Capítulo cuatro. |Tan cerca pero tan lejos|

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‘‘Tan cerca pero tan lejos’’.
Habían pasado dos semanas desde que mi hermano Raúl me
había mandado el correo, estas dos semanas hablamos siempre
y cada cosa que pasaba yo se lo contaba, como bien dije, él era
mi mejor amigo y confidente, y ahora lo seguía siendo. Igual el a
mí, nos teníamos mucha confianza.
Dos semanas y Luke seguía su relación con la dichosa Allison,
no dudaba que esta relación no le funcionara, ya sea porque él
la engaño o ella le rompió el corazón.
Prepare mis cosas para ir al colegio. Esta vez tenía tanta pereza
de andar con un pantalón entubado, que solo tome el pants del
colegio y la playera negra con letras blancas anunciando el
nombre de ‘’Roosevelt’’. Me puse los tenis vans azules, agarre
mi morral y salí. Esta vez no quería ir con verónica a la escuela
así que solo le dije que nos viéramos haya.
Llegue al colegio con los audífonos puestos y la música a todo
volumen que en realidad no escuchaba nada. Al estar en la
entrada me quite los lentes de sol que traía y aun con la música
prendida entre al colegio. No había visto a Luke ni a verónica, ni
a nadie que conociera. Me encontraba caminando sin ningún
rumbo, imaginando una vida perfecta con Luke conociendo a mi
hermano, conviviendo con mi familia, estando en el estadio
donde juega mi hermano, todos juntos. Seria simplemente
perfecto. Cuando de repente sentí un empujón que me saco de
mi vida perfecta.
-¿Qué dices? –pregunte sacándome los audífonos, y me
encontré con Marc, el cantante representante de la escuela, con
el que andaba quedando, pero por alguna extraña razón nunca
anduvimos. Yo soy del grupo de bailarinas del colegio y soy la
segunda mejor bailarina del Roosevelt. Claro, la bailarina y el
cantante. Pareja perfecta, la verdad es que Marc me gustaba o
me gusta, no sé. Pero no lo estoy enamorada de él cómo de
Lucas.
-Nada, bueno la verdad es que. –Se cayó, la verdad es que nos
conocíamos bien, y llevábamos una buena amistad. -uhm, ¿De
nuevo imaginando vidas perfectas? –Rio.
-¿La verdad? Es que sí. –Reí con él.
-Bueno, como sea, perdón por el empujón, no me fije por donde
iba. –aclaro.
-No te preocupes. –le dije dando media vuelta para irme.
-Oye, ¿cuándo será el día en que aceptes salir conmigo? –me
dijo tomándome del brazo y volteando a ver hacia donde estaba,
¿él de verdad ansiaba salir conmigo? No lo sé, pero él era un
Marc muy diferente al que yo había conocido. Yo lo conocí
tímido y callado cuando apenas habíamos entrado al colegio y
comenzamos a hablar cuando estábamos ensayando para su
presentación en el concurso de canto nacional que se
organizaría hace un año el cual no gano pero de allí a tenido
muchas presentaciones en diferentes escuelas y ciudades, le iba
muy bien. Ahora él es nada serio, divertido, sociable y con
muchas chicas tras de él, es medio alto, moreno pero no tan
moreno, su cabello negro azabache peinado hacia arriba de lado,
como Luke, y sus ojos color marrón pardo. Simplemente
hermoso.
Sonreí de lado. –algún día Marc. No desesperes. –di media
vuelta y me fui. Camine unos pasos y me encontré con
Fernanda. La organizadora del grupo de baile.
-Bell, que gusto. –hablo ella. –qué bueno que te encuentro,
quería hablar contigo.
-¿A si? ¿Qué pasa?
-Van a empezar los ensayos. La licenciada me ha dicho que en
un mes y medio tenemos competencia de baile. Va a ser
nacional, como el concurso de canto del año pasado. Así que
como perteneces quería decirte que empezaremos a ensayar en
donde siempre. –dijo en un tono emocionada. Nosotras, el grupo
de baile, ensayamos en un salón de baile que está a un lado del
colegio, este lugar esta grandísimo, tiene todo lo necesario para
que tengamos los ensayos perfectos, aparte el lugar tiene
grandes espejos para poder vernos y ensayar mejor. Sin duda un
buen lugar patrocinado por el colegio.
-Yo bueno, am, no, conmigo no cuentes esta vez. –No se esta
vez no tenía ganas de llegar horas tarde a casa.
-¡Woow! ¿Qué? –dijo sorprendida.
-Que conmigo no cuentes esta vez. –repetí. Dicho esto
terminamos la conversación y seguí mi camino hacia el salón de
clases. Las horas se pasaron rápido. Cuando di cuenta ya
estábamos en la última clase. Metodología de la investigación.
Verónica y yo estábamos sentadas hasta adelante y Luke detrás
de mí.
La maestra estaba hablando sobre un tema de investigación y
dijo que para aprender haríamos una obra sobre nuestro tema.
-Así que ya saben, quiero equipos de cinco, y este trabajo vale
el 60 por ciento de su calificación, quiero un trabajo bien hecho,
han aprendido bastante y lo harán más con este trabajo. Así que
andén, busquen sus equipos. –hablo la maestra y se sentó de
nuevo en su asiento.
-Tú y yo. –susurro Luke con un tono ¿seductor? En mi oído, que
al instante me erizo la piel. –Ah –se pauso. –y verónica. –
completo.
Voltee despacio hacia mi izquierda y la cara de Luke se
encontraba tan cerca de la mía, que tan solo cerré mis ojos y
respire su aroma. Cada vez lo sentía más y más cerca de mí.
Pero nada dura para siempre.
-Nosotros tres. –interrumpió verónica, y Luke de inmediato se
separó. –Mierd*. Pensé.
-Claro. –afirmo Luke y rápido volteo a ver a Verónica.

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SilesinteresaleermiotranovelaesigualconLuke, estaenmiperfilysellamaLachicaPerfecta.
Graciasc:

-Nerix.

-PAUSADA- Chico Rompecorazones. |Luke Hemmings|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora