Las 2 caras del amor

El amor es una bestia cruel y traicionera

Steven y Connie estaban en una misión en Ciudad Imperio, desde hace unas semanas cosas raras sucedían en la gran ciudad, en las noticias hablaban de robos misteriosos, avistamientos de monstruos, ataques misteriosos y comportamientos raros de las pandillas. Las Gems se encontraban en ese momento buscando a Jaspe, era una gran amenaza suelta en algún lugar del mundo provocando estragos seguramente. Connie sin embargo se intereso en lo que sucedía en Ciudad Imperio, un misterio llamativo y poco común, las gemas no suelen operar en grandes ciudades para evitar llamar la atención de la gente. Connie y Steven sin embargo eran humanos por lo que no llamarían la atención mientras investigaban. Recorrían las calles y las zonas de los supuestos avistamientos pero no encontraban nada fuera de lo común, por momentos se sentían se sentían observados y tal ves esa paranoia no era muy equivocada. Un pandillero que los observo pasar tomó su teléfono y marcó

- Dile al jefé que tengo algo que creo le puede interesar. Connie se mostraba bastante impresionada, nunca había estado en Ciudad Imperio, la metrópolis era asombrosa y Steven notaba ese sentimiento en los ojos de su amiga.

- Este lugar si que es increíble 

- Y no has visto ni la mitad de la ciudad

- Ya se, en vista de que no parece haber ningún problema destacable podríamos aprovechar el tiempo para conocer la ciudad

- Me agrada tu idea compañera, realmente eres audaz, aprovechemos que papá me dio algo de su fortuna para turistear

- Increíble, como una cita en la ciudad

- Cita

Connie volteo la mirada un poco sonrojada, Steven sentía que su corazón se aceleraba, él la amaba pero no habían podido tener un momento como ese a solas, lejos de los problemas de la gemas y de los estrictos padres de Connie y en lugar tranquilo y llamativo. Steven le ofreció su mano y ella la tomó para comenzar así su pequeña nueva aventura.Pasearon por la ciudad, recorrieron las avenidas icónicas, tomaron tantas fotos de tantos lugares, la chispa crecía y crecía a cada momento, tomaron una malteada y finalmente subieron al mirador del edificio más alto de la ciudad, no imaginaban que entre tanta dulzura un gran peligro los acechaba y pronto se serniria sobre ellos.

Steven y Connie estaban en el mirador, aun se tomaban de la mano, en cada respiración se podía sentir como si el aire estuviera cargado de electricidad,sus corazones latían como si fueran a explotar de un momento a otro y aunque no se sentían capaces de apartar la mirada del impresionante panorama poco a poco voltean hasta que sus ojos se encontraron, sus miradas brillaban y se perdían cada ves más dentro de los ojos del otro, un dulce hechizo que parecía que nada podía romper. Pronto atraídos por un lento pero poderoso magnetismo sus rostros se acercaban cada ves más. Antes de que sus labios pudieran tocarse el encanto fue roto por un monstruo experimento del Cluster que corrió hacia ellos en un éxtasis asesino, Steven y Connie se separaron dejando que el monstruo corriera derecho y cayera por el balcón. 

Al recuperarse de la sorpresa vieron a un pequeño grupo de hombres que empuñaban armas y vestían chalecos blindados, los acompañaba una extraña y aterradora espadachina, y llevaban con ellos una gran caja metálica donde al parecer habían transportado al monstruo.

- Abran fuego. Indico la mujer. Usen balas de goma o dardos los necesitamos vivos.

Comenzaron a dispararles según la indicación pero Steven creo una burbuja para proteger a ambos, rodaron derribando a sus atacantes.

- Steven estoy desarmada

- Y yo no creo sostener la burbuja tanto tiempo con esta lluvia de balas

Lo pensaron por un momento y gritaron al unisono

- ¡Stevonnie!

Se dieron la mano y se fusionaron, la burbuja desapareció, los matones se sorprendieron al ver el inusual hecho, Stevonnie flotó para evitar las balas y bajo portando un par de escudos para combatir, detenía las balas y lanzaba los escudos rápidamente, la mujer espadachina ataco velozmente con dos espadas, Stevonnie apenas y podía repeler sus ataques, logró atinar un golpe en su estomago, aprovechando que bajo la guardia logro arrebatarle una espada.
Se enfrentaron con las espadas, tomando Stevonnie rápidamente la ventaja, uno de los matones disparo una bala de goma, el impacto hizo que se separarán, la espadachina golpeo a Steven y lo lanzo por el balcón, le dispararon un dardo a Connie, al desmayarse la metieron en la caja metálica y se la llevaron.