12. Te amo.

1.7K 128 31
                                    

Cómo fue nuestro primer "Te amo"

Laura

— Así que... Mi hermano y tú... — murmura Rydel, acostada a mi lado.

Estamos en su habitación, acostadas en la cama boca arriba y con los pies contra la pared, y comiendo barras de chocolate.

— Tú hermano y yo... — confirmo.

— Aún no puedo creerlo sinceramente. Es increíble lo mucho que ha cambiado por ti y lo feliz que lo haces. Tienes que verlo cuando comienza a hablarme sobre ti, una sonrisa adorna su rostro y sus ojos brillan. Realmente increíble.

Sonrío levemente y suelto un suspiro mientras cierro los ojos.

— Lo amo, Rydel. — confieso.

— ¡¿Qué?!

Vuelvo a abrir los ojos y la miro preocupada.

— Estoy haciendo mal, ¿verdad? Él no me ama y sinceramente estoy asustada. ¿Debería dejarlo? ¿Debería esperar? Tengo ese presentimiento de que me romperá el corazón.

— Oh, Laura... No haces mal. Mi hermano está enamorado de ti y eres la única en su vida. Los hombres siempre rompen corazones, pero la pregunta acá es: ¿quieres que sea él u otro hombre el que te lo rompa?

Suspiro y miro el techo, mientras delibero mi respuesta.

— Nunca me lo han roto. — admito. — Julian nunca me engañó ni me hizo algo malo, se fue de mi lado y eso me destrozó pero no fue intencional. Si alguien tiene que romper mi corazón, prefiero que sea Ross.

— Entonces, ahí lo tienes. No tengas miedo, y creo que Ross te ama. Es decir, hay que ser idiota para no darse cuenta de lo mucho que significas para él. ¿Cómo ha sido que llegaron a esto?

Río suavemente al recordarlo. La primera vez que lo vi.

— Yo trabajo en un local de comida, él un día apareció allí e intentó coquetear conmigo, lo que provocó que lo abofeteara. Casi me despiden por su culpa, pero Ross habló con mi jefe y le dijo que seguiría frecuentando el lugar si yo me encontraba allí. — comienzo a decir.

— ¿Ya desde un principio estaba loco por ti? — pregunta confundida.

— No, solo quería sexo. Él siguió viniendo al lugar, más de una vez nos hemos besado pero siempre terminaba mal. Conocí a Tess también, su hija. Bueno, ahora de los dos... En fin, un día yo estaba realmente mal y Ross se dio cuenta, entonces me sacó del local y me llevó a su playa privada. No voy a mentir, nos besamos varias veces... No sabía lo que sucedía, lo único que sabía era que no podía dejar de anhelarlo. Le conté mi historia, él me escuchó atentamente y de un momento a otro nos estábamos besando, nos acostamos. Ross fue mi primera vez. Luego me marché cuando él estaba durmiendo, ya que creía que solo había sido una más y me sentía culpable por lo que hice.

— Oh... Vaya... Esto es mejor que las novelas.

— Dos días pasaron y yo seguía sintiéndome fatal, no voy a mentir... Me encontraba herida y humillada. Pero entonces, apareció de repente, y me confesó que estaba enamorándose de mi. Me pidió una cita, acepté pero el día de nuestra cita tuve un problema con mi abuelo así que él decidió que nos quedáramos en casa y me cocinó. Fue perfecto, a pesar de todo... Fue perfecto. Después de eso, seguimos saliendo tres o cuatro veces más o siempre nos veíamos en el local, siempre va a visitarme. El día de la fiesta de tu hermano, me dijo que yo era su novia, es decir... Lo hizo oficial.

— Es tan raro que estemos hablando así de Ross, el mujeriego de la ciudad.

— Lo sé... — murmuro mientras me río. — Es tan... Asombroso, y me hace tan feliz. Tessa me considera su madre, Ross está encantado con la idea. De repente, recuperé algo de felicidad de mi antigua vida.

SeductionWhere stories live. Discover now