El comienzo del sufrimiento.

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Otro día más en la escuela...esto es muy aburrido. ¡La escuela es un fastidio! ¿por qué debo hacer ejercicio si no deseo ser atleta? ¿por qué debo estudiar ciencias si no deseo ser bióloga? ¿por qué--—¡Calla odiosa! ¡déjame leer tranquila!—resonó en mi mente una voz bastante similar a la mía, interrumpiendo mis anteriores pensamientos. —¿T-tú quién eres...?—pregunté—¿y qué lees? —Pues, me llamo Nightmare, y soy tu peor pesadilla. —No me digas...vamos, te pregunté otra cosa.—Oh, leo Another note el caso del asesino. ¿Está muy buena sabes? deberías dejar tus cosas esas del yaoi y empezar a leer bellezas como esta. —¿¡What!? ¿¡quién eres tú para decirme qué hacer!? ¡y ya vete de mi mente! —le dije a esa cosa en mi cabeza—¡Shuu shuu! —Esa frase es del tal Foxo—continuó dirigiendo la mirada al libro que tenía. —No es Foxo, es Foxy... —Como si me importara—dijo con una sonrisa cínica que me causó un escalofrío. Bueno, ya me cansé de esa cosa. Volviendo a la realidad... —Vámonos al ensayo—dijo aquel chico de cabellos violetas que conocí días atrás—vamos. Me tomó del brazo con cautela y me llevó al salón de ensayos para estar más tranquilos. —Vamos Tomoko, toca algo. —me ordenó Freddy en cuanto llegamos Bonnie y yo al cuarto—¡tu puedes! —Yo...no lo sé, estoy algo enferma y bajoneada—mentí para evitar la orden. —Oh vamos, ¡seguro que lo haces increíble! —me animó el castaño. —Pues...pensándolo bien...está bien, lo haré—decidí, ganándome la sonrisa del de ojos azules.

Después de la canción terminamos el ensayo. —Oigan chicos—dije consiguiedo la atención de los demás—¿qué les parece una pijamada en mi casa? Claro—dijeron todos al unísono, excepto el ojiámbar. —No...—me dijo el mismo—tú vives con...—pausó para dar un largo suspiro—ugh, Meg—¡Vamos amargado!—dije alegre mientras me acercaba más a su rostro provocandole nervios notorios—será divertido. Meg no te molestará. Cuando el pelirrojo se sonrojó sabía que iba a aceptar esta vez, estoy casi segura. Ya sé el punto débil de ese zorrito además del pudín. —E-Está bien...—asintió él con un tierno rubor—pero prométeme que ella no molestará—insistió. —Puedes confiar en mí, Rojo. —Uh...pues, entonces nos vemos a las 8:45 en casa de Tomoko. —Claro—asentí—será noche de Hallowen, así que si pueden vengan con su disfraz. Ellos se sorprendieron a la petición tan repetina, ¿fué mucho? —B-bueno...—continué nerviosa creyendo que dije algo malo—luego pueden ponerse sus pijamas, solo era para hacerlo un poco más divertido. —Pues a mí me gusta la idea—comentó Chica. —Sí, es bastante cómica—le siguió Golden. Eso me subió el ánimo, es muy bonito que los demás apoyen tus ideas. Lo mejor es que Fox--—¡Ja! seguro que aquellos rubios te dijeron aquello por lástima. Eso de disfrazarse es cosa antigua—me comentó de la nada esa voz otra vez. Me tiene harta. —Si te callas...—busqué una opción para así hacer que cierre la boca de una vez—te dejaré escoger el disfraz que usaré. Bueno, usaremos. —Es un trato, muchacha. No hay vuelta atrás—solo asentí a su respuesta y volví al mundo fuera de mis pensamientos. —Jeje..bueno, ahí nos vemos—dije para finalmente irme.Me fuí a mi hogar mientras me arrepentía de dejar a Nightmare elegir mi disfraz. Quién sabe que me hará vestir...

mi pasado me atormenta foxyxtomoko rescritoWhere stories live. Discover now