Entró corriendo.
Estaba enojado.
¡Se sentía ultrajado!
-¡Es la última vez que me dejó convencer! -gritó en la vacía sala.
-¿Qué te tiene tan alterado? -pregunta una voz entrecortada.
-¡Mi mamá me inscribió a danza, que sería genial, que tendría más amigas! -gritó nuevamente el joven- ¡Pero nunca me advirtió que es una escuela de danza contemporánea! ¿Sabes qué requiere ese tipo de danza? -su interlocutor negó suavemente con la cabeza- Sentimientos, ¡dejar que fluyan a través de ti y que ellos mande tu cuerpo! -dijo dramático, agarrándose así mismo con un rostro de dicha,
Dicho sea de paso que se resquebrajó a los pocos segundos.
La Cabra miró en confusión y desinterés. El libro "El Testamento Maya" entre sus pezuñas fue cerrado con cuidado, poniendo un separador en la página que estaba actualmente.
-No comprendo el... problema.
-Cabra, yo no soy una niña para andar expresando lo que mi corazón oculta, ohhh~.
El animal cerró los ojos, claramente le producía pena ajena ver los exagerados gestos del muchacho.
-¿No deberías entonces decirle a tu madre que de ahora en adelante no seguirás sus órdenes?
El chico miró horrorizado.
La Cabra miró con resignación.
-Noa, quien cobarde nace, valiente se hace. No acabas de nacer, ¿o sí? -La Cabra abrió su libro y retomó la lectura.
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Frases de La Cabra.
RandomHay cosas que son posibles, imposibles y completamente descabelladas. Como, por ejemplo, una cabra que habla. -Uno como animal sabe muy bien sobre el instinto. Este te hace reaccionar en momentos de presión o peligro, agudiza tus sentidos y reflejos...