Dos.

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...—Papi, ¿Hoy regresa papá Louis, verdad?—Preguntó Darcy ilusionada, tras bajarse del autobús escolar.

—Si cariño, hoy por fin regresará a casa.

—Deberíamos hacerle una fiesta, papi. Una con globos y cadenetas...y-y una gran pancarta...un pastel y regalos...y-y...

—Para... para cielo... no es su cumpleaños— rió Harry—pero tienes razón, podríamos hacerle el pastel de nueces que tanto le gusta y lo de la pancarta es muy buena idea también.

—Si papi, yo te ayudo. La profe me dijo que mi letra es muy bonita y que apenas tengo fallos— volvió a hablar la niña, mirando por la ventana del coche de camino a la granja.

Cuando llegaron, Darcy como cada día corrió a ver a Rayo mientras Coco caminaba tras ella, loco de contento porque su dueña y amiga ya había regresado.

Otro que estaba feliz por el regreso de la pequeña era Niall, el omega disfrutaba con verla feliz y sana, correteando de aquí para allá y preguntando por cada cosa que no entendía.

Prometió a Harry y a Louis controlar sus hormonas cada vez que estaba cerca de ella, hasta el momento lo llevaba bien y los supresores le ayudaban bastante, aunque cada vez que la niña por sorpresa lo abrazaba o le daba un dulce beso en la mejilla, debía hacer un gran esfuerzo por apaciguar su omega interno y no gemir suplicando por más.

—Hola Ni, hoy no podré montar a Rayo, ¿Sabes?, mi papá Louis ya viene—dijo la niña muy emocionada mientras acariciaba el hocico de su caballo.

—S-Si, lo sé... Harry me lo d-dijo ésta mañana.—habló el omega, acercándose al cercado donde estaba ella.

—Pero mañana lo haremos ¿verdad que si?.

—Claro—respondió sonriendo el omega, mientras empezaba a acariciar al caballo también.

Tras un rato en el que los dos estuvieron mirándose y sonriéndose, el padre de Niall lo llamó, ya que necesitaban ayuda con una de las vacas pues estaba dando a luz y el veterinario estaba luchando con ello.

—Has-Hasta luego Darcy.

—Chao Ni—dijo la niña mientras suspiraba y lo seguía con la mirada hasta que este desapareció de su campo de visión.

El omega había sentido los ojos de Darcy sobre él mientras caminaba y sonrió feliz, mientras sus hormonas revolucionaban su interior, pidiéndole encarecidamente que regresase a su lado de nuevo.

Finalmente la pequeña volvió a la casa, junto con su padre y su hermano.

—Cariño, ya vamos a comer en un rato, ¿los chicos no se han ido verdad?.

—No papi, Ni y su padre van a atender una vaca que ya va a tener a su bebé.—Contestó la niña, mientras cogía unas hojas de papel y unos colores, para hacerle un dibujo a Louis, como regalo de bienvenida.

—Oh vaya, luego iré a ver.—dijo su padre terminando de darle el biberón a William.

Tras comerse su plato de rica lasaña de verduras, que Harry había preparado para la comida, la niña siguió con su dibujo.

—Papi, tenemos que hacer el pastel y la pancarta ¿recuerdas?.

—Cierto cariño. Cuando regrese del establo de ver a los chicos y a la vaca nos pondremos manos a la obra, ¿de acuerdo?.

—Si, de acuerdo papi—contestó Darcy muy contenta.—Yo mientras terminaré mi regalo.

El ojiverde se dirigió entonces a donde estaban los trabajadores, los cuales encontró muy afligidos pues había habido complicaciones en el parto y lamentablemente el ternero había nacido muerto.

—Lo siento Harry... hemos hecho cuanto hemos podido—dijo el veterinario.

—Lo sé Thomas. Al parecer había pocas posibilidades de que naciese bien.—dijo el rizado entristecido.

Poco después, el veterinario se fue y tanto Niall como su padre y los demás empleados fueron a comer, ya era tarde para ir al pueblo y comer con sus familias como a menudo ocurría.

Harry solía cocinar para todos cuando había mucho trabajo por lo que los Honran, Philip, Kevin, Peter y Josh, los empleados omega que habían comenzado a trabajar en la granja en los meses anteriores, empezaron a comer de la lasaña de Harry, mientras su hija y él, pintaban en una sábana vieja unas letras de bienvenida para Louis.

Tras terminar su comida, los hombres volvieron al trabajo mientras el omega ojiverde y su hija aprovecharon que William dormía plácidamente para preparar el pastel de nueces para Louis.

—¿A qué hora vendrá papá?, tendremos que darnos prisa— decía la pequeña preocupada.

—Él dijo que llamaría cuando llegase al aeropuerto y que luego cogería un taxi. Al parecer el vuelo viene con retraso, pero no te preocupes cielo. Tenemos el tiempo de sobra para terminar la sorpresa.

—¿Crees qué le gustará, papi?.

—Claro mi amor.... él sabrá que lo hemos hecho con todo nuestro cariño, además sé que tiene muchas ganas de vernos. ¿Sabes que nos ha extrañado tanto como nosotros a él?—dijo el omega besando a su hija.

—Estoy deseando que lo vea, espero que le guste.

—¿Lo dudas mi amor?, seguro que le encantará, ya lo verás.

Eran más de las ocho de la tarde cuando escucharon un taxi que venía por la carretera y entró en la propiedad.

—¡Es papá Louis!, ¡es papá Louis!—gritó Darcy emocionada, mientras soltaba el juguete de Coco con el que estaban jugando.

Harry cogió entonces a William en el regazo y salió de la casa para recibir a su alfa lo más rápido que pudo, ya que estaba muy ansioso por verlo y tocarlo.

También los chicos y el señor Horan, salieron a recibir a su jefe, tan pronto escucharon a la pequeña gritar e ir hacia el vehículo que estaba parado frente a la casa.

—¡Hola Papá!—Gritó Darcy emocionada al comprobar que si era Louis, el que venía en el taxi.

—¿Cómo está mi preciosa hijita?—preguntó el alfa, mientras veía a los demás acercarse.

—Muy bien pero te extrañamos mucho —volvió a decir la niña.

De repente Harry que estaba acercándose sonriente se paró y se puso serio pues sentado al lado de Louis parecía haber otra persona, de la cual el omega no sabía nada.

De repente Harry que estaba acercándose sonriente se paró y se puso serio pues sentado al lado de Louis parecía haber otra persona, de la cual el omega no sabía nada

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55. Esperando a mi omega-Cuarta parte-L.S.-Omegaverse. TerminadaWhere stories live. Discover now