Parte sin título 6

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Pequeña Caracola había visto a los gatos del Clan sacar a varios muertos de la guarida de Bigotes de Terciopelo, aunque ya tenía las seis lunas, pues había pasado la última media luna que le quedaba, aun no era aprendiza, y no había salido de la guarida del curandero, aunque la verdad era ue aun estaba muy débil por la perdida de sus hermanos.

-¿mamá?- maulló siguiendo a dos gatos que arrastraban a su madre

-Lo siento- suusrró Bigotes de Terciopelo envolviendola con su larga cola blanca

-¿Por qué están todos tan mal?- gimió abrumada

-La noche en la que escapastes fuímos atacados, ahora unos felinos vigilan el campamento, no podemos hacer casi nada, pero me han dicho que por fin derás aprendiza, asi que sal

Aunque lo que menos le apetecía tras la muerte de su madre era ser aprendiza salió

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Se acercó para juntar su hocico con el de su nuevo mentor, Bigotes de Caña.

-Bonito nombre Zara de Caracola, te queda genial.

Ella asintió y se sentó

-Creo que empezaremos mañana, hoy no estás muy animada, ¿por qé no vas a ver a los aprendices?

Zarpa de Caracola se arrastró hasta llegar a la nueva guarida

-Zarpa Rápida y Zarpa de Luz han muerto- maullló un gato atigrado gris

Zarpa de Caracola no miró, demasiado triste.

-¿a que huelen esos gatos?- preguntó, mirando ceñuda a n extraño atigrado que no conocía

-Clan del Viento- gruñó a su lado un gato blanco

Zarpa de Caracola adoptó la poición de caza y se acercó a uno, finalmente saltó, asegurandose de hundir bien las uñas en la cola del gato.

-Maaaaaauuuu- aulló este girando se con el pelo erizado- ¿qué haces?- bufó

-Practicar la caza- respondió ella

-Vas a ver como se caza- el gran gato sacó las uñas

-Tranquilo Manto Espeso- dijo una gata

-Estos aprendices son tan tontos como los conejos

-Eso serás tú, que no comes otra cosa- gruñó ella

-Ya vale, Zarpa de Caracola- maulló Bigotes de Caña acercándose

El felino se pelaje dorado arañó veloz el hocico de su mentor

-¿¡Qué haces!?- chillló ella, pero un manotazo la hizo caer

-¡Y cómo vuelva a incordiar esto acabará peor!- bufó Manto Frondoso

-Pero que haces???- siseó furiosa

-Zarpa de Caracola- dijo posando su cola negra en los hombros de la gata Bigotes de Caña- ahora ellos dominan el campaento, la mayoría de nuestro Clan a muerto, hay que obedecer. No te resistas- el felino suspiró, la sangre manaba por un corte encima de su ojo

-Pero hay que luchar...- gimió mirando hacia arriba con sus ojos ámbar brillando

-Ya luchamos, te lo asegro. Mira, han matado a nuestro líder, encerrado a nuestro lugarteniente, y asesinado a guerreros...

Zarpa de Caracola asintió, recordando a su madre, hermanos, a Estrella de Aliso nombrandola aprendiza... pero la habían matado

-Los gatos del Clan han decidido rendirse, y es lo mejor



El misterio de Pequeña CaracolaOù les histoires vivent. Découvrez maintenant