ATRAPADOS (2022 - SIN EDITAR)

Regreso a casa

Hola de nuevooo!!! Me extrañaron? Bueno, yo sí, y mucho =) Les dejo el primer capítulo de ésta segunda temporada, espero que les guste. Por favor, lean lo que está al final del capítulo!!

Capítulo 1: Regreso a casa:

Repasé mi lista mental: Había vaciado mi guardarropa, las cosas del baño estaban todas empacadas, los zapatos y accesorios también. Faltan las fotografías y las otras cosas inútiles que tan lindas quedan en un departamento.

Tomé una a una cuidando de no romper nada. Al finalizar observé mi casa. Lucía enorme al estar vacía, ¿Por qué habría sacado el boleto para las 7 de la mañana? O peor aún, ¿Qué hacía despierta a las 5 teniendo la mayoría de las cosas listas, y estando a unos escasos kilómetros del aeropuerto? En fin. Como no sabía qué hacer exactamente, salí a dar un paseo.

Los escasos rayos de luz solar asomaban lentamente cuando salí. Fui al parque y contemplé la ciudad. Realmente extrañaría estar aquí.

-¡Sarah! -Miré en dirección al llamado y estaba Peter, el dueño de una tienda que estaba abriendo.

-¡Hola! -Saludé.

Luego seguí mi caminata. Creo que éste será uno de los últimos momentos de paz que tendré, ya que debo regresar a América, y no es que me parezca demasiado divertido tener que vérmelas de nuevo con mi antigua vida. Hace cinco años que ya estoy aquí, y ya tengo mi vida armada. Mis primeros años como "Adulta", o al menos un intento de eso, no ocurrieron en mi país natal. También será complicado acostumbrar a Casey a su nueva casa (es extraño pero sí permiten gatos en los aviones, y cuando me enteré la traje conmigo). Será triste no merendar a las cinco de la tarde oyendo las campanadas del Big Ben... Sin embargo extraño a Daniel y Matthew, así como a mis padres. No tengo noticias de ellos desde las últimas navidades, en las que los invité a pasar unos días aquí.

A las seis en punto me dirigí a una cafetería y ordené un té con galletas. Mientras comí pensaba si todo estaría igual o parecido a como estaba cuando me fui. No volví después de mi graduación, por lo que no sé absolutamente nada de lo que ocurre.

Pronto se hizo hora de irme. Aún debía ir por mis maletas, llamar a un taxi y eso... Al llegar a casa, lo primero que hice fue cerciorarme de que no faltaba nada por empacar. Casey me miraba desde el sofá que tanto quería, de seguro pidiéndome algo de comer ya que estuvo unas horas sin probar bocado. No le daría su alimento, debe estar sin comer por un tiempo para que no vomite. Cuando me aseguré de que no me dejaba nada, pedí un taxi para llegar al aeropuerto más rápido.

La espera fue corta. Casey por suerte no estaba asustada, si no sería muy complicado. Ya había viajado antes de todas formas. Cuando se hizo la hora de subir, a mi gata la pusieron en una jaula para mascotas, y luego fuimos ambas a buscar donde me sentaría. Saqué a mi incondicional Sherlock Holmes y me dispuse a leer, pero fui interrumpida a los cinco minutos por un desconocido preguntando si podía ir a la ventanilla para sentarse. Hijo de perra que me interrumpes no ves acaso que...

-C-claro, no hay problema, siéntate. -Oh por Dios, el rubio más apuesto de toda Inglaterra acaba de preguntarme si puede sentarse a mi lado.

Me corrí hacia la ventanilla justo para que el avión despegue. A medida que íbamos subiendo, la ciudad se veía menos. "Adiós Londres" pensaba. Es una ciudad maravillosa.

-Hola Sarah... ¿Me extrañaste? -Dijo una voz que se me hacía familiar. Miré para todas partes, pero no había nadie. -¿Acaso no me ves? -Seguía hablando, pero pude divisar una sombra.

Otra vez habló pero no comprendí qué dijo realmente, aunque parecía que cada vez se aproximaba más a mí, ya que ahora pude divisar apenas una chaqueta de cuero negra y unas converse del mismo color, pero no podía ver la cara del misterioso personaje. Sentía miedo, demasiado, ya que estaba en un departamento a oscuras donde sólo se siente la alfombra gruesa sobre donde están mis pies descalzos. Oh no, el hombre parece acercarse más y...