Imitadora [I]

Final

La mujer bajó las escaleras con maletas en manos y un auto la esperaba afuera de la casa, lo vió sentado en la sala observándola detalladamente como si ese fuese el recuerdo con el que se quedaría de ella.

—Yo te he dado mi vida, lo más grande que yo tenía y no has sabido cuidarlo, tratarlo...—

—Vegeta...yo— la mató la primera lágrima en el rostro de él.

—Ahora pienso en todo lo que hemos vivido cuando yo decía "No puedo si no es contigo" la chispa que sentimos no prende con este frío no existe luna llena que ahora cambie este vacío, si vas a cambiarme y es por otro tipo ten valor de hablarlo no formarme un lío—

—No es que no es...—

—¡Escúchame mujer! Que no soy un niño, estoy cansado...joder y ahora mírame porque yo te amé sabiendo que al final me iba a doler sintiendo más dolor del que ya sentí ayer... perdóname pero yo te juro que sí lo intenté, sólo me faltó que lo supieras ver...—

—¡No Vegeta!— las lágrimas en los ojos de la chica aparecieron y él ni siquiera se movió —Yo...—

—Permíteme que te dé un consejo, si vas a quedarte ¡Quédate lejos! Sé que me voy a torcer... Ahorrate las molestias sí piensas volver voy a estar con todas no te seré fiel...puse las manos en el fuego y de nuevo me quemé...—

—Él...yo...— la garganta le temblaba ver a Vegeta hecho un mar de lágrimas la hacia sentirse mal.

Vegeta se levantó

—Te juro vida mía que yo lo intenté conviví con espinas de mentiras del ayer... sé que no volveré a estar bien, te ví tan diferente al resto ¡Busqué y busqué! Y no encontré tus defectos algo tan perfecto...te besé y sin pensarlo comencé un vicio....y ahora te vas sin dar explicaciones.—

—Hace tiempo...lo conocí...me enamoré de él, salí, dormí e hice de todo con él...—

—Que regrese mi amada...yo la extraño ¿A dónde se me perdió?—

El claxon del auto de afuera lo enfureció y tomó las maletas sacándolas de la casa.

—En verdad...lo lamento yo no— la cayó con su dedo y se le acercó.

—Sólo promete una cosa...—

—¿Qué?—

—No lo beses como a mí, no lo acaricies nunca así, no lo mires como a mí...por tú bien lo digo porque sí lo haces...te vas acordar de mí—

Y ella soltó en llanto, quería gritar y decir que estaba arrepentida, gritar que se había equivocado que ella amaba a Vegeta incondicionalmente pero él ya no la estaba mirando, él ya había sacado sus maletas.

—Cuando estés con él pregúntale ¿Por qué me ha robado todo?—

Y la besó...pero ese beso iba cargado de emociones.

—Evita decirle que todo lo que llevas son regalos míos...pero anda, vete— le limpió el rimel de las mejillas y acarició su cara por última vez —No querrás cargar esa apariencia al verlo...¿Y cómo es él?— se atrevió a preguntar.

Ella con el corazón en la mano le señaló la ventana y lo vió recargado en el coche, Vegeta rió.

—¿En qué lugar se enamoró de ti? ¿De dónde es? ¿A qué dedica el tiempo libre?...—

Vegeta no soportaría que ella respondiera así que la tomó de la cintura y la llevó a la puerta, antes de que tan siquiera pudiese hablar le cerró la puerta.

•••

—¿Madre?—

—¡Ah Vegeta! Que bueno que llamas, los niños querían quedarse a dormir, mañana tu padre los llevará a pescar ¿Estás de acuerdo?—

—Si no pasa nada, les hablaré luego—

•••

—Kakarotto...—

—¿Vegeta? ¿Qué pasa?—

—Necesito charlar con alguien...—

—Llego en 2 minutos...—

•••

Y hasta aquí la historia

¡Pero esto no acaba aquí!

Vayan a mi perfil a leer la segunda temporada.

Quién sabe...