Pensamientos

Infierno

Sucumbí ante sus encantos, ¿qué mas podría hacer?

Nadie me advirtió de lo peligrosa que era aquella mujer.

Aunque agradezco que no lo hayan hecho.

Conocí el mismísimo infierno, jugué entre las llamas que avorazaban mi alma. 

Sus labios me arrancaron suspiros que aún no puedo olvidar, sus manos recorrieron hasta los lugares mas recónditos de mi ser.

Me bañé en las pailas del infierno con tal de seguir a su lado, era tan ardiente, que no me importaba nada mas, veía sus ojos envueltos en fuego, y en vez de tener miedo, me excitaba con demasía.

Pensé que tendría un final feliz aunque sea en el infierno, pero no, el diablo no se enamora, solo juega... y vaya que sabe jugar.

Perdido y en cenizas así quedas, pero si preguntan si me arrepiento. Para nada, volvería mil veces al infierno, para volver estar en sus brazos quemando todo mi ser con mi amada.