Capítulo 11

93 10 1
                                    

Narra Asano

Me encontraba pensando en cómo disculparme con Nagisa, pero por más que pensaba y pesaba no encontraba la manera de hacerlo, Nagisa era mi amigo desde que tenía diez años y dañarlo más de lo que hace su mamá, no lo quería. Siempre me había encantado aquella alegría que lo caracteriza, su mano siempre estaba lista para sacarme de la oscuridad, su hombro siempre me lo presto cuando necesite de uno para llorar.

Nagisa, era lo que me mantenía cuerdo, ahora lo había lastimado y tal vez dañado esta gran amistad, debía arreglar las cosas, no quería que me odiara y mucho menos lastimarlo más, él se merecía ser feliz.

Sabía que no podía decirle todo esto hablando, así que simplemente escribí una carta con cada pensamiento y emoción que yo tenía en este momento. Tome mi gabán en bien termine y salí en su búsqueda, debía arreglar esto lo antes posible.

Llegue a su casa, golpee unas tres veces hasta que por fin aquel peliazul abrió la puerta.

Nagisa —murmure.

—No quiero hablar contigo lárgate —dijo en un tono suave.

—Pero yo necesito hablar —quería ver su rostro, pero por más que lo intente este no me dejo.

—Yo no quiero escucharte —pronuncio— no quiero escuchar tus mentiras —sollozo y cerró la puerta.

Nagisa… —susurre desde el otro lado de la puerta— me iré, pero no quiero que pienses que fuiste un juego para mí —con cuidado deslice la carta por debajo de la puerta— Adiós Nagi —me despedí.

Llegue a mi casa, encontrando aun karma un tanto melancólico y llorón, me acerque con cuidado a su lado, encontrándolo con varias fotos de su madre.

—Karma, si quieres podemos ir a visitarla —propuse, sabía que si iba conmigo mi padre no se enfadaría tanto.

—¿Estás seguro? —pregunto con un pequeño toque de ilusión.

—Por supuesto, ve, abrígate y vamos —conteste.

Rápidamente mi hermano recogió cada foto y fue a cambiarse de ropa, odiaba ver a la gente sufrir y más si se trataba de personas tan valiosas como lo era mi hermano, se lo que siente al no tener a su madre cerca, después de todo yo tampoco tengo a la mía.

Narra Itona

No sabía cuánto tiempo llevaba en mi cama, me sentía muy mal por lo que había pasado con Nagisa, tenía miedo de que Asano decidiera quedarse con él y me dejara aquí solo con esta cantidad de sentimientos. Sentí como la puerta era tocada, sin pesarlo mucho me dirigí a ella para abrir encontrándome con Terasaka.

Itona, hola —dijo un tanto avergonzado— sé que ahora no es momento para molestarte, pero necesito un gran favor tuyo.

—¿Qué pasa? —pregunte de manera seria.

—Acompáñame —dijo tomándome de la mano para llevarme con él.

—Espera —dije tratándome de soltar de su agarre, pero no lo conseguí.

Caminamos por varios minutos hasta que llegamos al parque, donde por fin dejo mi mano libre, girándose me miro de frente y con una expresión seria, no muy típica de él.

—¿Itona, sales con Asano? —pregunto.

—No lo sé —fui sincero— pasaron muchas cosas —bajé la mirada no quería que viera el desastre que ahora era.

Hasta que Te Encuentre  (Karmagisa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora