Hokusai y el monte Fuji

115 1 0
                                    


Bueno, debo decir que me decepcionó un poco la poca (nula) participación en la pregunta del apartado anterior. 

¡Pero no pasa nada! Porque llegó la Navidad y, con ella, el día de Reyes (por lo menos, aquí en España los que traen regalos son los Reyes Magos. No sé cómo será en el resto de países). La verdad es que mis expectativas eran iguales a la participación en el anterior post: pocas (ya paro)

Por eso me sorprendió cuando desenvolví uno de los paquetes y me encontré con esta belleza:

Por eso me sorprendió cuando desenvolví uno de los paquetes y me encontré con esta belleza:

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

(Ignorad la publicidad explícita. Se me pasó taparla)

Supongo que la foto ya habla por sí sola, pero por si alguien no la conoce: a esta imagen se la conoce como La gran ola de Kanagawa, pintada por el maestro Katsushika Hokusai. Pertenece a la colección de Ukiyo-e o pinturas del mundo flotante, que veremos a continuación.

Es una imagen bonita. Incluso transmite cierto vértigo, si te paras a mirarla detenidamente. Pero ¿Por qué tanta emoción? ¿Qué hace especial a esta lámina que no tiene el resto de pinturas del mundo flotante? Este blog va a enfocarse más a la perspectiva artística, ¡A ver qué tal!

Primero, conozcamos al autor. Hokusai nació en 1760 en Edo, actual Tokio. Desde joven manifestó un gran interés por la pintura. Por eso, cuando fue adoptado por un artesano de prestigio llamado Nakajima, pudo dar rienda suelta a sus impulsos artísticos. De hecho, y esto es más anecdótico, se dice que fue Nakajima el verdadero padre de Hokusai, fruto de las relaciones entre aquel y una amante. 

Autoretrato de Katsushita Houkusai

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Autoretrato de Katsushita Houkusai

Un poco mayor, cuando contaba aproximadamente con quince años, entró al taller de un grabador, con quien trabajó hasta su mayoría de edad. En 1778 se convirtió en discípulo de Katsukawa Shunso, maestro del ukiyo-e.

¿Qué es el ukiyo-e?

Podría dedicar una entrada entera a este arte, pero iré al resumen: Ukiyo-e (pinturas del mundo flotante)es el nombre que recibe el género de grabados realizados en madera, que tuvo especial relevancia en la era Tokugawa (1600-1900 aprox.) gracias al ilustrador Moronobu Hishihaka. Representaban paisajes, escenas teatrales e incluso personas, aunque destacaron tres tipo de grabados: los yakusha-e, los bijin-ga y los shunga. Como digo, este tema da para mucho.

Pequeñas historias de la HistoriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora