barroco, puesto que Sabiduría los había citado para dar los resultados que todos claramente ya sabían.

-Bien, chicos -. Hablo seriamente Sabiduría.- Esta de más dar los resultados, pero esto es un protocolo que no debe cambiar por más obvio que sea. Quienes clasifican a octavos son... Francia y Dinamarca.

Los equipos nombrados gritaron emocionados, ellos estaban cada vez más cerca de la victoria.

-Ahora solo estas dos selecciones jugaran en los jardines colgantes.

-¡¿Queee?!-. Gritaron todos los Dioses contrariados.

- Pero... Sabiduría, eso no tiene sentido, de ser así, desde el principio se hubiese llevado acabo la copa aquí tal y como Amor quería.

- No discutan Vanidad, que sea aquí o allá no impedirá que ustedes ganen o pierdan-. La diosa volteo los ojos molesta.

- Como sea.

- Bien, sin nadie más disgustado nos vemos en los jardines... mañana.

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El día del partido llego, los Dioses jugadores estaban en los vestidores correspondientes, los cuales eran habitaciones de la pequeña diosa, listos para el enfrentamiento final. Vida y los demás Dioses veían desde las gradas lo que estaba ocurriendo, el Dios verde se pintó en el rostro la bandera de Francia, apoyando por completo a su alma gemela, banderines, trompetas, juguetes haciendo referencia a Francia adornaban casi todos los asientos que debían estar vacíos. Las aves, sirvientes de Vida portaban carteles donde claramente había palabras alentadoras para el Dios de ojos ambarinos

-¡¡¡Vamos, Muerte!!! -. Gritaba el Dios de piel oliva, agitando con impaciencia varios banderines, Sabiduría quien se encontraba a su lado fue obligado a portar una camisa color azul que decía "va" mientras el Dios de ojos chartreuse con su torso ahora desnudo continuaba la frase con un "mos". Los demás Dioses, en especial Locura se reían de lo infantil que Vida se veía.

Muerte por otro lado se encontraba encantado por lo que su Dios de estrellas estaba haciendo, aunque la vergüenza de vez en cuando se colaba por sus mejillas ante el espectáculo que se formaba en las gradas, pero nada era más bello que escuchar gritar su nombre de la voz de su amado.

- Valla, Muerte. Sí que te apoyan -. Comento la diosa del amor enternecida.

- Lo mismo digo, Amor. Ver a Medico con tu rostro en un cartelón es...

- Encantador, ¿no crees?-. Suspiro la pequeña Diosa.

Desfortunio y Musa portaban camisetas con la bandera de Dinamarca, apoyando a la Diosa de bella voz. Locura y Angustia, quienes se habían acostumbrado a ser unos grandiosos comentaristas según Locura decidieron tomar un altoparlante y narrar lo que ellos llamaban la jugada del mundial.

-Buenos días, publico, yo soy ¡Locura¡ y mi compadre ¡Angustia!.

- Así es amigos el día de hoy nos encontramos en el estadio de los jardines, donde se llevara a cabo el partido que determinara el ganador, en las gradas vemos como los aficionados gritan los nombres de sus Dioses favoritos, meneando con regocijo las banderas de las selecciones.

-Ahora vemos salir por la enorme puerta a las selecciones, esto se está prendiendo, el bullicio inunda el campo.

- Capitanes-. Dijo Tiempo, portando un precioso traje de árbitro, Muerte y Vanidad se pararon uno frente al otro, la hora había llegado, el momento que definiría todo estaba frente a sus narices. La mirada arrogante de Vanidad lo congelo por completo, el Dios alto sentía que su corazón era estrujado ante tanta presión, antes se hubiese reído si Tiempo le hubiera dicho que llegaría tan lejos, pero ahora la realidad lo tomaba por sorpresa.

- Saca Vanidad-. Anuncio su hermano, sus pensamientos lo tenían completamente en las nubes, ni siquiera presto atención cuando fue el sorteo y eso que lo tenía frente a él.

Antes de que los equipos se posicionaran en la cancha Vanidad y Guerra se susurraron palabras de aliento, aunque ambos Dioses no lo quisieran reconocer su esfuerzo los tenía en ese momento, ellos al igual que los Dioses franceses pusieron sudor, esfuerzo, en estos juegos. Vida, Medico y Sabiduría, tenían muy fácil para ganar, pero como completos idiotas se confiaron, tenían una mente brillante quien les podría ofrecer una estrategia maravillosa, junto con unos jugadores por excelencia, la victoria era segura. Luego estaba Australia quien tenía a Fortuna, la Diosa que literalmente la suerte le sonreía y la sostenía en brazos, no aprovecharon lo que tenían ahora solo podían resignarse, apoyar y sonreír en las gradas.

- Ambos equipos se posicionan en el campo, comienza el juego.

- Como en cada partido vemos a los jugadores ir directamente tras el balón.

- Hasta el momento todo está tranquilo, los franceses se adelantan y rápidamente se dirigen a la portería Danesa donde las belladonas de Vanidad impiden el paso, sirvientes y amos jugando para ganar.

- Los nombres de los Dioses son vitoreados por los perdedores-. Comenta burlonamente el Dios albino.

En el campo los jugadores vacilaban con un poco de dificultad a sus contrarios, intentaban con impaciencia tomar el balón y anotar gol para su equipo. Vanidad cubre con arrogancia a Muerte quien intenta moverse con rapidez para alejar a la ahora molesta Diosa.

- Guerra corre, corre y Vanidad va a su lado, se la combinan, están a unos metros de la portería, Vanidad, Vanidad... y... ¡¡¡fallaaaa!!! Valla suerte para Dinamarca, el Guerrero va y consola a Vanidad. Realmente no me lo esperaba, en los juegos anteriores Vanidad era quien acertaba los goles para su equipo pero ahora... eso no funcionara.

Los nervios del momento hicieron que la diosa dudara a la hora de tirar.

- Si, Angustia. Esto es inesperado, pero no desanima a Vanidad, ni mucho menos a sus fanáticos, porque en las gradas aun la siguen apoyando como a ninguna.

- Después de ese mal tiro los franceses tiene una determinación aplastante, una parca de Muerte arrebata el balón, ahora se la pasa a un cupido quien corre con más rapidez y se la pasa a Amor, Amor corre... ¡coorreee! ¡Corrreee! ¡gooooolll!

-¡¡¡Esaaa es mi Amoorrr!!!-. Grito Medico con euforia, formando con Vida y Sabiduría una ola feroz.

- Vemos al público emocionado, ovacionando de pie a la pequeña jugadora.

-medio tiempo y el tablero marca a favor de Francia.

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- Volvemos y podemos apreciar como la tensión está presente en el campo.

- Ahora la típica táctica francesa, típica para cualquier equipo, impedir que el balón sea tomado por el equipo contrario.

- El partido termina y la copa es para Francia.

-Fue muy inesperado, la verdad-. Dijo incrédulo el Dios loco.-Yo creía fielmente que Dinamarca saldría victorioso.

Esa noche todos los dioses festejaron en los aposentos del Dios sabio, las playbots y Sabiduría prepararon diversos cocteles, uno que otro dios Disgustado, pero al final de cuentas habría otro año para disputar la victoria.