"Se le ve bien" pensó el chico, refiriéndose a su camisa. Al instante, sacudió su cabeza y salió de la casa.

( ... )

—¡Trajimos pizza! —gritó Daniela entrando a la casa de Steve con tres cajas de pizza y una gran sonrisa—. Tenía hambre, el señor ese, ¿Clarke? Puede esperar.

Todos miraron a Steve, esperando que diga algo como "yo no puedo esperar, quiero que te vayas de una vez" o algo así, pero no lo hizo.

—Me caes bien —dijo Dustin abriendo una de las cajas—. Nos serviría de niñera.

—¡Hey! ¡Yo soy el niñero aquí!

—Steve, él dijo niñera —habló Mike agarrando dos porciones, luego volvió a su asiento junto a Eleven y le entregó un pedazo.

—Yo... creo que estamos de más aquí, si ocupan algo saben en dónde encontrarnos... encontrarme, sí —dijo Nancy, Jonathan asintió detrás de ella. Daniela suspiró, se levantó y caminó hacia Nancy.

—Gracias por la ropa, quizás necesite más mañana así que... ¿nos vemos? —le dijo cruzándose de brazos, Nancy asintió sonriendo.

—Nos vemos.

Jonathan y Nancy salieron de la casa mientras Daniela se sentaba en el suelo mirando los sofás llenos de niños. Y a Steve en una esquina.

—¿No me dirán sus nombres? Algo me dice que estaré por un tiempo aquí.

—Soy Mike.

—Yo Lucas.

—Dustin por aquí...

Después de que todos dijeran sus nombres, Daniela ya iba por su segunda rebanada. Solo faltaba Eleven. Pero Daniela ya sabía quién era, y perfectamente.

—Y, bueno, tú eres Eleven —habló Daniela antes de que la menor pudiera hacerlo.

—O Jane, como sea —después de eso, rodó los ojos y entrelazó su mano con la de Mike.

Daniela se quedó mirando esa escena algo confundida. Mike pareció notarlo, pues frunció su ceño.

—¿Daniela? —Daniela terminó de masticar el pedazo que tenía en su boca, lo tragó y se levantó de golpe, mirando a todos a su alrededor.

—Mike Wheeler —señaló al pelinegro, después de volteó y miró a los demás algo asustada—. Dustin Henderson, Lucas Sinclair, Maxine Mayfield, Will Byers... Jane Hopper.

Todos parecían muy sorprendidos, pues se habían limitado a decir sus nombres y ya.

—¿Sabes nuestros apellidos?

—Obvio que sí —Daniela se volvió a sentar en el suelo y cubrió su rostro con sus manos, algo asustada y a la vez emocionada—. Ustedes salen en mi libro de historia —una pequeña sonrisa apareció en el rostro de Daniela, mientras que todos estaban más que confundidos—. ¿Cómo no lo pude notar antes? Ustedes salvaron al pueblo, tantas veces, que ni se pueden contar. Son los héroes de Hawkins.

—¿A qué te refieres con "héroes de Hawkins"? —preguntó Dustin con una pequeña sonrisa.

—Ya les dije. Han salvado a Hawkins incontables veces. ¿Estamos en 1984, verdad? —asintieron—. Hace poco vencieron al Shadowmonster, a.k.a Mindflayer, y el año pasado Jane, o Eleven, terminó con el Demogorgon.

—¿Eso sale en tu libro de historia?

—¡Sí! En el de la historia de Hawkins, sí —Daniela los miró a todos con una gran sonrisa—. Salen muchísimas cosas más, muchas hazañas más.

Todos parecían sorprendidos y confundidos, pero a la vez emocionados.

—¿Alguna vez descansamos?

—Pues sí, cuando Hawkins está seguro descansan.

—Wow, somos leyendas —dijo Will riendo—. ¿Qué otras cosas dice el libro?

A Daniela se le borró la sonrisa—. Me encantaría contarles todo para que estén preparados, pero no puedo, si lo hago causaría algo terrible, como la muerte de otro de ustedes y...

—¿"Otro" de ustedes? —Lucas fue el único que lo notó—. ¿A qué te refieres con "otro"?

—¿Alguno de nosotros muere antes de tu año? —esta vez Mike fue el que preguntó.

Mierda, te hubieras quedado calladita, Daniela, estás bien pendeja, ¿ahora qué vas a decirles? ¿La verdad? Y a decir verdad, es la mejor idea que he tenido en estos días —empezó a susurrar, todos la escuchaban, pero no entendían mucho—. Yo... bueno, sí, uno de ustedes muere. No puedo decirles quien, como ya les dije podría causar cosas terribles.

Nadie más habló a partir de ahí. El ambiente se puso tenso, así que solo se dedicaron a terminar la pizza.

—Es algo tarde para ir a ver al señor ese, ¿no lo creen? —les dijo Daniela levantándose mientras miraba el reloj, eran las 7:12 pm, la mayoría asintió levantándose también—. Creo que sería mejor que cada uno se vaya a su casa, mañana nos vemos aquí mismo temprano, quisiera estar en casa para Navidad, así que hagamos esto rápido.

Todos asintieron, para después mirar a Steve.

—¿Qué? —nadie respondió, Steve bufó y rodó los ojos—. Tengo que ir a dejarlos, ¿verdad?

—La última vez que viajamos solos por la noche el Demogorgon se llevó a Will —Mike se levantó y caminó hacia la puerta, los demás lo siguieron.

—No es una opción, Steve —dijo Max a punto de salir.

Después de segundos en silencio, Steve se rindió y se dirigió a la salida—. Tú, no te muevas de aquí. Regreso en seguida.

Steve señaló a Daniela, la castaña levantó sus brazos y rió.

—Espera... ¡Mike! —la chica salió, llamando la atención del chico, este se volteó—. Mi celular, mi "iPhone", ¿me lo devuelves?

—Oh, sí, claro —Mike buscó en sus bolsillos, cuando lo encontró, lo sacó y se lo entregó. Daniela agradeció y volvió a entrar.

Cuando el auto de Steve desapareció de su vista, abrió la aplicación Snapchat y se tomó un selfie, para después colocar la fecha y escribir algo en la foto. Le impresionaba que sí funcionara, honestamente. Luego de la selfie, empezó a tomar fotos de todo lo interesante que podía encontrar en casa de Steve.

UNSTEADY (EDITANDO) ━ steve harringtonWhere stories live. Discover now