Papel tuale'

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Jugwoo esperaba frente a la parada de autobuses más concurrida de la ciudad, a decir le daba vergüenza estar en aquel donde cualquiera le pudiera reconocer, pues había aceptado la invitación de Lucas solo por haberle dado su cartera, sí, solo era eso. No lo convencía del todo ese rubio, pero debía darle las gracias de alguna forma, pero ¿qué pasaba si alguien que conocía al lado del menor? Tremenda pena iba a pasar.

Salió de sus pensamientos cuando vio llegar con todo el flow del sitio al rubio. Las personas se le quedaban viendo porque no era muy normal ver a alguien tan particular como Lucas caminar así, este solo les sonreía y hasta lanzaba besos a las muchachas, ocasionando que Jungwoo inflara las mejillas por ser tan coqueto con todo el mundo. El menor llegó donde el castaño y se bajó los lentes hasta la punta de la nariz y lo miró de arriba abajo.

—Upa flaco, regálame un hueso pa' hacerme un collar. —El mayor rodó los ojos.

—Hola a ti también, Lucas.

—Hola, mi amol. —Hizo una pausa para sacarse algo del bolsillo, un collar muy grueso con la letra "L". —Mira lo que traje, mi amol, cien por ciento cobre, vale, pa' mi chamito chamo, toma perillo*.

Jungwoo vio el collar con cara de disgusto, ese tipo de prendas no eran algo que usara. Lucas se dio cuenta de su expresión, sin embargo insistió.

—No jombre, no me digas que no te gustó. Ven acá, sifrino. —Volteó al mayor, pasó el collar por sobre su pecho y lo ajustó en su cuello. —Ahí está, bebé, como perro e' rico.

No está de más decir que Jungwoo se sonrojó por la cercanía del menor, su piel se había erizado por el simple tacto de las manos callosas de Yukhei.

—Ahora tienes la marca de mi amor. ¡Váyalo, el mío! —Se tiró un paso de salsa que lo hizo avergonzarse.

—Cállate, idiota. ¿A dónde piensas llevarme?

—¡Erga, pero tú si eres seco, nojoda, como garrapata en peluche, vale.

—Ajá, ¿dónde está tu auto? —El menor se asomó tras de Lucas para ver en qué clase de auto lo llevaría.

Yukehei se echó a reír como pendejo como si la broma de la jevita estuviera buena, no obstante, la seriedad en la cara de su perillo le decía que no estaba bromeando.

—Nawebona*, tú eres una vaina seria, jeva. Mira, si te dije que te alcanzaba aquí era porque iríamos en bus.

A uno de sus ojos le dio un tic. Tomó una calada de aire y sonrió de forma tétrica.

—¿Cómo es la vaina, carajito?

—Me encantas cuando te pones agresivo, uff. Pero sí, vamos en bus. ¿Qué? ¿Nunca te has montado en uno?

—¡De bolas que no, mamagu...! —Se había callado cuando se percató de la palabrota que iba a decir. Coño, desde que conoció a ese pendejo solo le dan ganas de maldecir como camionero.

—Epa, epa, calmación, culito rico. Pero vamos a arreglar eso, móntame esta, ve. —Yukhei se señaló el paquete. Jungwoo se quería morir. —¡Broma, ah! Vente pues. —Lo agarró del brazo para que no se fuera a escapar.

—¡Ya, suéltame! ¡Ayúdenme! ¡Me quiere secuestrar para vender mis órganos!

—¡Cate' la jeta*!

El castaño terminó por montarse en algo móvil, y no precisamente en el paquete de Lucas. El más de bajo de los iba aguantado como podía en el autobús, en más de una ocasión se iba dar un coñazo con la gente, los asientos y hasta casi se cae de culo. A Jungwoo no le gustaban los autobuses, olían a mono y la gente se metía hasta quedar como sardina en lata. En cuanto al rubio mal teñido, iba vacilándose* las canciones que ponía el conductor, hasta se puso a bailarle, pero Jungwoo siendo sifrino lo rechazó; la gente lo abucheo por ser un aguafiestas.

