Narra Freezer Ya pasaron otros 7 años, Kuriza se ha convertido en un adulto, el tiempo se fue tan rápido que apenas lo vi crecer. Su madre quería inscribirlo a la preparatoria; la verdad no estaba seguro de eso, pero acepté. Hablando de mi esposa, ella seguía tan bella como siempre; y yo, estoy igual, no he cambiado en nada más que proteger a mi familia
Narra Allison Mi pequeño hijo, ahora es un gran adulto. Como olvidar las veces que lo tenía en mis brazos, aunque... quisiera aprender a volar como ellos.
—Quiero que me entrenes -dije levantándome de la silla mientras comía
—Entrenarte?
—Si, quiero hacer lo mismo, volar por los cielos -respondí decidida
—Estás segura? -preguntó dudoso- en tu caso, creo que será un poco imposible que lo logres
—Por favor di que si! -hice pucheros para que aceptara, el se sonrojó
—Está bien
—Ay gracias! -me lancé hacia el y lo besé- no sabes cuanto te amo
—Yo igual
—Pues... diviértanse -Kuriza respondió en tono burlón
—No vienes con nosotros?
—Será después, ahora tengo tarea que hacer
Narra Freezer El día pasó, mientras Kuriza no estaba, me dispuse a cumplir lo que prometí. —Ya estás? -pregunté esperando a que Allison abriera la puerta de la habitación
—Ya estoy lista -la abrió, cuando la vi traía puesta un atuendo de ejercicio, se seguía viendo tan hermosa
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—Sorprendido? -preguntó notando mi reacción
—Em... ya vámonos
La llevé a un lugar no muy lejos de nuestro hogar, donde solía entrenar con Kuriza.
—Primero, te enseñaré a controlar tu ki
—Ki? -confundida- que es eso?
—Ya lo sabrás, lo que tienes que hacer es dejar tu mente absolutamente en blanco
—Okey lo intentaré -cerró sus ojos
—Junta tus manos y entre ellas, concentrarás todo lo que tienes -lo hizo, en pocos segundos, salió un brillo que venía de entre las manos, en entre otras palabras; una bola de energía. Después de eso, le enseñó directamente lo era directamente flotar sobre el piso, la castaña se centró nuevamente en su ki y poco a poco, sus pies se levantaban del suelo, hasta que logró estar en el aire a cierta distancia.
—Lo logré! -emocionada- mira mi amor! -voló alrededor de el para que lo vieran
—Me da gusto que aprendieras tan rápido
—Gracias -respondió y lo besó
—Ahora que ya puedes volar, ya no habrá necesidad de que te lleve
—Me encanta que me lleves en tus brazos pero... es mejor que descanses de eso -le acarició la mejilla
La pareja emprendió el vuelo y venían agarrados de la mano, era un momento en que los dos disfrutaban como nunca
—Ya llegaron -los recibió Kuriza sentado en el sofá- que estaban haciendo?
—Am pues... le enseñé a tu madre a volar, ahora ya podemos ir a donde queramos los tres.
La pareja se dirigió a su habitación y terminaron echados sobre la cama.
—Olvidaron cerrar la puerta -Kuriza los vio y la cerró
