Mi sexy niñero.

Capítulo 30.

Pov.Alice.

Después de lo sucedido con Ryan realmente me enoje, porque, como si quiera había podido pensar que podría cambiarlo por otro, y sí, era idiota como él había dicho por siquiera pensarlo.

Y ni siquiera pensaba reclamarle nada, es más hasta haría como si él nunca hubiera pensado nada, pero ahora ya no porque él lo había arruinado yéndose sin siquiera esperar una respuesta de mi parte y además de haber puesto palabras en mi boca, como el mismo había dicho hace rato.

Cansada de la situación he decidido llamar a Brooke para salir a algún antro para divertirnos, aunque sé de ante mano que eso a Ryan no le gustara nada, pero teniendo en cuenta su actitud de imbécil ahora mismo eso ya no me importa.

Sentada sobre mi cama espero a que mi mejor amiga atienda la llamada.

-¿Alice, que ha pasado?-Dice en cuanto coge el teléfono.

-¿Ah qué te refieres?-Le pregunto confundida, pero en seguida me doy cuenta a qué se refiere.

-Bueno, umm déjame ver, un Ryan completamente furioso entrando al apartamento para únicamente coger las llaves de su coche y una chaqueta para después largarse sin dignarse a hablarme, ¿no te suena para nada amiga?-Me pregunta Brooke en tono sarcástico.

-En parte yo he iniciado, pero él ha tenido la culpa de lo último...-Empiezo a decirle pero ella me interrumpe.

-Explícate mejor nena, que no te entiendo.

-Bien, pues veras-Y así termino de contándole todo lo sucedido hace menos de una hora y al final mi amiga solo dice.

-Mi hermano es un imbécil.

-Lo sé. -Le respondo.

-Eso no quita que lo quieras.

-Lo sé. -Vuelvo a decir porque es cierto, lo amo a pesar de todo.

-Bueno pues aunque sea así en este momento necesitas tu dosis de la Brooke de Nueva York, a propósito.-Hace una pausa para después continuar.- ¿Para qué me llamabas primero?-Pregunta después de tanto a lo que solo rio.

-Esta llamada era para decirte que te necesitaba y que saliéramos a un antro para divertirnos.

-Lo bueno es que somos mejores amigas y sabias perfecto que o te decidías ir tu o yo te llevaría.-Dice con tanta emoción.-Bien te veo en un rato, necesito bañarme.

-Bien, ¿en mi apartamento o el tuyo?-Pregunto.

-La que acabe primero se va al de la otra.-Y con eso cuelga.

Rápidamente me meto bañar y al cabo de unos 15 minutos salgo con la ropa interior ya puesta y voy directo a mi armario para ver que vestido me pondré. Mi intención esta noche no es ligar con nadie y mucho menos lucirme, porque aunque mi novio en este momento este siendo un completo idiota lo amo y nada de eso cambiará por eso solo quiero distraerme un rato y que mejor que con mi mejor amiga.

Me decido por un vestido negro corto, muy corto, creo que este es uno de los tantos vestidos que mi madre me ha regalado, puesto que yo nunca compraría algo tan corto, pero en este momento eso ya no me importa tanto y decido ponérmelo.

Después procedo con el maquillaje, empiezo por una pequeña capa de polvo, sigo con una línea fina y delgada de delineador, aplico rímel y por ultimo le agrego a mi boca labial color rojo. Ryan me ha dicho que le encanta como se me ve ese color, puesto que resalta mi blanca piel y mis ojos celestes, por Dios no puedo creerlo, hasta cuando trato de pasarlo bien un rato, él está siempre ahí.

Dejo de pensar en Ryan y me concentro en mi cabello, decido alisarlo y lograr así que me llegue hasta la espalda baja, una vez que termino voy en busca de mi último accesorio, los tacones, para no demorarme más me decido por unos que vayan a juego con mi vestido, así que elijo unos color negro.