Recuerdame (Misawa - Daiya no ace - Ace of diamond ) [PAUSADA]

Capitulo 21 - El aroma de la tranquilidad

El ambiente dentro de la habitación era algo pesado, si la ansiedad del muchacho menor se hubiera podía volver una gruesa niebla podría verse por todo el lugar, la situación lo ponía demasiado nervioso, sumado a las sensaciones que le producía la cercanía de Miyuki a sus espaldas ¿Él no estaba nervioso? ¿No se ponía ridículamente intranquilo? Seguro que no, pensó el muchacho, era Miyuki Kazuya de quien hablamos, el prodigio, el genio, el estratega, el calculador y controlado, seguro él no sentía cosas como esas que solo sentía la gente idiota como él, antes de que pudiera quejarse por la situación y huir de ella, escucho la voz del muchacho de anteojos romper el silencio y sintió como una gran cantidad de sensaciones de agolparon a la vez en su garganta, enrollandose con más fuerza contra la almohada

M – Sawamura... - espero un momento para recibir una respuesta, pero no sucedió – esta bien, no digas nada, solo escúchame... aunque – respira – dudo poder ser bueno en esto, no soy precisamente experto en estos temas y menos hablando de sentimientos humanos... - fue sintiendo como le secaba el cabello de manera más suave, seguro por concentrarse más en lo que tenia que seguir o luchaba por explicar que en lo que hacían sus manos – cuando sucedió el accidente que tuviste... o mas bien antes de eso... mmm... no se que tan antes, no podría darte una fecha específica, lo que sí sé es que fue de antes... tampoco así como desde la primera vez que te vi, eso sería muy de película adolescente e irreal, aunque si... si hubo algo diferente, distinto a los otros pitcher mmmm – pensando complicado <<dije que lo tenía claro, sin embargo ni siquiera se como explicarme, demonios >>

Miyuki empezó a barajar con mucho cuidado las palabras correctas para expresarse, no quería ser malentendido, pero al mismo tiempo, no podía decir algo tan corto, tan liviano o tan cliché como "tú me gustas", sentía que se escucharía vacío, inmaduro e infantil, muy cercana a una declaración poco seria, muy adolescente para su gusto y que además debía explicarle como había llegado a eso, para darle cierta profundidad, que se entendiera que no era un simple capricho, aunque al mismo tiempo se le hacia tan extraño, tratar de explicarle algo así a Sawamura... Si era Sawamura de quien estaba enamorado, Sawamura... y le costaba creerlo, aun cuando lo había aceptado... y hasta ese preciso momento, aun no podía conectar ambas cosas, era extraño puesto que cuando recordaba, repasaba recuerdos, cuando estuvo en el hospital decenas de veces, era distinto, ahora con el Sawamura de siempre, gritándole "estúpido Tanuki", gruñendo, rabeando como siempre, se sentía algo descolocado, era como si su relación cátcher-pitcher, Senpai-Kouhai, compañeros de escuela, hombres finalmente, hubiera creado una pequeña barrera invisible que no lo dejaba conectarse con todo aquello que había sentido antes y que sentía, como había sucedido aquello, tampoco lo entendía, solo era como si todas esas relaciones previas con el muchacho lo frenaran de cierta forma y volviera a su lugar, ese que escrito en el suelo decía "cátcher" "senpai" "conocido" y estuviera amarrado a ella sin poder avanzar.

Estaba desconcertado, todo esos días alejado del muchacho, mientras estuvo viajando, dando entrevistas, hablando con cronistas de revistas, reuniones de equipo, reuniones con los inversionistas, para luego llegar tarde al hotel y acostarse agotado, pensaba en el momento que debían hablar, ni siquiera cuando estaba estudiando concentrado para algunos exámenes pendientes de la universidad, el tema se alejaba de su mente, por muy cansado y estresado que estuviese, el asunto no se iba de su cabeza, Sawamura siempre estaba en ella.

<<Sawamura >>

Por suerte había conseguido que su entrenador aceptara que tomaran el vuelo algo más tarde y luego de eso en un plan poco meditado salió del hotel, calándose solo un abrigo de largo medio de gabardina oscuro, un sweter anaranjado debajo sobre una camisa azul y una bufanda roja que tenia desde la preparatoria, unos pantalones tipo cargo azul oscuro completaban su atuendo casual con el que había primero corrido hasta el primer taxi que encontró. Cuando quedo atrapado en la congestión vehicular de la tarde, miro su móvil algo nervioso, como la mayoría de los japoneses, no era amante de las redes sociales, sin embargo, si había algo en Line que podía hacerlo presionar el verde icono y entrar a este servicio de mensajería que tenia ciertos toques de red social, en este pudo ver algunos estados del muchacho, entre ellas unas fotos de comida que subió en su timeline con el hashtag #LoqueQuieroComerCuandaSalgaDeAqui, sonrió y luego miro las comidas, con algunas caseras como el arroz con curry que recordaba que era su favorita, pensó en que podría hacérsela el mismo, pero por la situación actual y el tiempo era imposible, tendría que ser en otro momento, siguió avanzando en las imágenes y arrugo el ceño