CAPITULO 1 - EL PARQUE

25 4 0
                                    

Me senté al lado de mi hermana, en uno de los bancos, hacia mucho frío así que estábamos prácticamente pegada la una a la otra.  Ese día no había mucha gente por que casi todos estaban dentro de la bolera,  estaba un poco decepcionada, mis amigas de clase no estaban así que nos habíamos unido a los compañeros de clase de Blanca. No estaba lo que se dice muy involucrada en sus conversaciones de clase.

Llevaba como una hora allí sentada, escuchando sus conversaciones, bebiendo una cerveza.  Así que desconecte de lo que decían y me quede mirando la puerta de la bolera.  Realmente esperaba que saliera Sergio, tenia ganas de verlo, debía admitir que realmente había sido mi aliciente para salir aquella noche. Así que no sabia que escusa ponerle a mi hermana para volver a casa, donde por lo menos estaría mas calentita.

- Tierra llamando a Carmen.

- Que?

- no te enfades, llevas media noche mirando la puerta, esperas que salga alguien de ella.

- La verdad es que no, solo es que tengo frío.

-quieres que entremos a ver si de paso vemos a un Rubito. Que tu y yo sabemos

Aquello me hizo sonreír, mi hermana me conocía demasiado bien. Pero no quería entrar ya que para entrar había que pagar entrada. Y yo no traía demasiado dinero esa noche. Además para que seguramente no me haría ni caso como de costumbre, así que empecé a maquinar una escusa creíble para irme a casa.

- La verdad Blanca no me apetece entrar, el rubito estará con su amiguita, y paso, no es que este muy interesada en el, pero hoy a sido mi cumpleaños y la verdad a sido como un día cualquiera, quitando de la tarta que ha sacado mama.

- Decepcionada? bueno, tu no querías que nadie se enterara. Ese era el trato

- lo sé, pero tu sabes que aquí los cumpleaños se celebran a lo grande, y yo no puedo, no le puedo pedir dinero a papa para que celebremos mi cumpleaños además no tengo mucho ahorrado. Tu ya me entiendes.

-Claro. lo sé, - me miro con cara de pena, ella sabia que nosotras no podíamos permitirnos el lujo de una fiesta de cumpleaños. Ese era el motivo por el cual no quería que nadie supiera que era mi cumple, me daba vergüenza, que la gente me felicitara y  no invitarlos ni tan siquiera a unas cervezas.  

- No te preocupes, estoy feliz de que mama me haya comprado mi tarta de cumpleaños, - pero en el fondo me hubiera gustado que al menos mis amigas de clase se hubiesen acordado, ellas sabían perfectamente que en diciembre era mi cumpleaños, llevábamos juntas desde infantil, realmente, me hubiese hecho sentir mejor que alguien que no fuera mi familia se hubiese acordado de que hoy era mi cumpleaños.
- Sabes que pienso. Que eres patética. Siempre siendo perfecta. Buena hermana hija y amiga. Siempre pensando en los demás. Así q hoy vamos a ser malas y nos vamos a colar.
- te has vuelto loca.!!!?
- venga levántate. He visto a un amiguito que nos puede colar.
.....
- Te dije  que sería fácil. - me dijo una vez entramos . Su amigo conocía al de seguridad q hizo la vista gorda y nos dejó pasar.   - Gracias .  Esta es mi hermanita. Carmen.
- Hola Carmen. - se acercó y me dio un beso de presentación. - bueno y que pensáis hacer ahora. - Nos miramos las dos. Con cara de pavas. Habíamos entrado y ahora que? - venga veniros que os invito a una cerveza.

Este chico era muy simpático,  y muy atractivo, la verdad no sé cómo no me había fijado en el antes. Mi hermana hablaba muy agusto con el,  ambos reían continuamente así que decidí en ese momento no pensar más en el. Además era bastante mayor que yo, iba con mi hermana a la universidad. Estaba estudiando medicina. Mi hermaba estaba estudiando enfermería pero creo q habían coincidido en el mismo hospital haciendo prácticas tambien.  así que mi hermana le termino contando mi secreto. Le dijo que  era mi cumple y la verdad que no me importó. Empezamos a beber. Y la verdad como no tomo nunca nada y ya era mi segunda de la noche pues me hizo perder un poco la vergüenza y me reía como una tonta.  Hasta que vi a mi chico. No sé por qué pero lo vi más guapo que nunca. Llevaba puesta una camisa de botones de manera informal super ajustada, lo cual resaltaba un montón de entre todos debido a la oscuridad q había. O eso me parecía. Me acerqué al oído de mi hermana para q no se enterará su amigo. La música estaba alta así q era imposible q se enterará - lo has visto.?
- si está justo a tu lado. - me giré de golpe y estaba pegado a mi saludando a Carlos. Estaba tan cerca que su brazo tocaba mi espalda. Me puse tan nerviosa que lo di un sorbo a mi cerveza para disimular y el líquido se me fue por el otro conducto y me puse a toser. Casi me ahogo. Bravo por mi. Si quería pasar desapercibida lo  estaba consiguiendo.  Se quedaron los dos mirándome. Con cara de que coño le pasa.
- Estás bien? - me pregunto Carlos mientras que Sergio empezó a palmear mi espalda para que dejara de toser. Cosa que consiguió
- gracias. Ya estoy mejor. - le dije a my Crush. Dios q guapo, estaba mirándome fijamente a los ojos. Entonces esbozó una sonrisa de vértigo. Miro a su amigo y se puso a reír a esas alturas yo ya estaba roja como un tomate maduro. Y el dejo de darme golpecitos en la espalda pero no quito su mano. Imaginaros como iba mi corazón. A mil
-  Ella es mi amiga Blanca y su hermana Carmen. El es mi hermano Sergio.
- Hola Blanca - se acercó a mi hermana y la beso. Luego se dirigió a Carlos mirándome. - a ella la conozco. Viene a mi instituto.
- hoy es su cumple. - le informo Carlos y entonces me acerco a el ayudado por la mano que aún tenía puesta en mi espalda y me dio dos besos - felicidades - y ya quito su mano con total tranquilidad como si fuéramos amigos de toda la vida. Tan natural como la vida misma. Yo en cambio continuaba roja y lo peor es que sabía la cara de tonta que tenía . Necesitaba hacer lo que suelo hacer siempre... Huir. Y relajar el caballo desbocado que tenía por corazón.
- gracias. - dije y baje me cara tomate.
- te vienes Carlos. Esto ya está un poco denso. Nos vamos al parque.
- claro. Venís vosotras también.?
- la verdad es que estoy algo cansada. Ve tú si quieres Blanca
- venga vente! Hoy es tu cumpleaños ? - me dijo acercándose a mi oído para que lo escuchara y volvió a poner su mano en mi espalda. En todos los años que he babeado por el. Y ahora que por fin me hablaba y que además me estaba tocando otra vez yo lo único que quería era salir corriendo a mi casa ponerme el pijama y meterme en mi cama y soñar con. EL. - vamos.
Así que cogí de la mano a mi hermana y me puse a seguirlos para salir de allí. Había mucha gente y cerca de la puerta tenía que andar empujando a la gente para poder salir de allí. Ellos iban delante suerte que como era alto y llevaba la camisa blanca podía verlo. Pero hubo un segundo que lo perdí de vista. Levante mi cabeza haciendo puntillas para tratar de verlo más que nunca y entonces noté como me cogían de la mano y me empujaba hacia el, arrastrándome para poder salir de allí.

Entre dos hermanosМесто, где живут истории. Откройте их для себя