Una canción en particular empezó a sonar, de seguro otra de esas canciones feas que colocaba el conductor, pero lo que la hizo fue diferente fue que Lucas se puso en medio del autobús, agarrado de las barras y empezó a hablar con fuerza:

—Señores pasajeros, permítanme un momentico de su tiempo pa' decirles un pal' de cosas. —Las personas empezaron a vociferar que no tenían dinero ni pal' pasaje, que no le iban a dar nada. —Epa, epa, yo no vengo a pedir, gente, yo vengo a otra cosa, vale. —Se aclaró la garganta. —Primero que todo, delante de Diosito hyung que es mi guía. —Se besó la cadena. —Bueno que yo ando es burda enamorao' del muchachito aquí presente. —Señaló a Jungwoo, quien se quería esconder porque estaba pasando pena. —Y bueno, mi amol, esta canción va pa' ti. Dale, DJ.

—Ay no.

—¡Esta canción va dedicada, pa' ti chamito chamo, te voy a hablar claro, mi corazón te ama, de bien y todo porque soy es burda e' malandrito!

Jungwoo no daba crédito a lo que sus ojos y sus sensibles oídos percibían. Cristo atado y resucitado, ¿con quién fue a parar?

—¡Escúchala, Jungwoo, yo te quiero bulda, me tienes bulda e' creisi!

Que se lo tragara el piso del bus.

¡Tu vas a ser mi jeva, y yo no lo quito, porque lo que soy es bulda' e' malandrito! —Se tiró un paso criminal. —¡Estaba el Taeyong, el menor, la lacra y también care' muerto! ¡Estoy burda enamorao', que lo escuche toda esa gente!

Al finalizar, todo el mundo le aplaudió a Yukhei, el mayor tenía de nuevo ese tic en el ojo, no podía creer el show que montó su pretendiente. Y como si fuera poco, el público gritaba "beso". Jungwoo agarró una arrechera* que lo puso rojo hasta las orejas, le enseñó el dedo medio al chico y todos lo abuchearon. Lucas no parecía molesto, al contrario, sonreía como un demente.

—¡Ay papá, ese el culito que me remueve el guevo!

Jungwoo no se sintió para nada feliz cuando llegaron a su destino: la playa, odiaba el sol y ni siquiera tenía protector solar a la mano. Por otro lado, Lucas parecía disfrutar del buen clima, y claro, él no iba con el entrecejo arrugado porque llevaba lentes de sol.

—¿Te pega el sol, bebé?

Con sarcasmo contestó: —¡No vale, es que me encanta quedarme ciego!

—Ay, pero tú si eres malo, vale, ve, toma. —Se sacó los lentes y se los puso a su enamorado. —Jugwoo sonrió.

Se sacaron los zapatos para caminar en la orilla, no había casi nadie y eso le gustaba al mayor porque se sentía tranquilo y a gusto junto al rubio. Este, al ver lo bonito que lucía Jungwoo, le tomó la mano, el castaño se ruborizo, pero no hizo amago de retirar la mano contraria de la suya. Hablaron sobre sus gustos y aspiraciones, Lucas trabaja con su padre y sería el dueño del local algún día, Jungwoo le contó que estudiaba Derecho y el rubio mencionó un chiste malo sobre estudiar desviado o algo así, rieron y hasta fueron a comprar unos helados para el calor; cortesía del menor.

Más tarde ese día, regresaron en bus a la casa del mayor, Yukhei quiso acompañarlo porque "a esta hora sale mucho malandro loco, jeva". Jugwoo terminó con la cara roja por el fuerte sol y Lucas siendo Lucas le dijo:

—Verga, mi amol, hace rato eras como el papel tuale' con que me limpio el culo, upa.

—La vives cagando. —Jungwoo infló las mejillas haciéndose el molesto y entró a su casa, donde pudo sonreír abiertamente como un idiota enamorado.

¿Qué me está pasando con él? Yukhei era la clase de persona que no le gustaba, pero ahí estaba él, partido* por un tuki boleta.

Explicaciones bergas:

Perillo: novio.

Nawebona: expresión para definir sorpresa.

Cate' la jeta, equivalente a "cállate la boca".

Vacilar puede significar disfrutar.

Arrechera: enojo.

Partido: que está como asdfghhjklñ por él. ¿??




Los piropos de Lucas » LuWooWhere stories live. Discover now