Una enfermera.
Un paciente.
Esperaba que al terminar su carrera todo fuera de un color rosa, sin preocupaciones. Sus profesores la recomendaron a un hospital, pero no es uno normal. Hospital psiquiátrico para pacientes en estado terminal. En pocas p...
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Esta no es la mejor manera de vivir, no cuando eres una simple enfermera de un centro psiquiátrico. No cuando un paciente diagnosticado con esquizofrenia se enamora perdidamente de ti, y aun peor cuando su familia te pide que no reveles lo que tus ojos han visto, creando una gran presión sobre tus hombros y el sentimiento de culpa en tu cabeza.
"Love me"
Una bolsa cae sobre mis piernas con algo en su interior que mancha mis piernas con un viscoso líquido color carmesí. Mi cuerpo se petrifica y mis ojos se clavan sobre aquel objeto que ha dejado salir algo de su interior, un grito se escapa de mi garganta sin que llegue a impedirlo. Cubro mi boca evitando vomitar, las arcadas se vuelven mas fuertes y cierro mis ojos esperando que todo sea un cruel y mal sueño. Su mano toma mi mentón para alzarlo lentamente, logrando que nuestros ojos choquen, destellos de enojo y satisfacción inundan en su mirada, el miedo se apodera de mi cuerpo y lentamente bajo mi rostro. Seca mis lágrimas con cierta ternura enferma que es propia de él, mis ojos no pueden despegarse de aquella bolsa que contuvo aquella cabeza de cabellos castaños de un colega que horas antes me había invitado a un café, anunciando mi ascenso.
"Love me, Eileen. You have to love me forever"
Agarra la cabeza colocándola nuevamente en la bolsa para luego enviarla a volar por los aires, el ruido sordo de aquella bolsa al tocar el piso provoca un espasmo en mi organismo. Su cuerpo cubre el mio y sus manos, como si se trataran de dos serpientes, se posicionan en mi cuello, impidiendo que el aire entre a mis pulmones. ¿Será esto un sueño? Cierro mis ojos y siento como mi vida cuelga de un hilo entre la vida y la muerte, que con unos segundos más esto podría convertirse en un sueño eterno, pero no dejaré que eso suceda. Levanto mi mano sintiendo el tacto sobre su cabello, una leve sonrisa se forma en mis labios al sentir nuevamente el aire dando vida a mi cuerpo. Mi visión se vuelve borrosa y antes de caer en la inconsciencia, susurro las palabras que tanto anhela.
