Un monstruo... [Lukanette & Adrinette] Editando...

Capitulo 6

La sonrisa se le borró de la cara y su corazón latió con fuerza al cruzar las puertas del instituto.

-tienes que ser fuerte Marinette...- recordaba los mensajes de Adrien.

Miro hacia todos lados buscando a Luks sin encontrarlo a la vista, hasta que una respiración detrás de su cuello le hizo erizar la piel.

-Buenos días terróncito...- le acarició un brazo aún detrás de ella.

-no dejes que te trate así...-

La azabache apretó los labios y cerro los ojos, convenciéndose a mí misma de algo... Que futuramente se va a arrepentir. se volteo quedando a centímetros de la cara de Luka y sin esperar más lo empujó con todas sus fuerzas lejos de ella, cayendo al suelo. El de mechas levanto la mirada lentamente hacia la ojiazul, sin importarle que todos estuvieran mirando. Aunque allá sido un pequeño empujón, para él, podía ser la peor traición de su novia.

Luka se paro sin problema, y camino hacia ella sin ningún gesto en su cara para no llamar la atención de los demás, pero Marinette estaba firme... Pero aún así caminaba hacia atrás.

-no te muestres débil... Porque saben aprovecharse de eso, así como lo hacían conmigo, recuerdas?-

-cometiste un gran error... Tesoro...- susurro para que ella nada más escuchara. Sus pasos temerosos la llevaban a la parte de abajo de la escalera, adonde nadie los pudiera ver. Ahí abajo, hay un pequeño cuarto donde el conserje guarda sus cosas para limpiar.

Entro al cuarto sin darse cuenta al momento que chocó su espalda contra la pared de la pequeña habitación, Luka cerró detrás de él y volteo a verla, ahora sí con ese gesto que nada más conocía marinette. El monstruo... La azabache no se movía, tenía miedo pero no lo demostraba, su cara estaba serena. Él, desesperado de quito la correa al rededor de la cintura y aún en sus manos la puso al lado del rostro de Marinette.

-sabes?... No pensaba en un gran castigo como este, pero no me das opción.- un golpe con esa tira de cuero la hizo caer al suelo. Apoyando su espalda a la pared. Uno y otro y otro golpe iba hacia el pobre cuerpo de Marinette, que con cada uno una marca roja aparecía en su piel, llegando hacer un moretón... -DI QUE ME AMAS!! HABLA!- no decía palabra alguna, no pensaba en decirleso.. Aunque muero era a golpes, él no merecía su amor.