Mi Chica Rara (Chandler Riggs)

Capítulo 45 "¿Me contagie?"

—¡Señorita Parker!, ¿Cómo se atreve a llegar de ese modo?—regañó la maestra de matemáticas, enojada—¡A la oficina de la directora!

—Por mi la directora y usted pueden irse al diablo—le respondió seria, se veía la furia en sus ojos.

Vaya, la manda al diablo pero sigue hablándole de 'usted'. Que respetuosa, Parker.

Los alumnos del aula la miraron sorprendidos, Amy no tenía fama de responder a los maestros, al contrario pero joder, la chica estaba malditamente molesta, se le notaba.

—Ya ni siquiera soy alumna de esta maldita escuela, me expulsaron—se rio, ¿La expulsaron?—¡Porque este maldito idiota me delato!—me señalo con su dedo—pero gracias a Chandler, ahora puedo decirle que se vaya al infierno junto con mi materia reprobada.

—¿Qué?—me sorprendí—Amy, yo no dije nada—fruncí el ceño.

—Claro—bufó—¡Nadie más lo sabía, Chandler!

—Amy, de verdad—me levanté de mi asiento—no sé de que hablas, tú y yo llegamos a un acuerdo y no lo...

—¡Sabía que no serviría tener sexo contigo!, ¡Solo esperaste un buen momento para delatarme, me hiciste creer que todo estaba bien entre nosotros!—gritó de nuevo, lágrimas comenzaban a caer de sus ojos.

Salió del aula.

Todos se miraron sorprendidos mirándose entre ellos, comenzando a murmurar cosas y a reírse.

Se supone que nadie debía saber que me acosté con Amy, ¿Por qué?: reputación.

—Oh por Dios, ¿Te acostaste con la rara, Chandler?—preguntó un chico, divertido y todos rieron alrededor.

Tragué saliva.

—Lo hice, me acosté con Amy, ¿Por qué?, ¿Celos?—alcé las cejas.

Salí rápidamente del aula, ignorando los gritos de la maestra ordenándome que regresará al salón de clase, Amy estaba en su casillero sacando todas sus cosas con enojo, pero al verme rompió el llanto.

Ay, no, no llores, acabaré llorando contigo.

—¡No te me acerques!—exigió al ver que caminaba hacía ella.

—Yo no fui—aclaré quedándome donde estaba.

—No te creo—negó.

Terminó de sacar sus cosas y caminó hacía la salida.

—¿Por qué lo haría?

—¡Porque eres un idiota!—me gritó molesta—pero ¿Sabes qué?, algún día te darás cuenta de que persiste a alguien que te quería con todos tus defectos.

Y siguió caminando hasta salir del instituto.

Sentí una fuerte presión, algo me decía que fuera tras ella e hiciera hasta lo imposible porque me creyera.

—¡Amy!—le grité pero ella solamente me saco el dedo de en medio.

¿Qué era esta extraña sensación que me hacía sentir como...vacío al ver como Amy se marchaba?, ¿Por qué sentía bichos volando en mi estómago?, ¿Por qué mi mente se llenaba de momentos con ella?, ¿Por qué me dan ganas de llorar al saber que me odia?, ¿Por qué siento esto?, ¡¿Qué me pasa?!