Me observan #1

Capítulo 22 Carta de sinceridad

Anais: hija mía, siempre te lo he dicho eres mí vida entera, me enseñaste amar sin condiciones, sin peros. Las palabras quedan atascadas en la garganta, es un peso que llevo encima hace mucho, tal vez cuando sepas la verdad no entiendas el porqué lo hice, en estas pocas letras te digo lo que no fui capaz de hacer en 16 años de tu vida. Y es que fui una cobarde, una egoísta, te crié en una mentira, una que yo misma construí.

Tal vez me odies y lo entiendo, merezco de ti lo peor, pero también tienes que entender que lo hice todo por mantener a salvo lo único importante en mí vida, y por eso fui una egoísta. Me lo advirtieron muchas veces, sabía que algún día te enterarías de la verdad, he iba ser peor, pero siempre respondía o mismo "mejor tarde que temprano" se que debes de tener muchas preguntas y que está carta no justifica 16 años basados en mentiras.

Bien aquí voy; hace mucho tiempo, más tiempo del que puedes imaginar, un ángel creo una hermandad, los humanos seleccionado tenía que dejar su vida mundana para unirse al sacrilegio. Los llamaron los cazadores de demonios, no eran humanos pero tampoco eran criaturas de las sombras, y así mismo los hijos de sus hijos, cada descendiente de los primeros cazadores serían cazadores, y así sería por lo siglos de siglos. Manteniendo el orden en el mundo.

Mí bisabuelo fue un cazador, mí abuelo fue un cazador, mí padre es un cazador... Anais mí familia son descendientes de cazadores, yo no tenía 15 años cuando me embarace de ti, los cazadores como todo en la vida tienen que seguir reglas, reglas sagradas. Yo no me podía enamorar de un mundano sin embargo lo hice, aunque él ya tenía conocimiento de éste mundo. Cada día que crecías corría el riesgo de que te dieras cuenta de todo, por eso impregne recuerdos en ti, todo lo que conoces de tú vida no es más que mentira.

Te amo Anais y no puedo más que pedir perdón, todo es tan caótico mí cabeza da miles de vueltas no me alcanza la noche ni la vida para pedir perdón, aún siendo una niña la sangre cazadora te llamaba, dibujas nuestro escudó y te empezó a interesar lo misteriosos ¿recuerdas los libros de vampiros que me pedías qué te comprara? Lo siento, lo siento, hubiera querido decirte todo en persona pero no, soy tan cobarde por no ser capaz. No confíes en nadie Anais por que ahí traidores dentro de la hermandad que está detrás del libro de los muertos, cuando lo encuentres entenderás.

Te ama con todo su corazón mamá.

Se que no es el capítulo que esperaban pero no lo pude evitar.

¿Cómo han estado?

¿Alguna sugerencia?

Espero les allá gustado el capítulo nos leemos pronto.