━ 𝗏𝗂

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Después de tomar esas fotos, Daniela decidió subir a buscar la habitación de Steve, justo como lo había hecho en casa de Nancy. Cuando subió, la puerta de la primera habitación que vio estaba abierta, pareció ser la de Steve y entró, otra vez, como si fuera la suya. No había nada más que un poco de ropa esparcida por el suelo, unos cuantos libros que parecían ser de la escuela y... otra cosa, que Daniela decidió ignorar.

La castaña se acostó en la cama, mirando hacia el techo sin expresión alguna. De verdad quería volver a casa. Arreglar las cosas con Jason, ver si su familia si quiera había notado su desaparición, recibir para Navidad un poco de dinero y observar cómo ahogaban a su hermano en regalos. Aunque eso no era tan bueno, ya estaba acostumbrada. Y si no lo pasaba así, se sentiría extraña. Ya se había convertido en una tradición. En realidad no le importaba mucho.

Unos minutos después, dejó de pensar en su familia y siguió observando la habitación. Su mirada dio con un bate. ¿Lleno de clavos? Se levantó al instante y fue a tomarlo. Una vez en sus manos, pudo notar que estaba algo sucio. Estuvo por fingir dar un golpe, pero la voz de Steve la interrumpió.

—¿Qué haces? —el chico rió mientras entraba a la habitación.

Idiota, casi me matas del susto —Daniela dejó caer el bate por ahí, luego lo miró cruzando sus brazos.

—Volviste a llamarme idiota en español, ¿verdad?

—No —se encogió de hombros y se acercó a él—. Bueno, sí. ¿Qué traes ahí?

—Nancy te lo envía —le entregó el maletín lleno de ropa—. Trae ropa, y cosas de mujeres... tú ya sabes.

—Gracias, supongo —Daniela agarró el maletín y lo abrió—. Iré a ponerme cómoda para dormir, quizás por aquí venga un jogger o algo así.

—¿Jo-qué?

—Un pants, como una pijama —la castaña rodó los ojos riendo y salió de la habitación, buscando el baño.

—La puerta del baño no cierra bien, así que debes poner... —empezó a hablar Steve, pero Daniela no lo dejó terminar.

—Simplemente no salgas de tu habitación y no veas hacia el baño, ¿bien? —Steve rodó los ojos, Daniela podía ser muy difícil de tratar.

Daniela buscó en el maletín, rezando para que Nancy le haya enviado algo de ropa interior. Afortunadamente lo hizo, se quitó la blusa de Steve y se cambió el sujetador, luego, aún sin blusa, se deshizo de su pantalón y siguió buscando algo que se viera cómodo.

Steve, por otro lado, ya tenía su ropa para dormir, pero recordó que no cerró de manera adecuada la puerta principal. Así que salió caminando en dirección al baño, ya que el baño estaba cerca de las escaleras y por instinto. Pero justo cuando vio a Daniela casi desnuda debido a la puerta en mal estado del baño, volvió a entrar a su habitación al instante. Sin mentir, tuvo la intención de asomarse y admirarla, era una chica muy hermosa... pero no estaba correcto, así que se dirigió a cerrar la puerta principal pero esta vez con la mirada clavada en el suelo.

Por otro lado, Daniela vio por el rabillo del ojo que Steve estaba en el pasillo, cosa que claramente la sobresaltó, pero notó que su cabeza estaba completamente agachada así que solo, así que solo continuó buscando algo que ponerse para dormir. Después de que al fin encontrara algo cómodo, salió del baño y regresó la habitación, encontrándose con Steve sentado en el suelo y leyendo un libro.

UNSTEADY (EDITANDO) ━ steve harringtonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora