Autoengaño

223 23 2
                                    

Se sentía terrible por la discusión que había tenido con su pareja, ya habían pasado algunos días y tal como lo había dicho, éste le mandaba un mensaje a cada hora diciendo lo que hacía, pero aparte de eso nunca respondía sus mensajes ni le trataba de forma cariñosa, más que una pareja, se sentía como un carcelero, y eso solo le hacía sentir la peor porquería del mundo, si tan solo no hubiera abierto su boca podría estar feliz, o al menos más tranquilo.

-Min, Min, ¡Sungmin! – sacudió a su amigo por los hombros sacándolo de su ensoñación – despierta Minnie

-¿Qué? ¿Qué pasa Hee? – lo mira con el ceño fruncido, la gritadera lo había asustado –

-¿Qué pasa? Pues que no me haces caso, te llegó un mensaje hace rato, y podría jurar que era el timbre de Kang, al igual que las decenas de mensajes ayer

-Oh - miró su teléfono sin ánimo de ver el mensaje – sí, es Kangin – dejó salir un suspiro –

-Y. ¿Por qué no estas saltando de un pie mientras lees sus cientos de mensajes? Creo que solo hoy te mando más mensajes que en los últimos dos meses juntos, pero no pareces feliz por eso

-Ay Hee – mira a su amigo y sin poder resistirlo más lo abraza y se pone a llorar, no podía creer como se estaba rompiendo su relación, se sentía tan mal, tan culpable, realmente quería que todo funcione, pero en lugar de ser un apoyo estaba siendo una carga – soy un idiota, estoy perdiendo a Kangin, cada vez somos más distantes, y me siento tan mal, lo necesito y lo único que hago es alejarlo de mi

-Minnie - lo abraza intentando consolar el corazón de su amigo – pero, ¿Por qué dices eso? ¿Por qué crees que estás perdiendo a Kangin?

-Porque lo estoy haciendo, soy un tonto – intenta limpiarse las lágrimas, pero estas no dejaban de salir – yo yo le reclame, le dije que, porque no me mandaba más mensajes, que lo extrañaba y me preocupaba por él, aunque sea uno mientras estaba en el baño, fui tan egoísta, no pensé en todo el estrés que está pasando y en lugar de ser su apoyo le reclamé

-A ver, espera, espera Minnie – saca un pañuelo y le ayuda a limpiar sus lágrimas mientras organizaba sus ideas para poder hablar con su amigo sin maldecir al pendejo que tenía por pareja – le dijiste que lo extrañabas, que te preocupas cuando no sabes nada de él por días, incluso cuando sabemos que está en línea – suspira al ver la carita de su amigo – entonces, en lugar de disculparse y apreciar que te preocupes por él, me dices que ¿se enfadó? Pero ¿Por qué? Es absurdo, si esta siempre en línea, un simple mensaje sería suficiente, yo he visto como lloras al no saber de él, como vives atento a lo que pasa en esa ciudad rezando porque no haya ningún incidente que pudiera afectar a Kangin, y él en lugar de apreciar eso, ¿se enoja? Y entonces, ¿porque ahora recibes tantos mensajes suyos? Acaso eso no significa que todo mejoró y que la comunicación está volviendo

-Niega con la cabeza y suspira cansado de llorar – me dijo que para que le reclamaba porque no confiaba en él y por eso ahora me manda un mensaje a cada hora diciéndome que es lo que está haciendo, pero Hee, te juro que, si confió en él, yo solo quería conversar un poco más, intente explicárselo, pero no responde mis llamadas ni hace caso a mis mensajes – saca su teléfono y le muestra sus mensajes –

-Toma el teléfono y empieza a leer los mensajes quedándose con la boca abierta ante lo que leía – pero Minnie, ¿Cómo puedes llegar a este extremo? No ves que él te está manipulando, y de una forma muy cruel no deberías rogar tanto

-Como no hacerlo si yo lo eche a perder, le hice sentir que no confiaba a él, y viste, ahora se reporta a cada hora, como si en lugar de su pareja, yo fuera su carcelero – solloza –

-Pero Minnie, no puedes culparte si él no es capaz de entender lo mucho que lo amas, ya no deberías rogar tanto, no se lo merece – suspira y lo abraza – vamos pequeño, ¿acaso no ves lo hermoso y valioso que eres? ¡nadie merece tus lagrimas! Mucho menos alguien que te lastima tanto

Otra vez no...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora