Cap 8

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¿Que ha sido eso?-digo dandome la vuelta para ver a mis dos amigas
Ainhoa: Te lo dije-me señala mirándome todavía en shock
Lucía: Ese teléfono vale millones-se rie-¿Me lo regalas?-se pone tan seria que da miedo
Yo: No, es mi móvil-acerco el móvil a mi pecho y le pongo una mueca a Lucía
Ainhoa: Tengo que llamar a Eli ahora mismo-coje su teléfono y desliza el dedo sobre la pantalla buscando un número de teléfono en la agenda hasta que llega al que buscaba
Lucía: Ponlo en altavoz y así hablamos todas-Ainhoa asiente y presiona el dibujo de un altavoz en su pantalla

Eli:¿Que quieres Ainhoa? Estoy en el concierto-dice notablemente irritado ya que le estábamos molestando
Ainhoa: Eli es importante-pone una mueca aunque evidentemente Eli no la puede ver
Eli: Como sea una tontería...-resopla- A ver dime

Lucía y Ainhoa le cuentan todo lo ocurrido minutos atrás.

Lucía: Y lo mejor de todo es que al irse le ha dicho que se volverían a ver, y la ha guiñado un ojo-grita emocionada
Eli:No me lo puedo creer-nos dice incrédulo el chico al otro lado de la línea-¿De verdad ha pasado eso Sara?
Yo: Sí, pero tampoco​ es para tanto, cualquiera lo hubiera hecho, solo me ha devuelto el móvil- las miro con total normalidad
Ainhoa: Mira te voy a decir 3 razones por las que seguro que vas a tener algo con 8cho- miro hacia otro lado y me cruzo de brazos- lo primero, aquí hay mucha gente y para fijarse en que se te había caído tenía que haber estado mirándote, lo segundo, te ha guiñado un ojo eso no lo va haciendo la gente así como así y por último, que por cierto es lo más importante, te ha dicho que os volvereis a ver- tanto Ainhoa como Lucía tienen de cara de como si fuese evidente
Eli: Ainhoa lleva razón- al escucharle hablar me sobresalto, pensaba que ya había colgado- Elian, vas a volver al concierto- se escucha una voz femenina por detrás
Yo: ¿Y esa chica?-pregunto extrañada
Eli: Esta noche os cuento-pone una voz un tanto misteriosa a la vez que perturbadora y cuelga
Lucía: Tu con 8cho, Eli con una chica del concierto...Ainhoa y yo nos vamos a quedar más solas que la una-dice riendose mientras traza el recorrido de una lágrima falsa con su dedo sobre su mejilla

Finalmente consigo convencerlas para cambiar de tema y después de un par de horas nos vamos de la convención japonesa para irnos directamente a nuestra casa.

Yo: Pues ya estamos, por fin en casa-suspiro mientras dejo que las dos chicas pasen hacia el interior de la casa
Lucía: Tengo hambre, pedimos sushi-me suplica, mientras pone cara de perrito triste
Yo: Nos crees has tenido suficiente Japón por hoy, creo que me apetece algo un poco más italiano-cojo mi móvil y busco en google alguna pizzería cercana que pueda traernos la cena a casa
Lucía: Acepto tu propuesta, pero que sepas, que de Japón uno nunca se cansa-me reprocha mientras me señala con el dedo como si fuera mi madre
Ainhoa: Bueno yo creo que me voy ya a dormir- se dirige a su habitación mientras mira el móvil
Yo: No no no no no- digo mientras aparto el dedo de Lucía de mi cara- aquí nos vamos a quedar las 3 despiertas-remarco esa última palabra- hasta que venga Elián, porque hemos sido tan inteligentes, que no hemos hecho una copia de llaves para cada uno. Y mañana tocará ir a comprar, ¿o vamos a estar comiendo comida basura todo el tiempo que estemos aquí?-digo abriendo la nevera y observando que no hay nada dentro, solo un par de latas de coca-cola
Ainhoa: Vale mañana toca comprar- enciende la televisión y busca alguna película buena entre los diferentes canales

Lucía se tumba junto a Ainhoa en el sofá y yo la imito después de pedir la pizza.
Terminamos la cena, y me estaba aburriendo bastante, la peli era muy mala.

Lucía: Creo seriamente que deberíamos contratar Netflix, porque yo no voy a aguantar mucho tiempo viendo este tipo de películas- va a la cocina a por un vaso de agua y yo asiento con la cabeza mientras pasa por mi lado. Ya son las 12, y poco a poco voy notando mucho cansancio, hasta que finalmente me quedo dormida.

Horas después escucho un ruido lejano, bastante molesto por cierto, que poco a poco empieza a acercarse más a mi. Es el timbre de casa. Abro los ojo y lo primero que hago es mirar la hora en el móvil, la luz me deslumbra y después de estirarme en el sofá, voy hacia la puerta. Miro por la mirilla y veo que es Elian.

Yo: ¿Sabes que hora es?- digo mientras abro la puerta
Eli: Ehh... no- se rasca la nuca mientras entra a la casa
Yo: Las 3 y media de la mañana-refunfuño frotándome los ojos por el sueño
Eli: Ohh vaya- se dirige hacia su habitación y cierra la puerta detrás de él

Miro hacia el salón y veo a Lucia y Ainhoa dormidas. En ese momento dudo entre despertarlas y llevarlas a sus camas o irme a dormir. Al final me decanto por irme a dormir.
Voy a mi habitación y me pongo un pantalón corto de esos tan cómodos una camiseta blanca de pijama y me meto en mi cama sin arroparme. Es increíble el calor que hace en Barcelona.

Para cuando me despierto son casi las 12 de la mañana. Salgo de mi habitación y veo que esta todo tal y como estaba anoche.
Voy a mi habitación, la recojo, me pongo unos shorts, una camiseta de tirantes y unas chanclas.
No me voy a poner guapísima para ir a comprar.
Por último escribo una nota y la dejo sobre la encimera de la cocina.
Nota:
Hey chicos he salido a comprar, pero la próxima vez váis vosotros​ ehhh.
Sara

Me voy directa al supermercado y estoy comprando cuando veo que tengo un par de mensajes nuevos de un número desconocido.

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Y este es el capítulo de hoy espero que os haya gustado😊

Un antes y un después(8cho)Where stories live. Discover now