— ¡Rica! —le gritó Jack. Amanda se ruborizó y bajó las escaleras totalmente roja. Sonreí contenta por ella. 

Hicieron otros llamados más hasta que tocó mi turno.

— ______ Miller —dijo el director, me puse de pie y caminé hacía el escenario, sentía los gritos y aplausios.

Cuando subí al escenario recibí mi doploma, mis manos temblaban. Miré hacía delante y vi a mis padres de pie sonriendo con sus cámaras sacándome fotos, sonreí hacia ellos. Vi a Justin sonriendo hacía mi mientras sostenía la cámara profesional. 

Miré hacía adelante hacia la cámara oficial del evento y puse mi diploma enfrente de mí para mi foto.

— ¡Hermosa! —sentí el grito de Justin. Me ruboricé al igual que Amanda, al parecer mucho más. 

Después de salir del escenario, caminé hacia mi asiento y me senté, miré hacia Justin y éste me guiñó el ojo. Sonreí mirándole. 

Poco después la ceremonia terminó dando paso al cóctel que tenían preparado. Cuando me levanté, mis padres ya estaban al frente de mí. Mi mamá me abrazó.

— Estoy tan orgullosa de ti mi niña —dijo en mi oído. Sonreí tratando de no llorar. Esto era el fin de una era. Joder. Mi papá me dijo lo mismo que mi mamá. Después de ellos, Amanda se tiró encima de mí, y grité. 

— ¡Guapa, guapa! —dijo Amanda con un extraño acento español. Reí.

Después de eso, saludé a Jack, él me abrazó y me dijo ''Enahorabuena''. Sonreí, llegué hasta Justin, quién me estaba sonriendo nerviosamente, arrugué el ceño, sabía que algo le pasaba, pero trataré de no preocuparme por eso. Me abrazó fuerte, pero muy fuerte, me preocupé aún más. Él me levantó para que yo pudiera estar a su altura.

— Eres la chica más bella de aquí y de todo el mundo —dijo y me dio un suave beso. Sonreí contenta por el cumplido y porque realmente tenía al mejor novio del mundo. Reí y él volvió a besarme. — te quiero —me miró seriamente. Como tratando de que yo siempre recordará eso.

— Yo también te quiero —dije sonriéndole. Justin me miró y quiso sonreír, pero le salió una mueca.

— ¿Estás bien? —le dije mientras acariciaba su mejilla.

— Estaré bien —dijo suspirando. Arrugué el ceño.

— Justin...

— _____ —dijo él y me volvió abrazar. Volví a estar y mucho más preocupada que antes. ¿Qué pasa con él?

Me apretó fuerte contra él. Sus brazos rodeaban mi cintura como nunca antes lo había hecho, no me estaba asfixiando, pero quería saber qué era lo que pasaba y porqué reaccionaba así. Miré detrás de mí, Jack nos estaba viendo con una mueca, le miré haciéndole saber que estaba preocupada, él me miró e hizo un movimiento de mano como diciendo ''Después te lo explicará''. Le pregunté si estaba bien y él con sus labios me dijo ''Está sorprendido''. Arrugué el ceño.

¿Sorprendido de qué?

— ¿Podemos ir a un lugar más apartado? —susurró Justin en mi oído, haciendo que mi piel se erizara. Suspiré y asentí con la cabeza.

— Vale —dije. Él tomó mi mano y me disculpé con mis padres para ir hacia detrás de las cortinas blancas, saliendo de toda la gente. 

Entramos por un pasillo, como queriendo ir hacia el camerino y cuando entramos ahí, Justin me volteó y comenzó a besarme. Yo totalmente desorientada, le seguí el beso, el pasó su mano por mi cintura y le dio un pequeño apretón, haciendo que yo saltara por la sorpresa y que me apretara más contra de él.

Sentía como el calor iba subiendo en la habitación, sus labios pedían a gritos más y más. Me reclamaban como nunca antes lo había hecho, su lengua recorría mi boca con pasión y firmeza. Creía que estaba apunto de desmayarme.

No sé cómo, pero mi túnica ya no estaba. Miré a Justin, él me estaba mirando.

— Tan hermosa —susurró, mirando completamente, de pies a cabeza, me ruboricé y él comenzó a besarme de nuevo.

Me agarró y me subió a una mesa que estaba ahí. Sus manos ya no estaban en mi cintura, sino que estaba en mis muslos. Las sensaciones que sentía correr por mi cuerpo, estás nuevas sensaciones, jamás en mi vida pensé que existían. Solté un gemido cuando sus manos tocaron mi trasero y me apretó contra su erección.

Santa mierda.

Cerré los ojos fuertemente, tratando de calmarme. ¿Por qué estaba así?, nunca me había tocado más allá. Nunca se había insinuado como lo estaba haciendo ahora mismo. Sus manos estaban por todo mi cuerpo, tratando de encontrar consuelo, pero, ¿consuelo de qué?.

De pronto la puerta se abrió de golpe. Me solté inmediatamente de Justin, mientras me bajaba de la mesa y miraba quién había entrado.

— Profesora Kristen... —susurré totalmente avergonzada.

Omegle ➳ j.bWhere stories live. Discover now