Mi enemigo, mi Mate [MEMM #1]

2.El comienzo licántropo.

(Selene en multimedia)

Narrador omniscente

El el mundo, no solo viven los humanos, hay otras razas que viven en las sombras o incluso que son capazes de convivir con las personas. Viven camuflados con un aspecto tan humano que es sorprendente e incluso pueden estar a tu alrededor y no los verías. Las razas más abundantes son los vampiros, los hombres lobo, las brujas, los demonios, los ángeles, las sirenas e incluso las hadas.

Sí todo eso que mucha gente mete en sus cuentos, todos existen, estan en tu vida, tu mundo, no es como crees, estas viviendo en una mentira.

Una gran mentira que se ha ido borrando a lo largo de los años para no atemorizar a la raza humana. Una mentira que ya se ha olvidado, se ha borrado de la memoria las muertes misteriosas que ocurrian 1.000 años antes. Se ha olvidado como las razas sobrenaturales exclavizaron y explotaron a la humana.

Todo se ha borrado. Ya no existe. O eso crees. Bueno, eso te han echo creer.

Las razas mas importantes del mundo sobrenatural, siempre han sido dos, la vámpirica y la licántropa.

Hoy os contaré la historia de la licántropa, la otra la revelaré más adelante.

Todo comenzó en el siglo XII. El dios Zeus tuvo una pequeña niña con la titán Tea; a la que llamaron Selene , su aspecto, recordaba la mismisima luna, pelo negro, piel tan blanca como la espuma marina y ojos color plata. Por eso la nombraron la Diosa Luna.

La pequeña creció en el olimpo feliz, su belleza era tal que hasta la mismísima afrodita envidiaba a la pequeña niña. Era el tesoro de su padre, ella tenía un deseo, bajar a la Tierra. La vida humana, le parecía tan interesante que quería verla de cerca.

Pero su padre prohibió a todos los dioses bajar a la Tierra, ella cuandó cumplió los 18, le rogó a Zeus que la dejara bajar. El se negó rotundamente, pero al final logró acceder.

"-Pero con una condición, debes estar aquí en un año, y tienes totalmente prohibido involucrarte directamente en las vidas de los humanos, intenta pasar desapercibida, no hables mucho con ellos, se una desconocida. Además solo podrás volver justo cunado cumplas los 19"

La chica aceptó la propuesta y al día siguiente atravesó el portal para ir a la tierra, allí el mundo era totalmente distinto de como se veía en el Olimpo. Había caído en lo que en tiempos antiguos había sido Atenas, la cual ya no era tan rica ni tan famosa como en la época de la expansión romana y de la expansión griega. La vida era totalmente campesina, sus ropas gastadas y un fuerte olor a establo predominaba la plaza en la que se encontrada.

La gente, al pasar la miraba con malas formas, hasta que ella deparó en un detalle, sus ropas, finas y de seda y su piel limpia y blanca, por no haber estado bajo el sol de mediodía, sus manos, sin ninguna herida y su cara sin imperfecciones, su pelo negro perfectamente peinado y una diadema de perlas enredada en las hebras de su cabello. Era diferente, parecía una noble y no encajaba allí.

Rápidamente busco una tienda donde vendieran algo de ropa y al hallarla se dispuso a acercarse hasta el lugar. Cuando dio el primer paso, sintió un fuerte dolor en uno de sus pies, pues no llevaba calzado. Aguantando el dolor se encaminó a la tienda y al entrar dos muchachas jóvenes la miraron con recelo. se dirigió a una anciana que estaba sentada en una silla, y le preguntó por ropa, la anciana dudosa le preguntó que por que querría alguien cambiar esas ropas por una de campesina, ella contesto que era por que le hacia falta y la mujer le dijo que estaba loca, pero le tendió la ropa de campesina y unos zapatos.

Se la puso y a la hora de pagar, como no tenía monedas, le entregó la diadema de perlas y plata. y se fue de allí. Por el camino, se encontró un lazo, el cual hábilmente se enredo en el pelo para recogérselo.