PlayBoy. [2jae]

•Capitulo uno.

Pov Jaebum

La oficina era un completo silencio donde solo se escuchaba el pasar de las páginas y el inaudible sonido del cigarro consumirse. El chico frente a mi parecía temblar sin mayor razón lo que hacia que una notoria molestia se plasmará en mi rostro, su currículum se encontraba casi vacío y sin experiencias,pero, eso no era lo que me molestaba sino que era falso...completamente inventado.

Aclaré mi garganta para fundir el cigarrillo contra la cerámica del cenicero,observe al chico al cuál dedique una falsa y ladina sonrisa.— Kim Yugyeom...¿no?.— dije ordenando sus papeles dejándolos sobre mi escritorio. — Interesante, pero no convincente para alguien como yo.— pude ver como la amplia sonrisa de aquel chico se desvanecía rápidamente causandome cierta gracia.

Puedo explicarlo Sr. Im, pero por favor, necesito el trabajo...seré un buen secretario, se lo demostraré. — murmuró apresurado a lo que yo solo me acomode mejor sobre el escritorio.

¿qué es lo que pretendes explicar?.—dije en un tono más grave notando el nerviosismo crecer en su cuerpo. — acabas de mentirle a quien podría darte un trabajo, eso no inspira nada de confianza de jefe a empleador.— mis labios formaban una fina y recta linea en mi rostro que no expresaba mucho la mayor parte del tiempo.— primero...eres menor de edad, cualquiera podría notar que aún teniendo altura, tu rostro y manera de ser es infantil. Segundo...— pronuncié con una sonrisa a la vez que volvía a ojear las hojas.— inventas trabajos y experiencias que no tienes.— dije seco para notar como bajaba la mirada hacia el suelo.

Sr. Im.— pronunció con cierto tono de desesperación aquel menor de pelo castaño.— paso por una situación difícil, el trabajo que tengo no es para nada grato además de que el sueldo no me alcanza para mucho. La abundancia de empleadores crece cada día y ya no se solicita más de una vez a un acompañante.— la aguda voz del chico se perdió por un momento haciendo que un sollozo de su parte se hiciera presente.— prometo que no le causare problemas, es más...prometo sorprenderle.

Aquel chico de diecisiete años era sincero y por su forma de ser algo sin filtró. Era una buena oportunidad contratarle en algunos casos, el ser joven trae buenos resultados y rápido aprendizaje. Me levante de mi asiento limpiando las cenizas sobre mi traje a medida para pasearme por alrededor del menor como analizando la situación, saque el pañuelo de seda que colgaba de mi bolsillo para extenderlo.— deja de llorar, las lágrimas no te llevaran ni solucionarán nada.— pude notar que con cierto asombro de aquel acto limpiaba sus lágrimas. — Tienes una oportunidad, Kim. No me desilusiones, comienzas hoy...pero primero. — tome cierto dinero de mi bolsillo entregando unos cuantos al chico.— ve por un traje que venga contigo, este trabajo es serio y tenemos una imagen que cuidar.

Este cogió con las manos temblorosas el dinero para caer de rodillas sobre el suelo, cualquier persona hubiese pensado que el chico se encontraba mal, pero a mi no.—Gracias Sr. Im...n-no le fallaré. — pronunció nervioso desde el suelo, mi mano fue hasta su hombro derecho dejando un par de palmaditas. — levantate, mis empleados tienen una dignidad intachable.

Cuando el menor se levanto y calmó me agradeció nuevamente levantandose para retirarse e ir a comprar lo que le había solicitado, pero antes de que cruzará el marco le llame con una amplia sonrisa y curiosidad.— Kim.— pronuncié con cierto respeto para sacar un lápiz y papel.— quisiera que me des la dirección de tu antiguo "trabajo".— Sonreí al chico que se acercó con cierta duda anotando la dirección en silencio hizo una pequeña reverencia para retirarse con mi permiso, leí este un par de veces pensando que podría hacer con aquella información.

Para ser Jefe de la empresa de composiciones y debut de varios grupos era bastante conocido a mis treinta y cinco años, mi relación había fracasado ante la demanda del horario y me encontraba solo alrededor de dos años sin tomarle importancia o necesidad pero eso no impedía que comenzará a divertirme.

----------------------------------------------------------
----------------------------------------------------------

La noche había caído y todos se retiraban de su cargo, me despedí de los últimos empleados para dirigirme a mi audi de color negro, escribi la dirección en el gps que me dio de inmediato como llegar, no tardaría más de una hora hasta allí, esperaba poder dar con un lugar decente al igual que sus empleados pero guardaba mis expectativas con bajas ilusiones.

Una hora más tarde de conducir me encontraba fuera de un local con un cartel iluminado "exuberante" se leía a simple vista, un hombre de estatura mediana y cuerpo trabajado pero nada a mi lado, Me observo de pies a cabeza para darme el paso, el lugar olía a sexo ,los oídos sensibles percataban quejidos y gemidos de distintas habitaciones, había un pasillo largo tapizado de color rojo por las paredes que guiaba a un salón lleno de sofás donde se encontraban diferentes chicos y chicas de edad temprana, algunos parecían de experiencia y vestían provocadores mientras otros causaban más ternura. mi vista recorrió la habitación topandome con un par de chicos que con suerte se llevarían por unos cuantos años, me acerque al recepcionista que me dio una amplia sonrisa para sacar un libro de registros.— ¿que chica querrá?.— consultó con una voz rasposa y mirada fija.

Las mujeres no son lo mío. — pronuncié algo molesto volviendo a ver al par.— quiero a un chico.— dije para sacar un fajo de billetes, no importaba el valor correspondiente, yo pagaría lo que se me diera la gana. La sonrisa sínica y avara en su rostro me causo repugnancia, no preste atención a lo que me decía para caminar en dirección de donde deseaba, observe a ambos para sentarme en medio notando reacciones totalmente diferentes de estos.

Por un lado, un chico de pelo oscuro, sonrisa provocativa, delgado y cuerpo con curvas, vestía con encaje femenino de color rojo que se acentuaba bien a su trasero. Sus manos curiosas ya se colaban sobre mis muslos acariciando estos lentamente, Sonreí para observarle por unos minutos.— me llamo Park, Park jinyoung...pero esta noche puede llamarme junior si así gusta.— asenti indiferente con aquel para girar la mirada hacia el que demostraba menos edad. Se encontraba  con la espalda recta, sus piernas juntas y con notable nerviosismo por mi presencia. Su pelo rubio caía sobre sus ojos dando cierto misterio a descubrir, usaba algodón traslucido blanco con detalles en azul que daban una imagen más tierna y atractiva a mi gusto. — ¿como te llamas?. —  pregunté llevando mi diestra a su muslo llamando su atención.

Este levanto la mirada temeroso para acercarse nada más centímetros a mi.— Youngjae, Choi...Youngjae.—

N/A: hola hola ♡, aquí el primer capitulo, espero les guste y sigan la historia. Espero su apoyo y comprensión de que soy nueva en esto, estoy dispuesta a recibir sugerencias, criticas y preguntas. Sin más me despido y les dejo aquí playboy.