CAPÍTULO 1

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-Sí amiga, tal y como lo escuchas, ¡me dejo plantada!.-Dijo Paola, (mi mejor amiga).

Ella es una chica un tanto....¿extrovertida? ¿Divertida? ¿Impulsiva?. La verdad es qué apesar de que la conozco de años es casi imposible para mí poder describirla, tiene muchísimas facetas.

-No te preocupes, es un patán que te buscará cuando se de cuenta de lo que perdió.-Dije para calmarla un poco.

No entiendo como ese estúpido la dejo plantada si ella es hermosa, de tez blanca y ojos de un color jade.

Estúpido.

-Cambiemos de tema.-Dijo Paola.

-Al fin, esto de repara-corazones no se me da.-dije sonriendole.

-¿qué tal vas con Luis? Hace tienpo no me cuentas qué tal va su relación.-dijo ella clavando sus ojos jade en mí.

Cabeza: Dile la verdad, dile que es un estúpido que te vio la cara.

Corazón: Ay no, ¿para qué lo recordaban? ¿Acaso no ven qué estoy sufriendo?

-Bueno, pues...¿como sé le llama a un "hombre" qué engaña a su "novia" en sus narices y le importa un pepino lo que ella sienta?.-dije yo, restándole importancia.

-¿QUÉÉÉÉ?.-dijo ella gritándome y me sobresalto.

-Calmate Paola, no vale la pena, es un estúpido. Cuando me enteré fui me intentó besar y le seguí el beso, con mi mano recorrí su pierna y llegué a su intimidad. Apreté y el sólo gruñó. Le dile al oido “a mi nadie me ve la cara de idiota. Suerte." después deje de tocarlo y al dar la vuelta, me sentí insatisfecha, me giré hacia él y le pegué en dónde más le duele a un hombre.-Dije sonriendo, recordando el momento.

Paola ma miraba atenta.

-¿En dónde? ¿En el corazón?.-Me vio con cara inocente pero estaba reprimiendo una carcajada.

Estallamos en risas las dos unos cinco minutos.

-Si, en el corazón.-Me reí de nuevo.

-Esooooooooooo. Amiga, enserio, que ovarios tienes para hacer lo que hiciste, ni loca yo lo hubiera hecho.-dijo Paola sacudiendo la cabeza en forma de negación y con una sonrisa en su cara.

-Ni idea. La vida ha sido dura conmigo, así que tengo que ser dura con la vida.-Dije y ella solo asintió.

Seguimos viendo la película, que el llanto de Paola había interrumpido.

-Elena.-dijo Paola y me miró.

-Dime.-La miré y sonreí.

-Mañana...no iré al colegio.-Me miró y sonrió inocentemente.

-¿Qué? Paolaaaaaaa, no.-Dije mirandola mal.

-Lo siento, mi papá quiere ir al balneario, y que mejor que ir en lunes.-Dijo con fastidio y sarcasmo.

-Está bien, no importa.-Sonreí.

Me abrazó y yo no soy muy fan de los abrazos, la retiré.

Pasaron aproximadamente tres horas que estábamos en mi habitación platicando de la vida, hasta que nos percatamos de la hora y Paola se fue.

-Te acompañó.-dije y me levanté de la cama.

Caminamos a la salida y nos despedimos.

-Mañana me cuentas que tal con tu crush.-dijo Paola sonriendo y lanzándome un beso desdé la esquina de mi casa.

-¡SHHHHHHH!.-Dije mirandola mal.

-Lo siento, lo siento, chau.-Dicho esto dio la vuelta y desapareció de mi vista.

Mañana será un gran día, lo presiento.

¿Por qué a mi?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora