Es increíble cómo me perdí en esta depresión de la cual me acorrala el espejo. Es increíble encontrarme con el espejo y... ni siquiera podría explicarles el desprecio que siento, me encuentro tan indeseable, tan imperfecta, tan poco valiosa, me miro y me encuentro repugnante, veo mis ojos apagados, no encuentro belleza en ninguna parte de mí, quien se viera a través de estos ojos pediría misericordia a tremendo odio.
Quizá esto es culpa mía, me obligué cada día de cada mañana a intentar ser hermosa, me esfuerzo por ser como todas las chicas bonitas y mientras lo intento me pierdo en un intento de belleza que no logro alcanzar, me pierdo en la fealdad de intentar ser perfecta, desviviéndome así todo el tiempo.
Tratando de juntar mis pesitos para comprarme maquillajes, ropa, accesorios para maquillar de colores esta alma triste y vacía. Mentí cuando me fingí interesante, soy cero ello, me esforcé por crear una personalidad con tal de opacar mis defectos visuales.
Si me vieras sin mi máscara y los filtros te asustas. Y créeme, lo sé porque yo sola lo hago.
Me arrulla ésta implacable tristeza de lo que no soy y finjo ser, internándome a un sueño profundo de la muerte.
