•Capítulo 2•

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Seguía sin poder creerlo, mi corazón latía a la velocidad de la Luz inclusive más.

- ¡AL FIN!- un grito ahogado salió de mi garganta, estaba tan feliz, tan eufórica, tan emocionada, sentimientos que sólo Shawn lograba causar en mi.

- Ya cállate, nos van a mandar a dirección- me dijo Lili entre risas, se notaba que estaba igual de emocionada que yo.

- No me importa, y no se como aguantas la emoción- le dije sin dejar de sonreír. - yo siento que en cualquier momento me desmayo de la emoción- sentía que mi mandíbula se acalambraba pero no podía dejar de reírme.

- Es que no quiero más sanciones, estúpida, o mi madre me matará, y realmente necesito conocer a Shawn antes de que eso pase- dice para luego soltar una risa, ¿ya les dije cuán hermosa es Lili cuando sonríe? Puedo apostar a que la mía parece la de una foca con retraso, solté una risotada a causa de mis pensamientos. - Mierda...- la escuché decir casi en un susurro, miré hacia donde ella estaba viendo, y me di cuenta a que se refería, era Lauren, estaba a un par de metros caminando hacia nosotras.

- ¿Vieron que Shawn dio fechas para Argentina?- preguntó con esa voz de zorra, si había algo que odiaba más que al profesor y su estúpida clase de geografía era a Lauren, siempre creyéndose mejor Mendes Army sólo por tener el dinero y las cosas que nosotras no. - seguro ustedes no van, desde acá puedo oler su pobreza- dijo con un aire de grandeza.

- Si vamos o no, no es problema tuyo- escupí con un tono en el cual se notara lo mucho que la aborresia.

- Exacto, y es mejor que no nos molestes o voy a hacer que los implantes que tienes en el trasero se exploten- me sorprendí al escuchar las palabras de mi amiga y sólo atiné a soltar una risa.

- Tranquilas, ya me iba, no me rebajaría al nivel de ustedes ni por todo el dinero del mundo- sus palabras encendieron algo en los ojos de Lili, no la había visto tan enojada desde que Shawn dejó fuera de sus 2 primeras giras a Latinoamérica, realmente estaba enojada.
Lauren siguió su camino, o eso creía yo hasta que en un abrir y cerrar de ojos lo único que pude ver fue a mi amiga abalanzarse sobre el pelo negro de la zorra... digo... Lauren, pensé que está iba a caerse pero no, lo que pasó me impactó, en las manos de Lili estaban las extensiones de pelo de Lauren, no pude contener mi risa y mi amiga menos... una voz interrumpió nuestras risas.

- A mi oficina, ya. - dijo el director sin ninguna emoción en el rostro, realmente metimos la pata, estábamos en serios problemas.

- Nosotras no tuvimos la culpa- intenté defendernos.

- Lo que su amiga tiene en las manos demuestra lo contrario- dijo el canoso mirando el pelo de Lauren , ahora en manos de Lili.

- Mierda..- susurré, pero al parecer este me había escuchado.

- Ustedes si que son un caso serio- soltó por última vez antes de darse media vuelta y perderse en uno de los pasillos.

- Excelente, Estoy segura de que citarán a nuestros padres- soltó Lili de mala gana, luego se hechó a reír

- Son unas idiotas, me las van a pagar, les voy a arruinar la existencia- comenzó a decir la sin pelo.

Realmente ya no tenía ganas discutir y mucho menos de tener más problemas, vi como mi amiga arrojaba las extensiones a quien sabe donde, para cuando me di cuenta Lauren ya se había ido a quien sabe donde.

- Maldita zorra, piensa que puede maltratarnos e irse como si nada, la próxima le va peor- Comenzamos a reírnos, mientras los alumnos salían de sus salones como si fuesen una manada de búfalos siendo perseguidos por leones.

- Hiciste algo que yo nunca me hubiese animado a hacer- le dije ya más calmada, y era verdad, soy muy ¿calmada? ¿callada? ¿tímida? La verdad no lo sé, pero nunca hubiese hecho eso.

- ¿Acaso me dirás que no se lo merecía?- frunció el ceño divertida

- Tienes razón, le hubiésemos partido la tráquea para que dejarade decir estupideces- bromeé.

- Esa hubiese sido una buena idea- rió.

Volvió a sonar la campana indicando que cada quien debía ir a su debida clase, para mi alivio momentáneo estás pasaron un poco más rápido.

Cada minuto se me hacía el doble de largo y sentía que mi cuerpo iba a desplomarse en medio de la clase, había tenido más emociones de las que podía aguantar, primero el viejo oloroso, la sanción, Lauren y su estupidez crónica, la segunda sanción, pero no todo era malo, también me sentía emocionada y eufórica, Shawn vendría a Argentina, y posiblemente iría con mi mejor amiga, eso realmente me alentaba a seguir, a demás de que ya era viernes, y podría quedarme hasta tarde admirando a Shawn, el futuro padre de mis futuros hijos.

La clase había finalizado, Lili tuvo que gritar para sacarme de mis cavilaciones.

- ¿Y ahora que aremos?- me preguntó mi mejor amiga ansiosa.

- No lo sé, ¿quieres ir a dormir a mi casa?- pregunté esperanzada, no creo que su madre la deje después de lo de hoy.

- Será difícil convencer a mi madre pero trataré, nos vemos a las 18:00- se le notaba la emoción en la voz, yo también lo estaba, - si es que me dejan- concluyó su frase y dejé escapar una risa.

Ya estaba cerca de casa, me faltaban menos de 2 cuadras, decidí apurar el paso, tanto que parecía que estaba corriendo, necesitaba abrir Twitter, necesitaba saber todo, TODO

*Emma y Lili en multimedia*
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Infiltradas|| Shawn Mendes Donde viven las historias. Descúbrelo ahora