Sad Girl's Club | Confesionario

Carta Número Dieciséis

Confieso que se me a quebrado el corazón. Sé que dicen que este no se puede quebrar, pero en el mío es una excepción.

“¿Porque dice esto? Esta exagerando” Seguro han de pensar, pues bueno, ustedes dirán si estoy exagerando o no.

Desde que tengo memoria sólo he querido dos cosas con todo mi corazón: tener una mejor amiga a la cual le pueda contar todo lo que me pasa tanto felices como tristes, y tener una familia estable.

La primera está más que claro que no se cumplirá y la segunda aún la espero.
Bueno intentaré resumir lo mejor que pueda.

Cuando estaba en la escuela sólo tengo recuerdos de mis papás discutiendo, antes de irme, al llegar, todo el tiempo. Un día cuando ya casi era la hora para irme a la secundaria, mi hermana y yo escuchamos a nuestros papás discutiendo en el segundo piso, no era novedad sólo que está vez había algo distinto.

Mi mamá gritaba con más odio que las otras veces; escuchamos cuando bajo las escaleras y en cuanto nos vio sólo nos dijo con los ojos llorosos “recojan sus mochilas y algo de ropa” otras veces ya lo habíamos hecho; tomábamos lo necesario para algunos días y nos íbamos con mi abuela sin preguntar nada, así que la obedecimos estábamos tomando las cosas cuando escuchamos a mi papá bajando las escaleras mi mamá nos volteó a ver y nos grito “¡rápido!” y cuando mi papá estaba a punto de hablar mi mamá le gritó antes “Aléjate o verás de lo que soy capas por mis hijas”. Salimos rápido de la casa sin preguntarle a nuestra madre lo que pasaba ya que se veía muy alterada a la mitad del camino allá nos lo contó.

Mi hermana y yo nos alistábamos para dormir algunas veces en el baño de arriba y otras en el de abajo; en las últimos noches que estuvimos en la casa mi papá nos preguntaba que donde nos cambiaríamos y le decíamos a su pregunta, en el baño de arriba había una bolsa con rollos sucios que cada que mi mamá la quería tirar mi papá decía que no.

Entonces nos contó que cuando está en el baño le dio por voltear a esa bolsa y vio un orificio pequeño se acercó rezando/pidiendo que no fuera lo que se estaba imaginando intento meter la mano a la bolsa asiendo el menor ruido posible pero como mi papá estaba  a unos cuantos pasos de la puerta del baño escuchó e intento detenerla pero de todas maneras lo consiguió y saco de esta un celular grabando. {No diré que pasó luego en ese día, sólo diré que mientras pasaba todo esto mi mamá estaba embarazada de mi hermano}

Por culpa de esto que no he conseguido olvidar aunque ya pasaron tres años, me expulsaron de la secundaria faltándome dos meses que por estar distraída todo el tiempo y ahora tengo que empezar la secundaria desde cero, perdí a mis amigas y a quien pensé que iba a ser mi mejor amiga pero después de que me expulsaron ya no me volvió a hablar.

Mi “mejor amiga” que tuve durante los 6 años que estuve en la escuela como éramos vecinas se enteró y yo digo que le dio miedo, vergüenza, de todo y también ya no me habla ni me dirigió la mirada, me trata como si fuese una extraña; por más que he tratado de comunicarme con ella ya que la necesitaba, necesito para desahogarme ya que no he compartido con nadie como me siento.

Mi familia no me escucha ya no tengo amigos. Me siento totalmente sola aunque este rodeada de una gran familia.

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Cariño, nunca estarás sola. Tienes una amiga en mí, y en cada chica que te lee ahora.

Sé que es difícil salir adelante con tos situación, pero la única que podrá hacerte mejorar eres tú.

Tú eres tus propias rejas, y tú puedes salir de donde estás, siempre y cuando creas en ti.

Con amor, Ana 🌹